Lo que pasa en Nebraska se queda en Alaska (Pausada)

《Capitulo 5》El contrato

-Joder a mi también me echaron.

-Oye... tranquila Char, todo se solucionará, a parte char, eres la más amada de la banda... se arruinarian si no estás-. Confirma ozuna

-Hey, que yo también estoy aquí, y también soy importante-. Le rectifica Vane

-Claro que lo eres, todo grupo nesesita a un yonqui -. Después de que Vane le pegara con la almohada repetidas veces, preguntó el rubio -. ¿Cómo se llama vuestra banda?

-Sweet babies...

-Espera ¿son parte de la empresa Artigas?, saben que Mónica Mayora trabajo allí.

-¿Quién coño es esa tipa?-. Pregunta Vane con cierta extrañeza.

-Que inculta Vanesa enserio, es la mejor guionista de cine que existe-. Después de un suspiro encantador el prosiguió a decir lo siguiente-. Quiero ser cómo ella...

-Pues vete cambiando el género, bueno quien sabe quizás que así si seas guapo-. El rubio cogió unos almohadones y empezó a pegarle a Vane,Vane también cogió algunos y empezaron a pegarse mutuamente.

-No es por nada pero, les recuerdo que la pobrecilla de Char está mal-. Yo seguía llorando y ellos se miraron y se acercaron a mi.

-No te preocupes Charlie, puedo conseguirte trabajo mientras areglas el tuyo-. Dijo Sam amablemente.
Tengo que decir que es todo un detalle por su parte, ya que siempre está de mal humor y gruñendo, a no ser que moleste a Vane o haga alguna maldad.

-Si bestie, todo estará bien... eres muy buena bailarina y cantas genial, de seguro encuentras otra banda mejor.

-Normal, cualquier banda en la que no esté Vane será placentera a la hora de escuchar-. Comenta el rubio-. Enserio Charlie, no te preocupes, ya saldrán de esta. -Dice el rubio y luego me guiña un ojo-. Por mientras podrías ayudarme, me he quedado sin secretaria y bueno... según me entere estas estudiando Marketing y publicidad, tengo una empresa que va justo de eso, si quieres puedes trabajar conmigo.

Tengo que admitir que esa propuesta era muy tentadora, participar en la cadena de empresas de los Morwell ya te aseguraba un puesto alto en alguna empresa importante.
Decidí asentir y lo mire agradecidamente, el se mostró indiferente y llamo a Duncan.

-Abogado mío, hazle un contrato de trabajo a estas dos.

-Si mi Lord, vos sois muy bondadoso conmigo al darme más trabajo del que nesesito.

-Jaja, quien te manda a ser abogado.

Duncan se encerró en la habitación de Sam y empezó a escribir en el ordenador de Sam.
Yo y Vane por otro lado decidimos pedirle a Laura que nos envíe nuestra ropa a la casa de Duncan y Sam.
Unas horas más tarde, Duncan, ya tenía el papeleo listo, Sam y nosotras firmamos, ambas seríamos sus secretarias, antes de firmar li leí y me percaté de algo que no había notado.

-¿Te llamas Logan Samuel?-. Todos esperamos su respuesta atentamente, bueno en realidad nosotras, ya que Duncan ya sabía la respuesta, ya que se le veía una ligera sonrisa.

-Si, mi madre es muy fan de X- Men vale, no me molestéis, he sufrido toda la vida por mi puto nombre-. Se le veía muy serio, se ve que de verdad le afecto mucho.

-No te preocupes te entiendo perfectamente... yo me llamo Charlotte por "La Telaraña de Charlotte".

-Y yo me apellido Morales, Vanesa Morales, cómo spiderman negro, Miles Morales.

-Y que dejáis para mi yo me llamo Duncan Chayanne Novak Andersson.

-Eres el padre de toda nuestra generación-. Después de el comentario de Sam todos nos comenzamos a reír del pobre segundo nombre de Duncan.

-Que te calles x-Men pijo-. Vanesa y yo no parábamos de reír, no era tan gracioso, pero creí que en ese momento lo necesitábamos, y creo que los chicos lo sabían, ya que ambos se miraban mucho antes de comentar algo, como si tuvieran planeado ir de gracia todo el rato.

Llego la hora de la cena, Duncan, Vanesa, Sam y yo estábamos cambiando las cosas, ya que nos íbamos a quedar mucho tiempo los chicos decidieron dejarnos la hanitacion de Duncan, para que durmamos Vanesa y yo y los chicos dormirian en la habitación de Sam.
Vane y yo no hicimos casi nada, con el pretexto prejuicioso de que los hombres tenían más fuerza solo los ayudamos a mover la ropa y la colección de funkos de Duncan, mientras que Sam y Duncan deshicieron e hicieron otra vez los cuatro muebles que tiene Duncan llenos de libros de derecho, romance, terror y cómics de súper héroes.

Luego de nuestro arduo trabajo, Vane pidió comida a domicilio.
Pidió alitas del KFC para Sam, unos spagettis para Duncan, una lasaña para mi, una Hamburguesa para ella y por último 3 cervezas para ellos y para mi una coca cola.

Comimos todos despacio y tranquilos, nos pusimos a ver Jurassic Park.
Todos amabamos estas películas, Duncan por qué le encantaban y ya, Sam amaba la narrativa, los diálogos y las intervenciones, aunque según descubrí, su película favorita era la misma que la mía "Forest Gump"

-Peliculón.

-Pues si conciencia.

Es su favorita por lo mismo que Jurassic Park, solo que por dos, agregando que todos los personajes estaban muy bien desarrollados.
A Vane le encantaban por qué ama los dinosaurios.
Y a mi simplemente me encantaba por lo mismo que el resto.

Todos terminamos de comer, nos sepillamos los dientes, nos turnamos para ir al baño y al final todos nos acostamos, bueno todos menos Sam que se quedó mirando el techo, fue a la cocina, se cogió una cerveza y salió a la terraza a fumar.
Yo no podía dormir, así que también salí a la terraza a hacerle compañía.
Me encontré con Sam llorando y deprimiendose en silencio.

-¿Qué te paso?, ¿te hemos molestado?-. Preguntó rápidamente en un tono amable y pasivo.

-Nada-. Respondio mientras se secabs las lagrimas-. ¿Qué? acaso no puedo estar en mi terraza.

-Claro que si, pero llorar en silencio no es te hará bien, te lo digo por experiencia propia.

-¿Dices que es mejor que diga lo que me pasa?, ¿a quien? ¿a ti?-. Hizo una pausa grande-. Vamos Charlie si no te conozco de nada.

-Soy Charlotte, deja de decirme Charlie-. Me tome unos minutos para mi y el me ofreció su cigarro, yo lo rechazen y el siguió fumando, estuvimos unos cuantos minutos mirando a la nada.
Hasta que decido hablar-. Lo de hablar con alguien no me refería ni a mi ni a Vane ni a alguien como nosotras, me refería a alguien a quien le tuvieras confianza.

-Ya... la única persona a la que le tengo confianza, está muy liada actualmente, no le quiero agregar otra desgracia más a la vida.

-Yo creo que deberias decircelo, si de verdad le importas le daría igual el resto y te ayudaría. -Le observe, parecía que mis palabras hubieran hecho efecto sobre él -. No sé lo que te pasa, pero créeme que lo mejor que puedes hacer es desahogarte. -Entonces se me ocurrió una muy buena idea-. Coge tu coche nos vamos a desahogar-. Sam me miró atentamente, pero me hizo caso y me presto algo de ropa para que no me diera frío en la noche.
Yo llevaba una sudadera de los X-Men, una chaqueta que me quedaba enorme de Sam y unos pantalones atados, cuando Sam lo vio decidió parar en una tienda y comprarme pantalones y más ropa, para mi y para Vane. Mi ropa estaba tardando en llegar, Laura me la había mandado por correo y no llegaba.

Nos subimos a su coche y marque en el mapa un desguace abandonado, cuando lo hice Sam no podía asimilarlo y no comprendía lo que yo quería hacer allí.
Así que sería una especie de sorpresa