Lo que pasa en Nebraska se queda en Alaska (Pausada)

《Capitulo 9》Saúl

—¿Y Sam?—.Pregunta Duncan asustado.

—Cogió su chaqueta y se fue a fumar... ¿siempre lo hace?—.Explica y pregunta Vane.

—Él... es complicado, es que no tiene adicción al tabaco como la mayoría de la gente que lo consume—. Vane y yo le miramos atentamente—. El solo fuma cuando se estresa o cre que está a punto de tener un ataque de nervios, es súper extraño, si... pero a el le funciona.

—¿Pero por qué se va de casa?, ¿Por qué  no fuma adentro?—.Pregunta Vane

—Soy asmático y su mejor amigo, no quiere matarme—. Dise Duncan entre risitas.

De repente escuchamos la puerta de la entrada, minutos después aparece Sam con donuts y cafés para todos.
Nos da las donas junto con un mini plato y a Duncan le pasa el café para su taza de café de R5.

—Hoy se celebrara la fiesta de cumpleaños de  Clara.

—¿Es la de la chica Analfabeta que se enamora del mejor amigo, de el hijo de puta que la violo/ su novio?—.Pregunta Duncan.

—Si, pero ella es mucho más que eso... —Sam no parece contento por la pregunta de Duncan.

—¿La emitirán en directo por Twitch?—.Todos nos sorprendidos cuando le escuchamos decir a Sam lo siguiente—. Tengo cuatro pases para ver la fiesta, estaba pensando en invitaros.

—¡Si!—. Exclama Vane muy enérgica.

Duncan nos llevó al centro comercial para comprarnos unos vestidos nuevos para llevar al la fiesta, Vane no quería uno muy largo, pero Duncan decía que se le veían monisimos.

Inseguridades entrando al chat.

Y es que es verdad yo también tenía mis inseguridades, yo tenía mucho pecho y no tenía la panza muy delgada, si era delgada pero a mis ojos no lo era.
Sin contar con mis piernas gorditas

—Chicas... os veis monisimas, no deberían prohibiros de llevar estos vestidos, es vuestro cuerpo y en lo personal... estáis ambas genial... lo diría de otra manera pero no quiero faltarles el respeto.

Duncan siempre siendo un considerado

—Duncan mira mis piernas son muy largas y flacas y estoy muy plana—. Se queja Vane.

—Hey tus piernas son preciosas, sabes lo  bien que te quedan los vestidos largos que tienen una abertura para que salga la pierna, ufff están hechos para ti.—Duncan le sonrió a Vane y ella se tranquilizó

—Y tu, deja de mirarte la pierna con odio—. No se como, pero el noto que yo al mirarme al espejo pellizco mis piernas.

Manias

Es extraño que lo haya visto, ya que sus ojos y toda su atención estaba centrada en Vane—. Las piernas gruesas también están bien, y tus pechos también.—Me tendio un vestido—. Tu lleva este.

—Mira Duncan... he ido a la tienda de al lado, he comprado esto para mi hermano—.El extraño saca un traje azul de terciopelo.

—Duncan ayuda, no me lo quiero poner—.El rubio le mira con cara de perro atropellado por un camion que iba a 2.000km por hora.

—Chicos tranquilos, podemos llegar todos a un acuerdo, Saúl no le gusta el terciopelo a tu primo y Sam, comportarte si, igual te tienes que comprar uno—. Dise Duncan.

—Pero Duncan no hay beige... —.Explica Sam

—Los beige ni gracia tienen—.Critica Saúl.

—Tu no tienes gracia—.Contrataca Sam

—¿No conoces más colores?—.Pregunta Saúl con un leve enfado

—¿Y tu no conoces más personas a las que molestar?—Pregunta Sam más enfadado que su primo.

—Parad chicos... estoy ayudando a las chicas, luego iré con vosotros, Saúl regresa ese traje—.Los primos no rechistaron y se esfumaron.

—Bueno chicas sigamos.

Duncan nos ayudo a encontrar los vestidos perfectos, teniendo en cuenta nuestras inseguridades.
Duncan no estaba contento con el resultado así que nos obligo a comprar también otros que no cumplieran con nuestras inseguridades, él nos propuso que para el siguiente verano lo llevaremos. Él nos ayudaría a superar nuestras inseguridades.

Después de elegir y pagar los nuestros nos dirigimos a una tienda de trajes masculinos.
Sam estaba modelando un traje beige que le había encontrado la dependienta, voltee a ver a Vane y ella estaba sonrojada.

—¿Te gusta mi traje Spidergirl?—.Dijo el rubio coqueto.

—Pues si... cre..—. De repente Sam soplo un mechon de pelo que se colo en su frente y Vane se volvió a sonrojar.

—Me alegra que te guste—. Le dise  el rubio luego de dedicarle una sonrisita sospechosa a Vane.

Mmm ¿Qué les pasa a estos dos?

—¿Charlotte te gusta?—.Duncan sale del probador con un traje negro, clásico que nunca falla.

—Amm si.. —Digo torpemente.

—Me gusta.

—No te lo ha preguntado a ti sopenco—.Pelea Sam

—Perdona has escuchado algo princesa—.El coloco su mano en mi hombro—. Es que me pareció escuchar a un retrasado.

—Chicos... —Advirtió Duncan.

—Tranquila mamá no pasa nada—.Saúl me observa de pies a cabeza—.Soy Saúl, pero tu me puedes llamar el amor de tu vida o futuro esposo lo que prefieras.

Me quede observándolo perpleja, Duncan levantó una ceja y revoloteo los ojos, en cambio Sam negó con la cabeza y Vane, pues miraba los trajes.

—Soy Charlotte, puedes decirme o Char o lotte... como quieras.

—Pues me gustaría llamarte mi mujer—.A Vane y Sam se les escapa una risita, yo me sonrojo.

Jamás nos habían hablado así

ya, es extraño 

—Ella es una mujer libre y no es de nadie y te invite para que ayudes a tu primo, no para que te pongas a ligar—.Exclama enfadado Duncan.

—Vale tranquilo macho.

Hartos de elegir ropa Saúl nos invita a cenar en un bufet, Duncan como siempre come espagettis, Sam sushi, Vane del plato de Sam y Saúl cogió pizza, al igual que yo.

—Mira Charlotte has encontrado a otro adicto a la pizza—.Exclama Sam.

—Ya tengo quien entienda mi adicción—.Todos nos reimos menos Duncan.

—Yo también la entiendo—.Se apresuró a desir Duncan.

—¿Eso que noto son celos Sam?

—Yo creo que si Spidergirl.

—¿Te gusta Char Duncan?

—No y ¿Comó van las cosas con Aroa Saúl?, ¿siguen juntos? O ya la has cambiado como sueles hacer siempre— Duncan recalcó el siempre.

—Uuh—. Empezaron a decir Sam y Vane.

—Bien... si seguimos juntos...