Capitulo 2

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Dismnesia: Se denominan así a las alteraciones cualitativas de la memoria. Comprenden los siguientes trastornos: alomnesias, paramnesias, falsos reconocimientos de personas, confabulación, mentiras patológicas, delirio amnéstico y criptomnesia.

— ¿Paramnesia? — preguntó el español confundido.

— Es un tipo dismnesia, el paciente puede tener recuerdos falsos, crea escenarios en su cabeza que nunca ocurrieron. — explicó brevemente.

— Doctor, ¿puede curarse? Me refiero a, ¿volverá a la normalidad en algun momento? — Carlos preguntó con cautela.

— Lo hará, su cerebro no sufrió ningun daño severo, este estado será temporal, gradualmente comenzará a ordenar sus recuerdos y su mente se aclarará. — sonrió. — Pero debemos ser cautelosos, no debe sufrir ningun shock hasta entonces, necesito que finja frente a el que todo lo que cree es cierto.

— ¿De que habla? Yo no puedo fingir ser su novio, no soy gay. — negó rápidamente.

— Entiendo su postura señor Sainz, pero es necesario que lo haga. — lo miró. — Verá, la mente de Charles en este momento está muy confusa, darle una noticia como esta, solo lograría que el shock fuese mayor y podría ser contraproducente.

— ¿Dice que Charles podría no recuperarse si le dice la verdad?

— En pocas palabras, si, eso es lo que podría suceder.

— ¿Cuanto tiempo durará en este estado?

— Tal vez unos dias o podrían ser semanas. — le dió una tarjeta. — Puede llamarme si algo mas le ocurre, lo daré de alta hoy.

El español asintió, saliendo del consultorio, encontrándose a Binotto afuera.

— Carlos, ¿que te han dicho? ¿Como está Charles? — preguntó con genuina preocupación.

El español entonces le explicó todo, sin omitir ningun detalle, mientras el asentía.

— Bien, ambos deben tomarse un descanso despues de todo. — el lo miró y justo cuando Carlos iba a protestar, señaló su mano. — Tienes la muñeca fracturada Carlos, no puedes conducir de igual forma, además, Charles necesita que hagas esto por el, no puedes permitir que empeore para el, son compañeros, tu deber es apoyarlo en este momento.

El español asintió a regañadientes, mientras era empujado a la habitación del monegasco, quien ya se encontraba solo y vestido, listo para irse.

— Charles, ¿como te sientes? — Binotto le dio una sonrisa.

— Estoy bien, yo lo siento. — murmuró apenado. — Lamento el desastre que causé.

— No debes preocuparte por eso chico. — palmeó su hombro. — Carlos y tu estarán fuera por unos días, ambos deben sanar sus heridas, no quiero verlos hasta entonces.

Sentenció con una suave sonrisa, entregándole unas llaves.

— El equipo consiguió una pequeña casa para que descansen estos dias, llamenme si necesitan algo. — se despidió de ambos y salió, dejándolos solos.

— ¿Estas molesto conmigo? — preguntó el monegasco con timidez, dejando ver pequeñas lágrimas formándose en sus ojos. — Lo siento, yo perdí el control, no quise golpearte, ni lastimarte, también lamento todo lo que dije antes de la carrera, yo estaba molesto.

El español se compadeció un poco, recordándose a si mismo que Charles creía que el era su novio, así que por lo.menos podía intentar comportarse como tal.

— No estoy molesto Charles, no podría estarlo, no fue tu culpa. — lo miró. — Vamos a casa, debes descansar.

El monegasco lo miró aun sintiendo que algo no estaba bien entre ambos, Carlos no solía llamarlo Charles, usualmente usaba algun apodo cariñoso.

Aun así asintió, levantándose de la camilla del hospital, pasando frente al piloto español y dándole una ligera mirada, apoyando su mano en el antebrazo izquierdo del otro, haciéndolo tensar de inmediato.

— Puedes estar tranquilo Carlos, no tomaré tu mano para salir de aquí, se que no quieres que nos vean. — le dio una suave sonrisa triste, saliendo de la habitación.

Carlos entonces suspiró, ¿que tan confundidos debian estar los recuerdos de Charles que al parecer el era un idiota en ellos?

Negó, una mueca de fastidio surcaba su rostro, mientras se encaminaba también hacia las afueras del hospital.

El viaje rumbo a la casa que compartirían fue silencio, Charles parecia ir perdido en sus propios pensamientos, mientras Carlos pensaba en todo lo que estaba sucediendo, lo extraño de la situación y lo difícil que era esto para el.

Llegaron hasta la casa, era un lugar bonito, dos pisos, un pequeño jardin y una bonita terraza desde donde podías ver el mar, aunque lo mejor de todo era que no tenian vecinos cercanos, la casa estaba alejada del resto, así que ambos tendrían la privacidad que necesitaban.

Charles subió directo a la habitación, cargando su pequeña maleta y yendo directo al baño, realmente necesitaba una ducha para relajarse.

Al salir observó a Carlos, quien parecia estar distraído y se acercó, pasando lentamente las manos por sus hombros, hasta llegar a su pecho.

El español se tensó al momento, levantándose rápidamente y dejando al monegasco aun mas confundido.

— Ah Charles, deberías descansar. — murmuró.

— ¿Estas molesto conmigo cierto? — lo miró, las lágrimas estaban a punto de brotar de sus ojos. — Te juro que no lo hice aproposito, yo sería incapaz de dañar tu carrera y mucho menos causarte una lesión como esa.

— Charles, yo se que no fue tu culpa. — el español se acercó nuevamente a el, abrazándolo, no sabia porque, pero odiaba verlo llorar. — Lo siento, lamento comportarme extraño, pero es que todo esto me está volviendo loco.

Charles asintió, creyendo que se refería solo al accidente.

— Siempre dices lo mismo. — sonrió, quitando sus lágrimas.

— ¿A que te refieres? — preguntó Carlos confundido.

— Siempre dices que te vuelvo loco. — rió.

— Es porque es así. — Carlos decidió no contradecirlo, si iba a fingir que era su novio, lo haría bien, Charles debía recuperarse.

— Estoy cansado, ¿quieres ver una película conmigo? — preguntó el ojiverde, aunque era una pregunta retórica, pues ya lo estaba guiando a la habitación.

Se recostó, atrayéndolo a su lado, mientras colocaba una pelicula aleatoria en Netflix y se acurrucaba al costado del español, logrando incomodarlo al punto de no prestar atención a la película, sino a la sensacion de calor en su cuerpo.

El monegasco pronto cayó rendido por el cansancio, abrazándose aun mas a el, mientras dejaba un suave beso en su mejilla y un apenas audible "buenas noches ".

Y Carlos negó, no sabía cuanto tiempo podría soportar eso, Charles era alguien naturalmente adorable y aunque el no era gay, le tenia cierto cariño, así que temia el momento en el que el ojiverde descubriera que lo había engañado, porque aunque todos dijeran que era por su bien, el español lo seguía sintiendo como un engaño.



¡Gracias por leer!❤

Paramnesia ||• Charlos •||Where stories live. Discover now