Capitulo 3

3.6K 395 186
                                    

Dentro de las paramnesias del recuerdo están los siguientes:

~ Deja vu: es un tipo de paramnesia del reconocimiento, descrita por Emile Boirac (1917), como un fenómeno de tener la seguridad de que una experiencia sensorial que se vive en la actualidad se ha experimentado en el pasado.
~ Jamais vu: este fenómeno hace referencia cuando una persona tiene la sensación de que no es capaz de reconocer una situación, un lugar, una palabra o a una persona a pesar de que los demás contradigan que racionalmente debería resultarle familiar o conocido

Al día siguiente Carlos despertó sintiendo una extraña prisión encima de su cuerpo, mientras abría los ojos, encontrándose con Charles o al menos la mitad de el, encima de su cuerpo.

— Charles... — susurró, queriendo saber si el ojiverde se encontraba despierto.

— Mmju. — murmuró somnoliento.

— Estas encima de mi. — dijo con un rastro de diversión, empujándolo ligeramente.

— Si, es algo que quisiera. — respondió jugueton, haciendo que las mejillas de Carlos se tiñeran de rojo por la vergüenza. — Buen día mon amour.

El monegasco sonrió, dejando un descuidado beso sobre sus labios, antes de levantarse e ir directo al baño.

El español se quedó pasamado, intentando procesar lo que había sucedido, si, era claro que pasaría rn algun momento, después de todo Charles creía que eran novios, los besos eran normales para el.

— Quiero ir a dar un paseo hoy mon amour. — salió del baño, cepillando sus dientes. — ¿Recuerdas la ultima vez que estuvimos aquí? Me prometiste que iríamos a dar un paseo la siguiente vez que volvieramos.

— Oh, por supuesto. — asintió, obviamente mentía, pues eso nunca había ocurrido.

— ¿De verdad? — preguntó contrariado. — Creí que dirías que no, ya sabes, habrá mucha gente y podrían reconocernos, yo se que no te gusta que nos vean juntos...

Su voz poco a poco se fue apagando, mientras Carlos lo miraba confundido, ¿enserio en su ficticia historia de amor el era un patan? No podía serlo, si Charles fuese realmente su pareja, se aseguraría de hacerlo feliz, no de ocultarlo al mundo, eso era estúpido e iba en contra de sus principios. 

— Eso es una tontería Charles, por supuesto que no me importa si alguien nos reconoce. — negó, haciéndolo sonreír. — Vamos, te llevaré a dar el mejor paseo de tu vida, pero debes ponerte zapatos cómodos, caminaremos mucho.

El monegasco sonrió emocionado, lanzándose a sus brazos, besándolo nuevamente, esta vez demorando aun mas el beso y para extrañeza de Carlos, esta vez no intentó apartarlo.

— Te amo mon soleil. — sonrió, para después entrar en el baño y darse una ducha.

Carlos negó, no, tal vez esa había sido una mala idea, tal vez no debía dejar que los vieran en publico, las personas podrían tomarles fotos, podrían publicarlas, podrían arruinar las carreras de ambos, la formula 1 no estaba realmente preparada para algo así.

Se golpeó mentalmente, ¿de que hablaba? El no era realmente pareja de Charles, no tenia que preocuparse por algo que no era mas que un teatro, uno para ayudar a la mente confundida de Charles.

Media hora después ambos salian de la casa, recorrieron Monza completamente, Charles llevaba una camara instantánea, con la que solía tomar fotos de todo, menos de ambos juntos, Carlos quería preguntar porque no lo hacia, pero decidia callar, era mejor así.

— Estoy agotado. — el menor suspiró. — ¿Te apetece comer algo?

— Esa idea me encanta. — asintió de acuerdo el español, mientras ambos entraban a un pequeño restaurante.

— Es mi turno de elegir que comeremos. — sonrió divertido, mientras Carlos lo miraba sin comprender. — No me mires así, tu ordenaste por ambos la vez anterior, esta vez es mi turno.

— ¿Cuando? — el español lo miró.

— Oh vamos, ¿no lo recuerdas? Nuestra cena en Madrid el mes pasado, ese dia fue tu turno, recuerdo que me ordenaste  un delicioso gazpacho. — lo miró achinando los ojos. — Esta vez pediré yo, es mi turno, pero no te preocupes, conozco tus gustos, te pediré algo delicioso.

Sainz no podía negar que sentía intriga por ver que era lo que el monegasco pediría para el, realmente no eran tan cercanos, no al menos para conocer los gustos de ambos.

— Para el caballero traiga por favor Ossobuco. — sonrió. — Para mi una Ensalada Capresse está bien.

El mesero asintió, yéndose y los pilotos comenzaron a charlar entre ellos, Carlos tenia curiosidad, quería saber que tan confundida estaba la mente de su compañero, pues no había nada que quisiera mas en el mundo que ayudarlo.

— He querido preguntarlo desde que te vi, ¿por que tomas fotos con esa camara y no con tu celular? — el español lo miró con curiosidad.

— Creo que el golpe afecto tus recuerdos trésor. — Charles sonrió divertido. — ¿No lo recuerdas? Tu fuiste quien me la regaló en mi cumpleaños, dijiste que con ella podía capturar todo lo que me gustara, que sería mas seguro que tomar fotos privadas con un celular, aunque no debes preocuparte, no tome ninguna que pueda comprometerte.

— Charles yo no... — Carlos negó, definitivamente era un idiota en los recuerdos falsos del ojiverde.

— Está bien amour, yo, lo comprendo. — sonrió. — Se que no quieres arriesgar todo por lo que has luchado, no te reprocharía jamas eso. 

El español asintió, ¿y si le decía la verdad? ¿y si acababa con todo de una vez? La suave sonrisa del monegasco lo trajo a la realidad, no podía hacerle eso, Charles era un angel, no podía permitir que su mente lo dañara.

— Pareces cansado, ¿que tal si volvemos a casa después de comer? — los orbes del monegasco se enfocaron en el con preocupación. — Fue un accidente muy fuerte, tal vez no debimos hacer esto, quizá lo mejor habría sido quedarnos en casa y descansar.

— Estoy bien Charles, solo un poco cansado. — lo tranquilizó. — Pero si, tal vez seria mejor volver a casa.

Continuaron hablando de otraa cosas, generalidades a decir verdad, nada incomodo, al contrario, a Carlos le sorprendió darse cuenta de que en realidad disfrutaba mucho de la compañía del menor, era muy dulce y agradable, además de que era gracioso y todo eso sin darse cuenta, pues el monegasco parecia ignorar lo increíble que era.

Detuvo sus pensamientos en ese momento, ¿que demonios le pasaba? El no debería estar prestando atención a esos pequeños detalles de su compañero, el no era gay, solo sentía aprecio por Charles, nada mas que eso.

¡Gracias por leer!❤

Paramnesia ||• Charlos •||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora