Tales of Kingdoms: Shinigami

Acto de fe

Han pasado tres semanas desde que he empezado a entrenar con Cloake. Es buen profesor, me enseña cómo y dónde golpear, tácticas, estrategias... Además me ayuda con el entrenamiento para formar mi cuerpo. Eso sí, no he podido evitar llevarme unos moratones en los brazos y piernas. Kyanna entrena conmigo, es muy simpática y congeniamos al instante (exceptuando el contratiempo que tuvimos, obviamente). Es realmente poderosa, y con mucho talento. En fin. Hoy empezaré mi primera clase con Zeit. Estoy muy nervioso, pero no sé. Supongo que será algo nuevo.  

Siguiendo la rutina que adquirí hace tres semanas, me levanto, me aseo y bajo al comedor del gremio. 

-¿Qué, lo de siempre, Karssai? 

-¿Y qué va a ser si no, Tranan? -respondo al corpulento tabernero. 

Me pone un trozo de pan, gachas y una bebida similar al café mundano salvo por su color azulado, llamada atore. Apuro las gachas con el atore, y me como el trozo de pan de camino a las mazmorras, donde me espera Zeit. Sin embargo, al bajar noto un ambiente extraño. Y un frío poco habitual inunda mis huesos. Sigo bajando, y encuentro a Zeit, de espaldas, mirando a las rejas rotas de una celda al final del pasillo. Él es el origen del frío, y cada vez que camino hacia el un zumbido comienza a tener cada vez más potencia en mis oídos. Y ahora, aparecen las mismas alas que sacó el día que llegué a este mundo. Un ala de ángel, otra de demonio. 

-Eh... ¿Zeit? Soy Karssai, ya he llegado

Al oír mi voz, se sobresalta, y hace desaparecer sus alas. 

-Vaya, pensaba que vendrías más tarde. No es muy común que los novicios vengan tan pronto -dice, nervioso.

-Bueno, me lo tomaré como un cumplido -sonrío- ¿Y... por qué tendré que entrenar contigo a partir de ahora?

-Tú no. Nosotros -una voz aparece al principio del pasillo. Me doy la vuelta, y es Kyanna. No era algo inesperado, la verdad. Tenemos el mismo nivel, así que era obvio que la pasasen conmigo.

-Oh, Kyanna, ya has llegado. A ver, Karssai, ahora tendréis que entrenar conmigo, porque ahora tendréis que aprender otras cosas. Hoy, aprenderéis eso que llamáis magia.

-¿Acaso no lo es? -dice Kyanna con cara incrédula.

-Bueno, en parte sí y en parte no. Es magia el fenómeno, no el procedimiento. En realidad todo es fe. Si crees, ocurre. Si no, no. Nosotros, los sirvientes, usamos la prana, un tipo de energía que podemos absorber del aire. Lo absorbemos por la coronilla de la cabeza, por los dedos y las palmas de pies y manos. Y además, la prana es más abundante por la noche, por lo que nos viene mejor para hacer nuestros trabajos. Ahora, quiero que visualicéis mentalmente que absorbéis por las manos prana. Sólo creed en la prana, y levantad las manos a la altura de los hombros. Creed en la prana. Pensad en la prana. Uníos con la prana. Sois prana.

A la vez que dice eso, nosotros hacemos lo que dice. Y empiezo a pensar. Me concentro, y noto algo de frío en las palmas. Me concentro más, y empiezo a notar el frío en los huesos de las manos. 

-Bien, bien, lo estáis haciendo genial. Supongo que por esto Cloake dice que tenéis talento. Muy bien. Ahora, os enseñaré a invocar un aura que potenciará vuestra fuerza, os hará más veloces y pensaréis con más claridad. El Aura Nexo. Simplemente, es absorber prana, e intentar distribuirla por todo el cuerpo. Para poder distribuir la prana por el cuerpo, tenéis que visualizarlo. Imaginarlo. 

Esta vez lo intento, pero me cuesta imaginarlo. Lo intento dos veces más, pero no puedo. Seguimos media hora haciendo eso, con Zeit dándonos consejos, y vamos entendiendo el concepto. Imaginaos que estáis en un bosque. Y hay lobos persiguiéndoos. De repente, encontráis un río que no es muy ancho, pero que tiene muchísima corriente. Tenéis dos salidas, o esperar y que vengan los lobos, o saltar el río. Miráis la distancia, y decís: "No, no puedo". Sin embargo, veis que los lobos se acercan poco a poco. Y entonces, decidís. Hay que saltar el río. Corréis, dais un salto, pero justo os quedáis en el límite. Lo saltáis, y decís: "He hecho un acto de fe". Y justo entonces os resbaláis. La corriente es muy fuerte, y aún así, nadáis lo más rápido que podéis. Y conseguís llegar a una orilla. Y subís a la orilla. Entonces, ahí decís: "He hecho un acto de fe, con esfuerzo". Esto es igual, hacéis un acto de fe, con esfuerzo y cansancio. La gente hace actos de fe, cosa que no les cuesta nada. Pero la gente que hace un acto de fe, y se esfuerza para que se haga realidad, es eso. Al absorber la prana, me di cuenta que cuanta más prana absorbes, la temperatura corporal va bajando gradualmente. 

Vuelvo a absorber prana. Mis brazos se agarrotan. Sigo absorbiendo prana. Esta vez, mis piernas se suman a los brazos. Aún así, sigo. Todo mi cuerpo está entumecido y agarrotado. Y cuando creo que no puedo más, vuelve el calor a mi cuerpo, todo de golpe. Abro los ojos, y veo a Zeit con la misma mirada que me dirigió cuando salvé a Celia en el portal. Una mirada de aprobación. 

-Supongo que lo he conseguido -digo.

-Pues sí, pero Kyanna lo consiguió antes. Pero como estabas tan concentrado, te dejamos. Aún así, ambos lo habéis hecho muy bien. Si os digo la verdad, no pensaba que lo conseguiríais tan rápido.

Me giro, y veo a Kyanna sentada con la espalda en una celda cercana. Cuando me acerco, veo que tiene el pelo negro y rojo en las puntas. Me mira, sorprendida, con unos ojos rojos que no tenía antes.

-¿Eh? ¿Por qué no tienes el pelo negro como yo? -se dirige a Zeit- Zeit, ¿por qué no tiene el pelo como yo?

-Ah, eso es porque cada uno tiene un Aura Nexo diferente. Ya os lo explicar...-Es interrumpido por un estruendo repentino arriba -¿Qué? ¿Qué es eso? -un atisbo de duda aparece en su rostro, que es sustituido por una firmeza que se asienta en sus ojos color azabache. 

-¿Qué hacemos, Zeit? -dice Kyanna, nerviosa.

-¿Qué va a ser? Subir, obviamente -dice, con una sonrisa.