Capítulo III

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Me despierto en una cama que,desde luego, no es la mía. Observo la habitación en la que me encuentro y cuando mi cara se dirige al lado izquierdo de la cama me encuentro con Pedri,el cual parecía sumido en un profundo sueño.
Con cuidado de no despertarle me levanté de la cama. Suspiré aliviada al ver que aún seguía con el mismo vestido que anoche puesto ya que al ser así, probablemente, no haya pasado nada sexual con el canario.
Cogí mis tacones y caminé sin ellos por el frío suelo hasta llegar a la puerta del dormitorio. Cuando la abrí me encontré en un pasillo con muchísimas puertas. Efectivamente,me encontraba en la habitación de Pedri y justo en frente estaba la de Gavi.
No se me ocurrió otra cosa mejor que hacer que tocar la puerta de la habitación de Pablo.

-Oye,donde est- iba a decir algo al notar como la puerta se abría pero el chico que estaba en frente de mi no llevaba más que una toalla atada a la cintura haciendo que mis ojos recorriesen su cuerpo de arriba abajo.

-Qué? Te has quedado sin palabras al verme así?- pregunta Gavi con una sonrisa arrogante en el rostro.

-Claro que no idiota- digo apartando la mirada avergonzada.

El chico ríe y se aleja dejando la puerta abierta.

-Que haces?- pregunto confundida.

-Puedes pasar. No te voy a comer aunque eso sea lo que quieras...- dice mirándome.

Gruño y entro en la habitación cerrando la puerta detrás de mí.

-Donde estamos?- pregunto cruzandome de brazos.

-No tienes ni idea del Barça verdad?- pregunta Gavi volviendo al baño.

-Pues no.

-Estamos en La Masía guapa- dice poniéndose una camiseta.

Me giro quedandome de espaldas al ver como no tiene intención de cerrar la puerta del baño para vestirse.

-Y ahora yo como vuelvo a casa- bufo y me paso las manos por la cara estresada.

-No vayas- dice con simpleza.

-Como no voy a ir? Tengo una hermana pequeña que cuidar y por si no te habías dado cuenta sigo con el mismo puto vestido que ayer. Y aún por encima no sé qué hago aquí ni porque me desperté en la habitación de Pedri- digo estresada.

-Lo de Pedri es fácil de explicar- dice saliendo del baño- por cierto ya te puedes girar.

Me giro y lo analizo. Esta vez el chico estaba vestido con una camiseta blanca y unos pantalones grises de chándal.

-Explicate- digo refiriéndome al porque me encontraba en ese sitio en esos momentos.

-Bueno te emborrachaste de más después de lo del baño y Pedri te encontró en el sofá tirada durmiendo así que entre los dos te cogimos y te trajimos aquí,que por si no se había notado es donde vivimos la mayor parte del tiempo- hace una pequeña pausa- Pedri dijo que se quedaría contigo por si te pasaba algo y por eso te has despertado en su habitación. Fin de la historia- dice cogiendo su móvil.

-Que vergüenza- digo notando como mis mejillas se ruborizan.

Ríe y levanta su mirada para verme.

-Yo quería que durmieses conmigo pero bueno,es lo que hay- dice con una sonrisa ladina que hace que me derrita por dentro.

-Menudo idiota- ruedo los ojos disimulando mi nerviosismo- volvamos al otro tema. Como cojones vuelvo a mi casa?.

Ocean Eyes•Pablo GaviDonde viven las historias. Descúbrelo ahora