Shut Up| Will Byers

Chapter 20

Hace algunas semanas estuve editando la historia, y en los primeros capitulos el nombre del protagonista ya se encuentra alli

Los ojos de Aslan admiraban impasibles los utensilios de plata frente a él, siendo incapaz de quitar su atención de la forma tan curiosa de estos. Con cuidado se inclinó para agarrar los que permanecían inmóviles, ignorando a los que poseían un color apagado y que se interponían uno sobre otros. Era sorprendente la cantidad de estos, junto a pequeños recipientes de comida en la habitación de Eddie

Lo primero que vio fue una imagen distorsionada de lo que debía ser su rostro.

La cuchara fue el primer utensilio que se le permitió usar cuando niño, porque todos a su alrededor sabían que no le haría daño. Es amable, te ayuda a resolver problemas de manera gentil, pero es débil, no puede con lo duro, no puede cortar después de todo.

El tenedor ayuda a mantener las cosas en su lugar, es firme, sin lugar a dudas. Alguien tenaz que no puede evitar ofrecerte su ayuda, un poco engreído si lo queremos ver, pero no es un mal tipo.

El cuchillo, por otra parte, a diferencia de los demás, causa dolor. Está hecho para dañar, y está más que claro cuando ves la hoja de borde afilado. No es amable y no piensan en los demás.

Steve

Steve es un tenedor, sin lugar a dudas

Y él un cuchillo

El dúo perfecto

Al menos hasta que el cuchillo pierda su filo

Si lo volviera a ver en este estado, tal vez definitivamente se rendiría con él.

Y sin aliento alguno, el suspiro se perdió antes de haber llegado

Porque era Steve de quien se trataba, no era alguien ajeno a su amor, era Steve. Y tratar de que palabras salieran de lo más profundo de su ser era como el sol y la luna encontrándose.

Amaba a su hermano, vaya que lo hacía, pero le aterraba contarle todo

Porque Aslan Harrington no termina de aceptar su persona

Porque Aslan Harrington no entiende aún todo lo que cursa por su mente.

Porque Aslan Harrington sigue siendo un miedoso

-Me odio-fue lo que susurro, imperturbable, aun con sus ojos en el cuchillo, que, irónicamente, no tenía filo

-Harrington, por ahí tienes un espejo de verdad

Fue lo primero que dijo Eddie al regresar, para después empezar a revortijear todo a su alrededor en busca de algo. Cayeron al suelo estatuillas, cajas y papeles desde lo más alto del guardarropa

Y no fue hasta que su amigo volvió que su vista se posó en la ventana. Era tarde. Muy tarde

-A comparación tuya, yo soy de gustos simples

-Lo dudo ¿Olvidas lo que tienes en tu otra mano?-Eddie a este punto parecía entrar en pánico al no encontrar lo que buscaba, ocasionando que tropezara con el reproductor de música en el suelo, a un costado de su escritorio perteneciente a su tío- Mierda Harrington, usaste todo.

-¿Yo? Tus amigos del otro día son los que se excedieron, yo solo tome una pequeña parte

Sin estar en todos sus sentidos logro responder, aunque estaba seguro de que Eddie había estado hablándole hacía un rato