Narro yo:
Toda la academia Dan Vladimir se encontraba agitada, guardianes preparándose, poniendo a los alumnos en un lugar seguro para que no los encontrarán los Strigoi, las familias reales de igual forma fueron ocultas, y los aquelarres, se preparaban para la guerra.Nadie sabía lo que pasaría, nincuantas perdidas habría o cuanto tiempo duraría, lo único que ellos confiaban y aseguraban, es que ellos ganarían.
TN: ¡PREPÁRENSE INMEDIATAMENTE, EL DÍA FINALMENTE HA LLEGADO!
Aro: vaya, tan dulces recuerdos de mis años de antaño, ¿Quien iba a imaginar que nuevamente volveríamos al campo de batalla?
Marcus: hay que ver si todavía no hemos perdido la practica, hermano.
Caius: No importa cuanto tiempo haya pasado, mi sed de sangre jamás estará saciada y mi espíritu de lucha nunca será apagado.
Los reyes Vulturi estaban listos para luchar, con sus armas en mano y mirada fulminante, dispuestos a dar su vida por el bien de los suyos.
Alec: purificación... es gratificante volver a usar tan maravilloso don.
Jane: vamos a ganar esta guerra, y le pondremos un poco de diversión.
Aro: ¡La victoria, será nuestra!
La presión era palpable, la adrenalina estaba al 100% y el espíritu de lucha de todos los guardianes y Aquelarres ardía como la llama de una gran antorcha, esperando a ser sujetada por su líder, quien los guiará hacia el campo de batalla y les proporcionará la victoria.
Pero... ¿Quien era ese líder? ¿Quien seria capaz de poder guiar a todo un ejército, luchar sin temor alguno, y reclamar la victoria?
La respuesta era simple, solamente era digno, aquel que supo darlo todo por los suyos, que lucho contra viento y marea, que sufrió en grande y pudo seguir adelante, un líder, es aquel que generará la confianza suficiente en su equipo, aquel que inspira hasta aquella alma que se encuentra perdida, un líder... es aquel, al que le darás tu eterna confianza.
Y esa persona solo podía ser... TN.Todos ya se encontraba saliendo de la academia siguiendo un rumbo en especifico, nadie sabía dónde sería el campo de batalla, pero pudieron hacer algunas deducciones gracias a los mapas y a los frecuentes movimientos de los Strigois, llegando así a un claro grande, de nombre Wonderland, debido al aspecto tan mágico que otorgaba, una paz y una belleza solo digna de ese lugar.
Pero dentro de poco, ese bello páramo, estaría cubierto de sangre.
Pues junto como pensaron, frente a ellos, se encontraba un gran ejército de Strigoi, listos para atacar, sus gruñidos era fuertes y aterradores, se sus bocas salían grandes colmillos y sus ojos, tan rojos como la sangre misma, solamente demostraban locura.
Todo se definiría ahí, ya no habría otro momento, nos más luchas después de esta, era vencer o morir, el futuro, la sociedad, la juventud, la vida misma se definirán ahí, ¿todo irá para mejor... o la era de los guardianes, Dhampri y Vampiros se decidirá ahí?
Dimitri: TN, el tiempo ha pasado, y hemos luchado juntos, aprendido y sufrido de igual manera, aunque recientemente llegaste a mi vida, siento que ya no puedo, ni quiero sacarte de ella... no sé que pasará ahora, pero todos lucharemos, y daremos nuestras vidas de ser necesario, y sé.. que si no te lo digo ahora.... quizás no tenga otra oportunidad más adelante.... t-...
Sus palabras fueron cortadas por los labios de aquella guardiana quien había conquistado el duro corazón de aquel gran guardián.
La sensación era magnífica, única perfecta, nunca antes se habían sentido de esta manera, no podían decir con certeza que sentían, pero algo era seguro... una despedida no era.TN: lo que tengas que decir, hazlo después de la batalla, tendremos mucho tiempo después de esto. ¡ESCUCHEN TODOS! el día de la batalla nos ha llegado, y les ruego, que luchen hasta el final, luchen por lo que aman, luchen por los que quieren, luchen por ustedes mismos y yo, frente a todos ustedes y la luna como testigo les prometo que no vamos a caer esta noche, hoy no; porque hoy.... ¡LA VICTORIA SERA NUESTRA!
Todos: ¡POR LA VICTORIA!
Y así, el combate... dio inicio.
ESTÁS LEYENDO
Tu belleza fue mi debilidad Dimitri Belikov y tú.
RandomTe saco siete años, Rose. eso no significara demasiado dentro de una década, pero ahora es un abismo. Yo soy un adulto y tú, una chiquilla. -esas fueron las palabras que Dimitri Belikov le dedico a Rose en aquella ocasión en su entrenamiento, pero ¿...