Capítulo 8

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Una noche, Mono Araña desapareció.

A veces lo dejaban salir por la ventana de la escalera de incendios y se iba al callejón a perseguir ratas o a cazar palomas (Taehyung lo suponía), pero normalmente no se iba más de dos horas y siempre volvía antes de que se fueran a la cama.

Llevaba fuera cinco.

Taehyung sabía cuánto tiempo llevaba fuera Mono Araña porque Jungkook llevaba la cuenta.

"Ya han pasado cinco putas horas" dijo irritado, mirando por la ventana. "¿Dónde estará ese condenado?"

"Conejito, seguro que está bien" dijo Taehyung desde donde estaba sentado en el sofá. "Seguro está espiando por la ventana de esa gatita himalaya presumida de la que está enamorado" Le dio una palmadita al cojín que tenía al lado. "Vamos, ven a terminar de ver la película. Para cuando termine, te apuesto lo que quieras a que habrá vuelto"

Jungkook volvió de mala gana a sentarse a su lado en el sofá, con los brazos cruzados sobre el pecho, mordiéndose el labio. Habían estado intentando ver It: Capítulo Uno, pero Jungkook se levantaba cada cinco minutos para ir a ver si estaba Mono Araña, perdiéndose todas sus partes favoritas y dejando a Taehyung solo para enfrentarse al payaso Pennywise. Había estado usando una almohada como sustituto para enterrar su cara en el hombro de Jungkook porque su novio se levantaba con demasiada frecuencia.

Apenas tres minutos después, cuando Eddie huyó gritando del leproso, Jungkook se levantó de nuevo, se acercó y abrió la ventana esta vez, asomándose por la escalera de incendios a la creciente oscuridad.

"¡Mono Araña, trae tu peludo culo aquí! ¡Ahora!"

"Oh, por el amor de Dios" Taehyung detuvo la película y se acercó a Jungkook, frunciéndole el ceño. "Sabes mejor que nadie que Mono nunca vendrá cuando se le llame. Porque uno, no es un perro y dos, es el puto gato más testarudo que ha existido"

Jungkook echó la cabeza hacia atrás, todavía mirando por la ventana. "No sé por qué no ha vuelto todavía" murmuró, frotándose la mano por el brazo. "Ya debería haber vuelto"

Taehyung quiso repetir lo que había estado diciendo toda la noche, que Jungkook debería calmarse, que estaba seguro de que Mono Araña estaba bien. Pero Jungkook se veía tan ansioso, al borde del pánico, sus ojos recorriendo el callejón, buscando, preocupado.

Taehyung suspiró. "¿Quieres ir a buscarlo?"

Jungkook miró al suelo y asintió, todavía mordiéndose el labio.

Así que, armados con una bolsa de golosinas para gatos, salieron a las calles vecinas de su edificio de apartamentos, en busca de su gato descarriado.

"¡Aquí Mono Araña!" gritó Taehyung, agitando la bolsa de golosinas. "¡Aquí chico!" Se sintió un poco estúpido intentando que un puto gato se acercara a él, sobre todo un gato como Mono Araña, que siempre se hacía el sordo cuando Taehyung o Jungkook lo llamaban por su nombre. Pero en realidad no sabía qué más hacer y al menos quería intentar hacer algo. Por el bien de Jungkook, al menos.

Dos horas más tarde, estaba completamente oscuro, habían recorrido cuatro manzanas en todas direcciones alrededor de su edificio de apartamentos, y todavía no había rastro de Mono Araña. Aunque tenía a otros seis o siete gatos siguiéndolos porque todos se habían acercado maullando a Taehyung para pedirle golosinas y él no pudo decirles que no.

Se detuvieron en un callejón al otro lado de la calle de su edificio y Taehyung repartió más golosinas a la pandilla gatuna. "Parece que conseguimos un buen rebaño" bromeó mientras frotaba las orejas de un gato flacucho.

"Clowder" dijo Jungkook con tristeza.

"Uh... ¿Qué?"

"Un grupo de gatos se llama clowder" dijo Jungkook entre dientes apretados. "No es que nos sirva de algo porque ninguno de ellos es el que estamos buscando, maldita sea"

Pateó salvajemente un cubo de basura, haciéndolo caer por el callejón y los gatos se dispersaron, huyendo del ruido, con las orejas pegadas a la cabeza.

"¡Hey!" Taehyung dijo bruscamente y Jungkook lo miró. "Estoy intentando ayudarte, Jungkook, pero perder los nervios y desahogarte con un cubo de basura no nos ayudará a encontrar a Mono Araña"  Exhaló un suspiro frustrado, pasándose una mano por el cabello. "Yo también estoy preocupado por él, sabes. Pero me duelen los pies, estoy cansado y no estoy de humor para lidiar contigo convirtiéndote en Hulk ahora mismo"

Jungkook parpadeó, sorprendido por el arrebato de Taehyung. Pero luego suspiró y caminó hacia él, deslizando sus brazos alrededor de su cintura. "Lo siento, bebé" le dijo suavemente. "Es que..." Se le hizo un nudo en la garganta y tragó grueso antes de continuar. "Es que estoy muy preocupado por él"

"Lo sé" le tranquilizó Taehyung, frotándole los brazos. "Pero estoy seguro de que está bien. Qué tal esto, vamos a casa y si no está para cuando llegamos, mañana ponemos carteles y llamamos a los refugios de animales ¿Okay?"

"Okay" susurró Jungkook y a Taehyung casi se le rompió el corazón de lo mucho que sonó como un niño pequeño. Un niño pequeño que estaba perdido y asustado.

Cogió a Jungkook de la mano mientras cruzaron la calle hacia su edificio y le dio un apretón tranquilizador. Caminaron hasta la puerta, la abrieron y ahí estaba Mono Araña, sentado en el alféizar de la escalera de incendios, aullándoles como un loco.

Taehyung lanzó un suspiro de alivio. "Dios, ahí está- "

"¡Maldito gato estúpido!" Jungkook estalló furioso. Se acercó a la ventana, la abrió de un tirón y la volvió a cerrar de golpe en cuanto Mono Araña saltó, se enroscó en los tobillos de Jungkook y ronroneó.

"Maldito idiota" gruñó Jungkook, levantándolo. "Juro por Dios que te voy a dar de comer a una manada de putos lobos" Abrazó a Mono Araña contra su pecho, enterrando su cara en el pelaje del gato.

Taehyung abrió la boca para decir '¿Ves? Te dije que volvería' pero se detuvo al ver que los hombros de Jungkook tiemblaban y que estaba abrazando a Mono Araña con tanta fuerza que los ojos del gato se le salían de la cabeza.

En lugar de eso, fue y se envolvió alrededor de los dos, abrazando a su pequeña familia durante unos minutos, sintiendo que las lágrimas le escocían en los ojos. "Vamos" dijo suavemente después de un rato "Vamos todos a la cama"

Jungkook levantó la cabeza, moqueando un poco, y asintió, aparentemente incapaz de hablar. Se negó a soltar a Mono Araña, incluso cuando ya estaban en la cama, así que Taehyung lo abrazó por detrás, susurró sus 'Te amo' a los dos y se durmieron juntos, cálidos y seguros.


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