Indeleble Parte I y II ~ [TERMINADA]

Capítulo 10.

ADEXE

Observo cada movimiento que Nayra hace al sacar las cosas de su casillero.

¿Cómo es que haciendo algo tan simple se ve tan hermosa?

Estoy sonando como un idiota enamorado.

Tal vez lo seas.

—Adexe si sigues así todo el mundo sabrá lo que sientes por ella —mi mejor amiga me saca de mi ensimismamiento.

—¿Qué quieres que haga? No puedo dejar de verla, de cualquier forma, mi mirada siempre la busca —apoyo mi cabeza en la puerta del casillero—, pero ella ni caso me hace.

Después de ese día las cosas han estado mal, nos está evitando.

—Lo arruiné todo y aun no sé por qué.

—No arruinaste nada Adexe —Natalia me repite por milésima vez en esta semana— no sabemos por qué reaccionó así, pero no es culpa tuya ¿vale?

Solo asiento, aunque eso no quita que siga pensando lo mismo.

—Lo peor —cierro el casillero con un poco más de fuerza— es que ahora está pasando más tiempo con Luca —digo mientras miro al mencionado acercarse a Nayra.

Le dice algo, ella termina de tomar sus cosas y ambos caminan juntos hacia nuestra dirección. Luca nos sonríe, pero ella pasa sin vernos.

—Odio esto —suelto un resoplido.

—Debes admitir que Luca si le está echando ganas.

—¿Qué quieres decir?

—Adexe, estás acostumbrado a tener a la chica que quieras sin esforzarte, por eso no has hecho nada para hablar con Araceli, por eso sigues esperando a que ella cambie de opinión y te hable.

—Eso no es así —frunzo el ceño, molesto— intenté hablar con ella, pero sabes que sucedió.

—Solo lo has intentado una vez y Luca… bueno a pesar de todo siguió intentándolo hasta que lo consiguió.

No digo nada. Puede que tenga razón, puede que no me esté esforzando, pero ella no me quiere hablar.

¿Y si le parezco muy molesto?

¿Y si empeoro todo?

—¿Entonces que sugieres? —dudo.

—Por ahora que vayas e intentes hablar con ella.

—Pero está con Luca.

—¿Y eso qué? Si tienes planeado decirle a él y a Regina que te gusta Araceli es mejor que ya lo vayan sabiendo por sus propias conclusiones ¿no?

—Tienes razón, iré con ella —empiezo a caminar en la misma dirección en la que ellos se han ido—, pero te necesito conmigo —me regreso por Natalia, tomo su mano y la arrastro conmigo.

—Oye, no siempre voy a ser el mal tercio.

—Lo sé.

Suelto su mano y ella se coloca a mi lado. Ambos seguimos caminando hasta llegar al salón de nuestra próxima clase. En efecto están aquí, están sentados uno al lado de otro, mientras hablan de no sé qué.

—¿Entonces iremos con ellos o nos quedaremos viéndolos desde aquí todo lo que resta del receso? —Nati pregunta al ver que no me muevo.

—Adexe —Regina habla detrás de mí antes de que pueda responderle a mi mejor amiga.

Me doy la vuelta para encontrarla al lado de Amanda.

—Chicas —saludo con un asentimiento.

—¿Podemos hablar? —pregunta y pasa su mirada a Nati— a solas.