011 | Roma

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Paulo

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Paulo

Estábamos instalados en el hotel que nos propocionaba el club hasta que encontremos una casa. Luca de un bajón impresionante y Catalina intentando que estemos lo más cómodos posible.

-Hijo, terminate la merienda, porfa.- pidió Cati por vez mil, y es que habíamos dejado un poco de lado el problema Luca - Comida por un par de días pero seguía siendo una tortura.

-Dale, Luca, que me tengo que ir.- me miró, rodó los ojos y bufó.

-Y andate, ¿Que te detiene?

-Que me quiero ir tranquilo, dale.- le señalé los tostados y me pare de mi lugar.-¿Volvemos a lo del mediodía? No te levantas hasta que te termines todo.- me rodó los ojos pero se terminó el pedacito de sandwich que tenía en la mano.

-Anda, amor, yo me encargo.- dijo mí esposa viendo su reloj. Me tenía que ir ya.

Hoy firmaba el contrato con la Roma, hacía una rueda de prensa y después había un evento de bienvenida.

-Ponete el vestido rojo.- le guiñe un ojo y ella se rió.

-¿No es mucho?- negué.

-Yo voy con los pantalones del traje azul. Pero me voy a poner la camiseta del equipo.- ella asintió.- Vos tenés que destacar, ponete ese vestido.- sonrió, se levantó de su lugar y me dio un beso.

-Dale, andate.- me empujó y yo me reí, agarré mis cosas y le revolví el cabello a Luca.

-Portate bien, gordito. Los amo.- y me fui.

Catalina

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Catalina

-Dale que te tenés que cambiar, amor.- él suspiró pero asintió y se terminó de un sorbo su chocolatada.

Three at Turín ; Paulo Dybala Donde viven las historias. Descúbrelo ahora