Poliamor

Capítulo 12

⭐Cambios⭐

Ben Hope

Froto mis manos con nerviosismo, me sudan y hace que se sienta algo incómodo, pero igual lo hago. Me trueno los dedos, y los retuerso; no me ayuda con la ansiedad pero lo sigo haciendo con ritmo. La pared frente a mí es blanca con relieve, hay una mancha amarilla y me pregunto por qué está ahí. Perdón, suelo fijarme mucho en los detalles cuando estoy nervioso.

Estoy por entrar a un consultorio de algún psicólogo o psicóloga, no sé todavía cual es el género de la persona que va a conocer mis problemas y se supone me va ayuda a sentirme mejor y va a desaparecer mis problemas. Aunque Charlie me dijo que no es para desaparecer mis problemas, si no para aprender a vivir con ellos y poder mejorar como persona; después de decirme eso empezó a repetirme una y otra vez que era buena persona que no quería decir lo contrario, sonreí, lo tome de los cachetes y le di un beso en la frente.

Nick se sienta a mi lado y toma mi mano. Él y Charie me estan acompañando en esta nueva experiencia llama mis problemas, siento que la psicología es solo el primer paso para el gran cambio que planeo en mi vida. Si quieres cambiar el mundo, primero tienes que empezar contigo. Charlie llega del baño y también se sienta aún lado mío.

—¿Nervioso, querido novio? —Pregunta el recien llegado.

Sonrio de forma forzada, intentando mostrarme seguro. Me cuesta demasiado mostrar mis sentimientos y decir lo que quiero, creo que será algo que tendré que ver con esta nueva persona en mi vida.

No respondí a la pregunta de Charlie, apreté la mano de Nick de forma suave y tome la de Charlie, cruzando sus dedos con los míos.

—Estoy algo nervioso, la verdad —dije al fin, con dificultad—. Jamás pensé llegar a ir con un especialista, mi madre siempre me dió a entender que recibir ayuda era para débiles y que no se necesitaba al menos que estés loco.

—No lo estás loco y no eres débil por venir —me motiva Nick—. En realidad eres muy fuerte, no todo mundo se atreve a asistir por miedo. Pero aquí estás tú, dispuesto a entrar y enfrentar tu vida, eres increíblemente valiente, y sin duda amamos eso de ti —me da un pequeño beso en la mejilla, es calido.

Charlie asiente mientras sonríe y me dan ganas de llorar. Soy la persona más afortunada de tenerlos como novios, jamás alguien me había hecho sentir tan bien cuando me sentia tan mal, mierda, también los amo; aunque no lo digo.

—Ben, no olvides que estaremos para ti en cualquier momento —me dice Charlie—. Te apoyaremos en toda decisión que tomes y jamás, pero jamás, te dejaremos enfrentar algo solo, sólo que tú lo quieras así. Contaras con nosotros para todo. Después de todo, los tres somos novios.

Es el turno de Nick en asentir con la cabeza. Ahora sí siento que me pica la nariz y que estoy por llorar, pero la puerta del consultorio se abre y sale una mujer unos años mayor que yo.

—¿A quien voy a ver? —Pregunta en general y suelto la mano de mis novios para apuntarme a mí mismo—. Puedes pasar, tus amigos no pueden entrar y ¿de casualidad no vino algun tutor?

Negué con la cabeza, me hubiera encantado demasiado que mi padre hubiera podido venir, pero lamentablemente tenia trabajo y asistir le era imposible. Pero me apoyó muchísimo cuando le conté que quería asisir y me aseguró que esta demasiado orgulloso de mí. Amo a ese señor con locura y pasión.

—Ok, bueno, entra solo tú.

Hice caso, me levante de mi asiento y caminé, dejando atrás a mis novios. Cuando entré a la sala había ventanas enormes, estaban tapadas en su gran parte por cortinas igual de grandes. Lo poquito que estaba al descubierto dejaba entrar luz natura y se lograba ver una vista hermosa de la ciudad. En la sala había un sillón enorme y dos sillas cómodas delante de él, había cuadros por las paredes, estantes de libros y algunos muebles por aquí y por allá. Me dieron muchas ganas de inspeccionar todo, de ver que libros había en ese lugar, de acercarme a la ventana y apreciar la vista. Pero me dio pena y caminé al sillón, sentándome.