✧ ─ 𝐏𝐋𝐀𝐍

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— Me habían dicho que los exámenes de Hogwarts eran de temer, pero incluso un niño de tres años podría pasarlos con facilidad— opinaba Pansy, caminando junto a la albina y la rubia Greengrass luego de salir de los tan esperados examenes.

— Deja de presumir Parkinson, pero tienes toda la razón— admitió dandole un mordiscon a su durazno.

— Hable por ustedes. Parezco zombie andante, no dormí casi nada y solo pude responder la mitad del examen. De seguro todo está mal— dijo Daphne.

— ¿Te pareció fácil?— Charlize asintió— ¿en serio?—. Cuestionó con incredulidad. La albina volvió a asentir— ¿cómo? No te vi agarrar un solo libro en todo este tiempo.

— No necesito estudiar un libro para pasar los examenes Pansy— dijo con pereza. Al otro extremo pudo ver al grupo de Gryffindor. Harry se tocaba su cicatriz con aparente dolor. Pero en poco tiempo vió como el trio de leones salía corriendo fuera del castillo— Las veré en un rato. ¡Vuelvo pronto!— corrió, pero no hacia los gryffindor, sino que en dirección contraria, dejando a Pansy con la palabra en la boca.

Sin siquiera tocar, entró al salón de Quirrell, encontrando al mismo sentado al frente del escritorio, con completa seriedad. No había nadie más que el.

— Quirrell— llamó la atención del hombre— No había tenido la oportunidad de hablar contigo, ¿te importa si..?— el hombre sin hablar alzo su mano en señal de que tomara asiento.

— Supe que intentaste robar la piedra en navidad... pero tus esfuerzos fueron en vano. Fue una pena, realmente una pena— fingió tristeza— Aun que me sorprendió verte anoche... Tuve que fingir no saber quien eras ¿qué tal mi actuación? ¿estuvo buena?

Quirrell se echó a reír sin gracia— Muy buena a decir verdad. Por poco y Potter estuviera muerto, de no ser por ese maldito centauro.

— Debes de tener cuidado con lo que haces. Has fallado ya dos veces, esperemos que a la tercera no lo hagas. No creo a Tom le agrade eso— comentó. Se levanto sin mencionar alguna u otra palabra, tuvo intenciones de salir del aula, pero se detuvo al escuchar la voz del profesor.

— Esta noche... está noche el maestro volverá. Lleva al chico Potter, serías de mucha ayuda si lo hicieras.

— ¿Me estás dando órdenes?—preguntó volteandose a mirar al hombre— Te recuerdo que ese es TU trabajo, no el mio. Yo solo me tengo que asegurar que tu cumplas tu deber y que no te vuelvas un traidor. Espero cumplas con lo que acabas de decir— continuó tirando con fuerza la puerta luego de haber salido del salon.

Al salir y caminar un poco por los pasillos se encontró con el trio de leones— ¡Charlize! te estabamos buscando— mencionó Harry tomando a la mencionada de los hombros.

— ¿Qué sucede?— cuestionó quitando las manos de Harry sobre ella,

— Sospechamos que esta noche, Snape robara la piedra para Voldemmort. Tenemos que ir con Dumbledore, ¡vamos!— Harry no dejó que Charlize opinara algo, ya que de empujones la hizo correr junto a ellos.

— ¡Tenemos que ver al profesor Dumbledore! ¡de inmediato!— declaró el ojiverde al llegar al salón de Mcgonnagall.

— Me temo que el profesor Dumbledore no está aquí— informó la profesora—. Recibió una lechuza urgente del ministerio de magia y salió de inmediato a Londres.

— ¡¿No está?! ¡Pero es importante! Es sobre la piedra del hechicero— Los ojos de Mcgonnagal se abrieron como platos.

— ¿Quién se los dijo?

— Alguien quiere llegar a ella—. concluyó el de anteojos.

— No se como saben lo de la piedra, pero les aseguro que está bajó protección... Ahora vuelvan a sus dormitorios, en silencio— algo decepcionados salieron del aula.

— Hagrid no habló con ningun extraño en esa aldea, ¡era Snape!— explicó—. Y ahora sabe como evadir a Fluffly.

— Y sin Dumbledore—. continuó Hermione.

— Aun no me creo del todo en que sea Snape, pero bueno. Deberiamos ir esta noche, no creen?— opinó la albina.

—Sí —.apoyó Harry— Esta noche, después de la cena. Todos en el tercer piso. Ahí te esperaremos Charlize— La albina asintió. Sin siquira forzar, el plan estaba saliendo de lo mejor...

Aun que, ¿era lo que realmente quería?



𝐂𝐇𝐀𝐑𝐋𝐈𝐙𝐄 𝐆𝐑𝐈𝐍𝐃𝐄𝐋𝐖𝐀𝐋𝐃: 𝑠𝑒𝑐𝑟𝑒𝑡𝑜𝑠 𝑒𝑠𝑝𝑎𝑟𝑐𝑖𝑑𝑜𝑠Donde viven las historias. Descúbrelo ahora