|| "I wonder what it's like
to be loved by you" ||
"Estás jodiéndome, ¿cierto?" Cassiopeia entrecerró los ojos al verlo reírse a carcajadas absteniéndose de ahorcarlo con sus propias manos. "Te juro por mi cantante favorito que voy ahogarte"
"Me ah...
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❝ yo siempre estaré primero. ❞
Colocándose el broche negro sobre su cabello, siguió al mayor por los talones. Este lamió su dedo pulgar, quitándole el resto de yogurt que quedó en su mejilla mientras ella hacía una mueca de asco.
—Vamos, eagle. No quiero llegar tarde el primer día.
—¿No debería estar en un salón menos?
—Sí, pero esta escuela no revisa los registros el primer día de clase. Será tarde cuando se enteren. —la empujó por el pasillo, luego tomó la mano de su hermanita arrastrandola con él hasta el salón de clases—. Además, detestas estar lejos de mí.
John B tenía su mochila desgastada color azul sobre su hombro derecho mientras que con la mano izquierda sostenía la maleta aniñada morada de su pequeña hermana.
—Hay alguien que quiere conocerte. —sonrió entusiasmado, agitándole la mano entrelazada—. ¿Recuerdas del que te hablé?
—Sí. JJ, ¿verdad?
—Se van a adorar, ya verás.
Cass ladeó la cabeza, —Supongo.
La verdad es que no le apetecía conocer nuevas personas o estar con las antiguas. Creía fielmente que solo necesitaba a su única familia. Su hermano.
La campaña sonó cuando entraron en el salón, repleto de niños revoltosos haciendo ruido a plena luz del día. Cassie nunca fue una persona social, siempre se lo decían. Prefería encerrarse en su habitación por horas solo para alejarse de su padre. Agradecía que John B lo convenciera de dejarla estudiar, pero sabía que habría consecuencias y eso le disgustaba.
—Enserio, bird. Quiero ir a casa.
—Sé un poco más amable, Cassie. Será divertido.
Sus ojos se pusieron rápidamente en cierto rubio sentado en los sitios de atrás que raramente jugueteaba con una cuchilla. Tenía seis años, su apariencia era ruda pero ella lo encontró adorable.
—¡JJ!
—Hey, John B. ¿Cómo estás? —saltó a ellos, golpeándole la espalda al pecoso. Ella se sobresaltó un poco por su actitud, solo retrocedió—. ¿Y tu preciosa? ¿Cuál es tu nombre? —cuestionó alzando sus cejas, mirándola fijamente.
—Es mi hermana, Cassiopea.
—¿Cassiopea?
Negó con la cabeza rápidamente, —Llámame, Cassie.
—Lindo nombre.
—Igualmente.
—Nos llevaremos bien, cariño.
La pequeña frente a ellos arrugó su nariz por el apodo, pero le sorprendió que le agradará viniendo de él. El mejor amigo de su hermano.
