Mi sitio +18

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Gavi me despertó a las cuatro y media de la mañana, yo sin entender nada me levanté aun dormida y le seguí con todo lo que me dijo.

Me vestí con su camiseta y un pantalón de chándal corto.

Me até el pelo en una coleta y le seguí escaleras abajo.

- Te hago un café y nos vamos. -habló bajito para que solo le escuchase yo.

Asentí con la cabeza, estaba demasiado dormida para hablar.

Él sonrió, con sus ojos más achinados de lo normal por el sueño mientras me hacia un café.

Me lo dio y se comió un plátano mientras yo me tomaba el café.

Cuando estuve lista, cogió mi mano y salimos fuera.

Aún era de noche, no había amanecido.

- Pablo, no voy a coger el coche. -me alarmé de inmediato, estaba muy dormida.

- No es necesario, sígueme. -cogió mi mano de nuevo y empezó a caminar.

Yo iba en piloto automático.

Él parecía que llevaba horas despierto, estaba como si nada, mientras yo iba arrastrando los pies detrás de él.

Caminamos unos diez minutos hasta que me di cuenta de que estábamos como en una pequeña montañita, más altos de lo que estábamos antes.

Me llevó hacia un árbol enorme, en el que nos sentamos apoyando la espalda contra el tronco.

- ¿Qué hacemos aquí? -pregunté algo perdida.

- Ahora lo verás, en unos minutos. -sonrió y pasó su brazo por mis hombros, acercándome más a él.

Y así fue.

Unos minutos después, el amanecer más bonito que había visto en mi vida se extendía ante mis ojos.

- Es precioso. -admití embobada.

Él me estaba mirando a mi.

- Siempre venía aquí cuando estaba mal, cuando discutía con mis padres, o con Sam, o cuando creía que no llegaría lejos con el fútbol, es mi sitio, mi árbol. -empezó a hablar.

Me giré para mirarlo.

- ¿Tu árbol? -pregunté, esperando que siguiese hablando, adoraba escucharlo.

Señaló el árbol, justo donde su nombre descansaba tallado. 

- Lo escribí con catorce años, siempre pensé en que algún día escribiría el nombre del amor de mi vida debajo, ¿sabes? estuve años escuchando a Sam pedirme que escribiese su nombre debajo del mío, y subí miles de veces para hacerlo, siempre subía decidido a escribirlo, pero algo me decía que no lo hiciera, y nunca lo hice. -admitió y supe que era la primera vez que lo decía en voz alta.

- La querías, ¿verdad? -pregunté.

- Mucho, la quería mucho, pero no era ella ya algo en mi lo sabía. Me dejó, ella se fue y me dejó por una chica, me restregó eso durante años, me dejó destrozado y pensé que nunca más iba a querer a alguien, hasta que apareciste tu en esa grada. -me miró, tenía los ojos llenos de lágrimas.

- Todos pasamos por gente que nos hace daño para llegar a nuestro amor de verdad. -hablé apretándome contra él.

- Yo he encontrado ese amor de verdad, lo supe desde el primer instante y por eso te he llevado aquí hoy, quiero que escribas tu nombre debajo del mío, quiero que te cases conmigo, puede que no mañana ni pasado, somos jóvenes aun, pero quiero que me prometas que lo harás en unos años. -sacó una caja de su bolsillo y tuve un deja vu de inmediato.

Silencio +18 - GaviDonde viven las historias. Descúbrelo ahora