Capitulo 6

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Mientras el bosque verde frente a ellos devoraba el fuego, Jake le dio la espalda a la destrucción y miró serio a su esposo. Su dulce cita pronto se convirtió en una tragedia. Sin embargo, sabían que tenían que actuar rápidamente.

Tsu'tey inclinó la cabeza.

- Toruk Makto, ¿cuáles son tus órdenes?

El significado de sus palabras hizo que el corazón de Jake se hundiera en su pecho. Por un momento no pudo respirar. Una vez más, la guerra había tomado el control de su vida.

Sin embargo, rápidamente se dominó y miró seriamente a su esposo. No tenía tiempo para eso ahora. Tenía que cuidar del clan y de los niños. Especialmente una los niños.

- Tsu'tey vete a casa. Reúna a todos y corra a las montañas Hallelujah. Estaremos a salvo allí. Sus aviones no funcionarán allí, y los ikrans nos protegerán.- Su mente estaba a toda velocidad. La suavidad y la sonrisa desaparecieron de su rostro.

Tsu'tey se preguntó con pesar cuándo regresarían. Esperaba, sin embargo, no en un futuro próximo.

- Como usted ordene. ¿Y tú?- preguntó ansioso. No pudo contener su ansiedad ante la idea de que su compañero hiciera algo peligroso, lo cual estaba seguro que haría.

Sabía que Jake finalmente había regresado a su forma física anterior. Habían peleado peleas muchas veces en los últimos años. El cuerpo de Jake, después de numerosos embarazos, finalmente había regresado a sus bordes afilados, aunque sus caderas permanecían redondeadas y su cintura tan delgada que Tsu'tey podía agarrarla con las dos manos. Jake se volvió tan inteligente y fuerte como un Ikran en cuestión de meses, con un carácter similar. Luchaba completamente como un Na'vi y se movia de la misma manera.

Sin embargo, Tsu'tey conocía a su compañero. Era imprudente.

- Necesito hacer algo. Te alcanzaré en cualquier momento. Vuela. Tenemos poco tiempo. La gente del cielo estará aquí en cualquier momento- dijo Jake mirando el bosque en llamas.

Tsu'tey no se atrevió a discutir con él. Ahora Jake era el líder. Al principio acordaron que si la guerra regresaba, Jake tomaría el control del clan y los asuntos de la guerra.

- Únete a nosotros rápido- lo abrazó con fuerza contra su pecho y voló en su ikran hacia los niños. Primero tenía que asegurarse de que estuvieran a salvo.

Jake esperó a que se alejara. Al principio quería huir con él. Quería esconderse detrás de la fuerte espalda de su marido para no tener que volver a ver este horror. Quería agarrar a sus hijos y huir.

Pero Jake enderezó la espalda e hizo un sonido que no había hecho en años. Un rugido le llegó desde la distancia. Después de un momento, la enorme criatura se elevó sobre el bosque y la fuerza de sus alas hizo que el viento rompiera los árboles. En el resplandor de las imponentes llamas, casi se derritió con ellas. Cuando aterrizó frente a Jake, el árbol casi se rompe, aunque incluso eso era cuestión de tiempo. Un rugido sacudió el suelo.

Jake, nada asustado, extendió su mano a Toruk frente a él, quien inclinó la cabeza con gracia.

- Hola, amigo. Eywa ha vuelto a entrelazar nuestros destinos. ¿Me dejarás volver a subirte a la espalda?-acarició el áspero hocico de Toruk, quien lo miró con ojos serios.

Empujó a Jake ligeramente con su hocico, como si lo animara a saltar sobre su espalda. Jake sonrió. Formó un tsaheylu con él y sintió que las emociones de Toruk inundaban su cuerpo.

  "Se acerca el momento de la batalla. Ven, mi jinete. Debemos proteger a Eywa como ella nos protege a nosotros".

Jake estuvo de acuerdo con él. Ahora solo les quedaba la lucha, y él era un luchador. Y madre de cuatro hijos, a los que protegerá a toda costa. Matará a todos los que se crucen en su camino.

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