cap 39

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Mia-

Tengo pase libre para hacerla llorar.
Me parece que le mostraré su peor pesadilla.
Tenemos el poder de enseñar las pesadillas internas de quién deseemos con tan solo tocar alguna parte de su cuerpo.

Al tocarla pude verlo. No es algo lindo es algo triste la verdad.

Es su madre maltratandola y su padre a su madre. Sin compasión. Lo refleje en sus ojos y su piel palideció, lágrimas comenzaron a salir sin retención alguna de sus ojos. Luego de unos minutos soltó mi agarre y dejé de proyectar su pesadilla.

-Que eres-

-Tu peor pesadilla- y sin más salió de la habitación.

Alina-

Luego de que mía le enseñase su pesadilla a esa tipa me siento tan jodidamente cansada, no me funcionan las piernas.

-Mia que está pasando-

-Consumi toda tu energia debes dormir-

Carajo!!

-Lobito ayudame-

-Que pasa!-

-Me siento mal-

Hablé con él unos segundos y como pude me logré sentar se me nubla la vista, me pesa el cuerpo.

Escuché la puerta pero no logro ver quién es...

-Pequeña-

No logro emitir palabra aunque quiera estoy demasiado cansada, tengo que controlar a esa cosa que llevo dentro para que no me mate por sacar mi energía.

-Vamos a casa bonita fue mucho por hoy, solo no te duermas-

No hago caso siento que me estoy yendo.

-Pequeña no cierres tus ojos, por favor!-

Trato de estar despierta lo más que puedo.
Pero me dejó ir.

Siento mi cuerpo en movimiento hasta que todo se vuelve nubes...

Liam-

Se desvaneció, carajo!
No entiendo que paso, no debí dejarla subir sola.
Bajo lo más rápido que puedo y subo al coche dejándola en el asiento de atrás con Elizabeth quien no deja de llamarla con la esperanza de que abra los ojos...

Llegué lo más rápido que pude al departamento rogando a la Diosa que no sea nada malo!

La dejé sobre sobre la cama tratando de que me escuche...

-Vamos bonita abre los ojos-

-Peque tráeme del baño el botiquín- le indique a Elizabeth quien está detrás de mi observándo.

Puse alcohol en su nariz y recibí un movimiento leve de su parte.

-Abre tus ojos, déjame ver ese color esmeralda- los abrió lentamente tratando de identificar dónde está!.

-Gracias Diosa!- dije por lo bajo.

-No te sacaré de casa hasta que estés bien, perdóname por forzarte a hacerlo hoy-

Giro su rostro hacia mi y tomo mi mano regalandome una de las sonrisas más bonitas.

No emitía palabra pero se lo que quiere decir!

-Duerme un poco pequeña, yo iré con Eli a preparar el almuerzo, ya sabes cómo llamarme si me necesitas- bese su frente y la tape un poco con una manta...

Deje un leve empujón en la espalda de Elizabeth para que me acompañe.

-Vamos peque-

Llegamos a la cocina y la verdad no tenía hambre pero supuse que ella si asi que haremos comida.

Eres mía bonitaWhere stories live. Discover now