YO SIEMPRE CONSIGO LO QUE QUIERO

Capítulo 43 Prt. 2

¿LIBERTAD?

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Seis meses después. . .

—¿Qué significa ésto?

—He cumplido con mi trabajo. Te he sacado de Rusia.

—No, ¿Qué significa este poco dinero? Dame la bolsa.

—No. —Niega con la cabeza.

—¿Cómo? ¡Ladrón!

—Lo siento bella. —Empieza alejarse.

Isaya empieza a llorar.

—¡Maldito ladrón! ¡Hijo de la chingada! ¡Ven aquí! —Intento correr pero Isaya no se calma.

Minutos después se había esfumado.

Me encontraba en las afueras de un pequeño puerto debajo de uno puente que conectaba a calles subterráneas.

Habíamos viajado país por país hasta llegar a Brasil.

¿Qué podía hacer yo en Brasil? Con un niño pequeño.

Estaba perdida ¿Cómo pude confiar? Ese maldito después de seis meses, de saber lo difícil que es mi situación, haber compartido con mi bebé incluso de cuidarlo fue capaz de irse con todo el dinero dejándome con una pequeña parte que se iría en unos días con los gastos de Isaya.

¿Cómo iba a  sobrevivir con un bebé?

—Te lo hubieras pensando un año antes.—Me reprocha mi subconciente.

Las lágrimas empiezan hacerse visibles.

No podía evitarla, me sentía perdida y muy sola.

—No se que hacer, pequeño. ¿Qué haremos ahora? —Me cuestiono sollozando.

Las personas me miran extraño pero nadie se acerca.

El hombre que nos trasladó desde Portugal hasta brasil menciona que nos dispersemos porque podría llegar la policía en cualquier momento.

Las personas empiezan agilizar pasos y en minutos literal ya estábamos corriendo.

¡Qué horror!

Isaya se empieza a calmar con la escena.

Me limpio mis lágrimas y me pierdo en la multitud. No sabía a dónde ir ni que hacer.

Llevaba la mochila con las cosas de Isaya.

Decido tomar un bus cuando veo las luces rojas con azul.

Estando dentro un hombre me detiene.

—¡Saudades tem que pagar primeiro!

—¿Qué? —Pregunto.

—¡Rápido! —Pone los ojos en blanco.