preludio

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A las afueras de la casa de Edgar estaban conviviendo pacíficamente la familia chaman, algo curioso porque normalmente estarían peleando Nita contra Leon y Bo les estaría dando una tunda para calmarlo, pero regresando a la triste vida de cierto emo. Edgar quien se arrastraba hasta llegar a su casa, el había llegado en taxi pero por alguna razón sintió que el chófer era alguien que no lo apreciaba pues el mismo chófer lo llevaba a otra dirección que no era su casa.

Edgar se lanzó del auto y rodó por el suelo, al hacer eso se golpeó y se hizo raspones por todo el cuerpo, añadiendo que también estaba muy magullado por la pelea que tuvo contra los robot para ayudar a su antiguo jefe.

Una lenta caminata por casi un km de recorrido hacían de un infernal trazo para Edgar, que al paso que daba un terrible dolor le invadía pero eso no solo quedaba sino que también se había encontrado con fanáticos que le lanzaban cosa y lo insultaban pues aún después de 7 años en el juego él seguía siendo asediado y acosado por personas sin escrúpulos que no sabían diferenciar un personaje de una persona.

Para su suerte no pasó a más como en otras ocasiones de las cuales tuvo que pelear a puñetazos contra sujetos encapuchados, resultado de esos enfrentamientos: (edgar vapuleado y hospitalizado)

Edgar a como pudo entró a su patio y miró que Nita estaba jugando con una oruga, el emo miró a todos lados en busca de Bo y solo dejó caer su cuerpo al suelo, cayendo de rostro a la dura tierra seca, Nita miró a Edgar y se asustó al ver el sucio y deplorable estado de Edgar.

Así que corrió para avisarle a su papá quien estaba limpiando el sofá, la niña llegó rápidamente y se puso frente a su papá y empezó a jalarle el pantalón a su papá

—Pá, edga' mu~ mu, mue to, ya. —Nita le intentaba decir que Edgar estaba allá en la entrada y que parecía estar muerto pero Bo no le entendía nada así que hizo lo primero que se le vino a la mente.

—¡Leon! —Gritó Bo llamando a su otro hijo.

El menor de los gemelos atendió el llamado y bajó con el el celular de Edgar en su mano y miró hacia su papá, Bo.

—Si señor, ¿Qué desea? —Leon miró a su papá y este se cruzó de brazos al verle el teléfono de Edgar en sus manos y Leon al darse cuenta de eso solo pudo esconderlo avergonzado en su bolsita de su sudadera, botando al instante unos cuantos caramelos.

Nita miró los dulces y se lanzó a tomarlos, Leon también vio eso y se lanzó también para recoger sus dulces pero Nita fue más rápida y tomó todos los caramelos que cayeron. Eso fue el inicio de una pelea entre los dos, Bo se tapó el rostro y tomó un palo que estaba escondido detrás del sofá y le pegó a los dos, le dio tres golpes a cada uno y los chicos resistiendo los golpes empezaron a llorar.

—Pero ¿por qué me pega si fue esta tonta que empezó? —Leon le contestó llorando mientras se sobaba las piernas, pues allí fueron los golpes.

Nita aún con ese dolor pero a diferencia de su hermano no lloraba, ella escuchó fuerte y claro como él la había llamado tonta y con ira empujó a Leon y este cayó de nalga, Bo le iba a pegar otro golpe pero en ese instante entró Edgar empujando la puerta con su cuerpo, cayendo de cara al suelo (otra vez), parecido a un saco de papa.

Los tres estaban asustados pues el sujeto llegó de pronto, Bo miró a Nita y recordó las palabras que ella dijo.

—¡Oh! —Bo habló sorprendido, puso su mano en su barbilla y miró a Edgar —. Entonces eso me querías decir, que Edgar estaba afuera.

Nita asintió rápidamente y fueron a socorrer a Edgar, este aún estaba consciente y les dijo.

—Buenas... —La débil voz de Edgar sonó y Bo se apresuró para llevar a Edgar a su habitación y atenderlo.

Solo son negocios.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora