5. Amigos que se besan en la boca.

2.5K 188 52
                                    




Fueron varios los días que pasó en casa obligatoriamente. Había estado recibiendo visitas constantemente, sobre todo de su hermano Fernando, el cual se encargaba de "cuidarlo". Vigilarlo más que otra cosa, informando a sus padres en el proceso.

Era bastante molesto que los demás se preocuparan por pequeñas cosas, no era nada grave, sanaría con el tiempo. No le simpatizaba aún más el hecho de que Fer se enfocara mucho en tener el papel de hermano mayor.

No es como que su presencia le molestase, en lo absoluto, pero los motivos de sus visitas le parecían un poco tontos.

En base a eso, se sintió aliviado cuando su hermano le notificó que saldría todo el fin de semana, debido a asuntos pendientes que tenía que resolver.

Por fin algo de tiempo para él solo.

El día sábado lo empezó de maravilla, hacía estiramientos y pequeños ejercicios para mejorar su circulación. Ya le había quedado claro lo de no hacer movimientos que requieran fuerza. El resto del día cocino, limpio y procrastino todo lo que quería, eran las cosas que más le gustaba los findes: hacer, descansar, hacer, descansar y volver a hacer.

Llegada la noche se sintió satisfecho y rejuvenecido. Al no tener nada más que hacer hizo la cena, algo rico y poco saludable: Hamburguesa. Ya tenía los ingredientes en casa, utilizaría el horno para hacer el pan, llevaba tiempo sin darle uso.

Estuvo una hora en la cocina, una vez terminado sirvió y se sentó en el comedor, veía su teléfono mientras comía. Tenía variedad de mensajes y varias menciones en el chat del equipo las cuales no se dió el tiempo de leer.

No era muy amante a las redes sociales, en ese sentido, se sentía como un chico pueblerino al cual no le termina de convencer ciertas cosas tecnológicas, aunque esto no le impedía hacer uso de ellas, después de todo, el dinero que ganaba debía de gastarlo en algo.

Al final, era Gavi el que terminaba poniéndolo al día de muchas cosas, la mayoría de estas un poco tontas para él. Cómo cuando había videos en la que los comparaban, parecían que las personas que se dedicaban a hacer eso querían sembrar discordia entre los dos. A Gavi le preocupaba que estás opiniones fueran reales en la mente de Pedri, el simple hecho de pensar que ambos se guardarían rencor como deportistas le molestaba. Eran buenos amigos, por supuesto que ignoraria esas comparativas.

Se había quedado viendo hacia la nada mientras pensaba, distraído. Hasta que un fuerte ruido lo hizo volver a tierra.

La puerta sonaba estrepitosamente, se vio en la necesidad de levantarse del cómodo sofá para ver de quién se trataba, no quería escuchar quejas de los vecinos por el ruido, de hecho, no entendía porque quién estuviera tras la puerta simplemente no tocaba el timbre. La persona de afuera parecía tener la intención de tumbar la entrada.

Observó mediante el pequeño visor en la puerta, llevándose el susto de la noche. Se había encontrado ojo con ojo a la persona que se hallaba afuera.

—¡Venga Pedri, que sé que estás ahí!

Gritaron desde afuera, identifico la voz, se trataba de Ansu. Suspiro pesadamente mientras retiraba los seguros de la puerta, abriéndola en el proceso. Inmediatamente se llevó la sorpresa de encontrarse con Ansu, Ferran, Gavi y a Frenkie, el primero traía unas bolsas aparentemente pesadas y el último llevaba una cara de desagrado como si estuviera en el mismísimo infierno.

—Pero ¿qué hacéis aquí tan tarde en la noche?

—Nada, tenía ganas de beber con los chicos. ¿Y adivina quién tiene casa sola?

Besos incomprendidos. [Pedri & Gavi/Gadri]Where stories live. Discover now