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Capítulo 18

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María Elisa

Pasaron y terminaron por fin los días en el campamento Sahara, desde que la teniente nos entrego los obsequios de bienvenida solo la pasábamos en un campo practicando como utilizarlos correctamente, de tanto practicar la primera semana termine lastimandome las palmas de las manos, pues no me acostumbraba del todo al peso de la Katana, pero cuando lo logre, y empese a dominarla, mejoré muchísimo y empese a poner a prueba mis reflejos junto a Camila, quien también se lastimo la yema de sus dedos la primera semana, pues no tenía ni idea de como lanzar una flecha, mientras que Noah y Gaia practicaban juntas los mano a mano y aprendieron de manera muy rápida a utilizar el látigo y los abanicos aunque un par de veses se lastimaron. Los chicos aprendieron muchísimo con los instructores personales, aunque al principio les costo mucho y no paraban de quejarse y lloriquear por todas partes, ahora puedo decir que terminaron sorprendiéndome y verdaderamente aprendieron como defenderse.

—¿Alguien más piensa que es muy extraño ir en el camión de regreso al colegio sin Guerra?— dijo Noah.

—Tienes razón, pero la teniente no nos hubiera dejado subir si no fuera seguro, ¿no lo creen?.—Contesto Jeff.

—¡Ha! Con lo poco y nada que le importan nuestras vidas, no dudaría ni tantito que nos haya vendido a un burdel.—dije cruzandome de brazos.

—¿Qué estupidez estás diciendo?— protesto Gaia.

—No podría atreverse a hacer algo así, tengo una reputación que cuidar, y no pienso perderla con otro hombre, primero la muerto.—protesto Jeff ofendido.

—Y exactamente...¿qué es lo que no piensas perder con otro hombre?— cuestionó Mahelo esbozando una sonrisita burlesca.

—Bueno tú sabes....

—Jeff,—interrumpió Camila— sabes que así como hay lugares de diverción para hombres también los hay para mujeres ¿verdad?.— explicó Camila.

—¿En serio?— dijo emocionado.

—Pues obvio, allí van las mujeres sin o con marido a ver a los hombres bailar y cosas así...y dicen que pagan muy bien— dijo Erick subiendo y bajando ambas cejas.

—¡Um!— Jeff aclaro su garganta— entonces no estaría nada mal hacer el sacrificio.

—¡Cállate imbesil!! sí quieres prostituirte haslo tú solo, no nos incluyas en tu colada.— reacciono Gaia irritada.

—¡Podrían callarse todos!, la teniente es una persona sería, y no nos vendería a nadie, por sí no lo han notado estamos apunto de retornar al colegio, y no sabemos con el panorama que nos vamos a encontrar. Pensemos con la cabeza fría ok, y les aconsejo que sea cual sea la situación en el colegio recuerden mantener un perfil bajo o el de siempre, sin levantar sospechas.....recuerden revisar si existen micrófonos dentro de sus habitaciones, cámaras...recuerden todo lo que aprendimos en el campamento y más que todo recuerden que apesár de nuestras diferencias seguimos siendo un equipo.— dijo Max con la voz fría y mirada penetrante, mirada que tanto lo caracteriza.

—En el colegio no podremos hablar abiertamente de los D.P, asi que debemos ser cautelosos ¿no?.— dijo Erick.

—Los ¿D.P?— cuestiono Camila.

—Los Darck Players.

Durante el viaje hablamos de muchas formas de encontrar al líder de los Dark Players y de acabar con ellos, de contrarrestar el peligro que podría acechar a Camila por la amenaza eminente, y sobre todo...como nos reuniriamos a hablar sin levantar sospechas.

R-D : Discipline and Revolution [En Edición]Where stories live. Discover now