♡ Capítulo 20 ♡

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―El último pedido. ―Joder, estaba cansado.

Las dos últimas semanas habían sido brutales, entrenando al nuevo chef, intentando pensar, lidiando con el inspector de incendios y la policía. Sabía que Saint había provocado el incendio. Lo sabía, pero no había ninguna evidencia sólida y Saint estaba jodidamente desaparecido. Desaparecido. Como si se hubiese esfumado.

La policía estaba hablando sobre búsquedas y esas mierdas, pero Zee conocía a Saint. Había dado su opinión. Y sería la última que diera sobre esto.

Zee ayudó a Ink a sacar el último salmón y luego suspiró.

Agotado. Estaba agotado. Podía sentirlo en su alma. Saint no regresaría.

―Tienes un visitante ― le dijo Max al entrar, Nhu caminaba tras él.

―Algo acerca de llevarte a casa.

―Bueno... ―Lo miró, sonriendo de nuevo―. Nhu. Chicos, él es mi pareja.

Le encantaba la forma en la que el rostro de Nhu se iluminaba cuando decía ese tipo de cosas.

Nhu saludó. ―Hola.

Todos ellos lo saludaron, Mark se acercó a estrechar la mano de Nhu. ―Me alegra conocerte. Lamento ver a Zee marcharse.

―Estoy seguro de eso, es un chef increíble ―Nhu le sonrió a Mark y estrechó su mano.

―Lo es.

Zee sonrió. ―Cállate. ―Ya habían tenido su fiesta de despedida, ahora era el momento de irse.

―Es la verdad. ―Nhu le mostró una sonrisa―. Vamos. No estoy seguro de que esté legalmente estacionado.

Asintió, miró a su alrededor al restaurante. Había pensado que iba a tener esto para siempre. Siempre.

―¿Estás bien? ―Nunew le preguntó en voz baja.

―Sí. ¿Cómo están los niños? ¿Condujiste hasta aquí?

―Los niños están bien. Y sí, lo hice. Quiero llevarte a cierto lugar. ―Nhu había aparcado en el callejón detrás del restaurante―. Aunque puedes conducir ahora, si quieres.

―Está bien. Vamos.

Había dejado el coche con Nhu el fin de semana pasado, para que los niños y él pasearan por los alrededores en busca de casas y Pim lo había estado llevando al trabajo, y tomaba taxis para regresar a casa por las noches.

Nhu los llevó a la carretera y salieron de la ciudad. ―Así que, ¿cómo se siente?

―Extraño, pero bien. ―Probablemente no procesaría todo hasta más tarde―. Déjame mandarle un mensaje a Pim y hacerle saber que no voy.

―Lo sabe. —Nhu le dio una sonrisa―. Tengo tu maleta en el maletero.

―¿Sí? Guau. Bueno. ¿Los niños están ahí, también? ―bromeó. A veces la eficiencia de Nhu le daba miedo.

Nhu se rió. ―No. Ellos están a salvo con Mike y Samantha.

Pasaron la mayor parte del viaje en silencio, un silencio cómodo, amigable, pero cuando llegaron al desvío, Nhu no lo tomó.

―¿Nhu? Amor, pasaste el desvío.

Mostró otra sonrisa. ―Así sería, si fuéramos a la casa de Mike y Samantha.

―¿A dónde vamos?

―A la pensión en la que nos alojamos. Pensé que sería bueno tener una noche para nosotros y tenemos que hablar.

♡ Papá, papá y yo ♡ [Zeenunew]Où les histoires vivent. Découvrez maintenant