Capítulo 10: Tecnología fuera de control

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Es fin de semana. Van de visita al reino de la tecnología junto con tía Cherry. El encargado del reino, David de 32 años los recibe.

-Bienvenidos. Espero disfruten su visita. Y, me imagino que buscan el diamante.

-Exacto.

-Yo también. Sería bueno un poco de ayuda.

Mientras buscan alguna pista de donde pueda estar, pasan por una de las ciudades llamada Ciudad Robot. Ahí habitan robots libremente y claro hay algunas personas que se encargan de darles mantenimiento y repararlos. Al entrar los demás robots notan a los minibots que traían.

-Nos siguen –nota Luis.

-Ok, vayan. Los vemos cuando nos vayamos.

Vuelan para convivir con los demás robots.

-Hola –saludan.

-Genial –dice uno de los robots.

-¿Sus amos los dejaron venir?

-Sí.

-Son demasiado avanzados.

-Si algún día quieren pueden venir a vivir aquí. Serán bien recibidos –ofrece otro.

-Gracias, lo tendremos en cuenta –responden los minibots.

En cambio, llegan a enormes complejos donde se exponen, experimentan y prueban diversos inventos.

-Son enormes.

-Así es, alteza. Sugiero que nos separemos. Así abarcaremos más.

-Me parece bien.

-Nos vemos aquí en una hora –dice tía Cherry.

Se va cada quien por su lado.

Después de varios minutos caminando, Daisy se detiene enfrente de una exposición donde tenían árboles como pinos, encinos y robles, flores como margaritas, rosas, liriosy más. Un chico alto de cabello naranja con uniforme blanco y una gorra se le acerca.

-¿Qué le parece? La conducción de la electricidad a través de las plantas.

-Está genial.

-No me he presentado, me llamó Car –hace una reverencia colocando su mano izquierda en el pecho –soy uno de los trabaja aquí, ¿quiere ver más?

-Sí –contesta emocionada.

-Por aquí verá cómo este árbol alimenta a esta pantalla –las líneas de energía se veían claramente desde el tronco hasta las ramas. Y, unas tan finas en las hojas que las hacen brillar.

-Ya encontré algo –dice David. Al fin encontró algo de la ubicación del diamante.

Escucha Daisy por el comunicador.

-¿Me das un momento?

Se aleja unos pasos.

-¿Qué encontraste? –pregunta Anina a David.

-Bueno, aquí dice que el diamante se encuentra en los laboratorios. Hay que ir hasta abajo al área X. Ahí está. No se preocupen les daré acceso. Por cierto, la puerta es invisible pero cuando estén cerca se hará visible.

Les envía un mapa de toda zona.

-Estoy cerca –dice Daisy –Yo voy.

-Ok, pero ten cuidado.

-Disculpa, pero tal vez otro día. Tengo que ir a ver unos asuntos.

-Claro. No hay problema, alteza.

Llega a una puerta con acceso solo con código. Acerca su pulsera y se acciona. Baja por la larga escalera en espiral. Camina por el pasillo tocando la pared hasta que aparece una entrada. Habré la puerta y ahí estaba el diamante, lo toma y se dirige a la salida.

Starlight IIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora