19. EPÍLOGO

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El cielo estaba iluminado por las estrellas, las constelaciones se unieron esa noche en perfecta armonía. Ella estaba esperando a que apareciese él, en un parque, sentada en un banco bajo la luz de la luna.

Un hombre que no conocía estaba sentado en el otro extremo. Se le acercó y dijo:

— La noche esta preciosa, ¿verdad?

La chica afirmó con la cabeza.

— Aunque no todos esos destellos son astros – explicó el hombre – algunos son planetas, como ese de ahí – señaló a uno que tenia un color naranja claro – en ese planeta se dice que habitan seres muy fuertes, seres sobrehumanos.

Ella dejó de mirarle y miró hacia arriba, cuando volvió la vista abajo para ver a su acompañante, éste, había desaparecido.

"¿Ha sido imaginación mía?" se preguntó. Aquel hombre con su pelo castaño y sus ojos marrones se había esfumado, era muy extraño.

Momentos después apareció la persona que estaba esperando.

— Hola Candela – dijo aquel chico de pelo largo rubio.

— Hola Byron – respondió con una sonrisa.

Se sentó en el banco junto a ella. Estuvieron en silencio durante un buen rato, solo observando el cielo. En un momento después, candela se acercó a Byron y le cogió de la mano.

Él le miró a ella y ella le miró a él. Sus miradas estaban perdidas en los ojos del otro. Las pupilas de ambos brillaban, acercaron los labios y se besaron.

Cuando terminó Byron dijo:

— Tengo una pregunta que hacerte.

— Dime – respondió la chica de pelo castaño.

— Lo he estado pensando, y bueno...

Candela le interrumpió y dijo:

— Si, acepto.

— ¿Aceptas el qué?

— Acepto salir contigo.

Byron se impresionó, eso era justo lo que quería decirle, así que sonrió y le dio un último beso.

Ambos se querían mucho, y estaban saliendo juntos. Pero aun les esperan muchos obstáculos, no todo va a ser fácil a partir de ahora.

Si el planeta volvía a estar en peligro, ellos lo iban a solucionar, estaban preparados, más que nunca, y los enemigos que se han enfrentado a ellos no son nada con lo que les espera a los dioses.

Aún queda un largo camino, y va a ser difícil. Pero Byron y su familia estaban unidos y eso era lo más importante.

Byron Love - La Espada PlateadaWhere stories live. Discover now