Kuroinu: extranjero. Vol1

prólogo

prólogo

"Cuatro desde el norte". — informo por la radio, mirando a través del visor del rifle a los oponentes que saltaron desde la esquina. Inmediatamente abro fuego, cortando 3-4 rondas cada uno. La primera ráfaga muerde la placa de la cabeza de la criatura en el frente, dejando agujeros humeantes de municiones incendiarias perforantes, y ella, como derribada, cae al suelo, por inercia da un salto mortal y conduce un par de metros en el suelo. Los tres restantes dejan de correr estrictamente en línea recta, comienzan a maniobrar, derribando mi vista, y la mayoría de las balas pasan volando, derribando fuentes de migas de asfalto fuera de la carretera, y las que aún golpean a cualquiera dejan agujeros humeantes en la armadura. , o miembros heridos, que, sin embargo, ni siquiera frenaron a los atacantes. Bastardos ágiles, incluso para gente como yo, es es difícil golpearlos. Pero donde uno no puede hacer frente, varios lo harán. Un par de segundos después, nuestra posición estalla con el fuego de una docena de cañones, incluidas dos ametralladoras. Nuestros enemigos ya no podían esquivar las balas, lo que dos de ellos demostraron de inmediato al recibir muchas heridas y frenar sus bocas en el asfalto. Al último lo mató alguien generoso con un lanzagranadas, haciéndolo pedazos.

"Despejado". — informó el soldado más cercano.

"Entonces vete." — Di la orden y nuestro pequeño destacamento comienza a moverse.

Brevemente sobre quiénes somos: unidades de combate mejoradas genética y cibernéticamente, y también cultivadas en un tubo de ensayo. Los súper soldados son clones, en otras palabras.

Una vez viví la vida ordinaria de un hombre ordinario en la calle. Bueno, eso es lo que recuerdo con seguridad. Desafortunadamente, ni la familia ni los amigos se han conservado en la memoria. O, afortunadamente, todavía es cómo mirarlo. No creo que sea agradable para mí extrañarlos. Por cierto, yo tampoco recuerdo el nombre.

En general, había una vez un chico común, un estudiante. Érase una vez, él murió, habiendo recibido una porción de electricidad en su cuerpo, incompatible con la vida. Así como así: corrí a casa bajo un aguacero, juntando charcos con mis zapatos y tomé el cable de la línea eléctrica, pero me aparté del viento y caí en estos mismos charcos justo debajo de mis pies. Un destello, oscuridad, y ya está.

Luego me desperté flotando en una gran cápsula con una máscara de respiración en la cara y todo tipo de cables y mangueras adheridos a todo el cuerpo. En los primeros segundos pensé que estaba atrapando fallas, porque la imagen se abrió a mis ojos muy fantástica: a mi izquierda y derecha había una fila de los mismos tanques en los que también había personas. La habitación donde estaban estaba llena de un montón de dispositivos, y gente con batas blancas caminaba, acompañada por algún tipo de mierda importante con uniforme militar y dos soldados con municiones de lujo. Realmente no tuve tiempo de darme cuenta de nada y asustarme, ya que la información comenzó a fluir en mi cabeza a sacudidas, causando una migraña severa. Cómo manejar armas, cómo conducir vehículos, desde una moto hasta un luchador, todo tipo de esquemas tácticos y mucho más. También había, digamos, una parte educativa. Contenía un mensaje de que mis hermanos y yo somos los mejores guerreros al servicio de la humanidad, fuimos creados para protegerla y su última esperanza. Y lucharemos contra los alienígenas.

Y luego hubo un curso de capacitación de seis meses, donde mis nuevos colegas y yo dominamos el conocimiento puesto en nuestras cabezas por los científicos en la práctica. Y podríamos hacer mucho. Media tonelada para levantar y correr a una velocidad de 50 km/h no es lo mejor, nos criaron usando tecnologías tomadas como trofeos de extraterrestres, y se incluyeron muchas cosas interesantes en el paquete de mejoras. Músculos mejorados, huesos fortalecidos, un corazón que puede latir y conducir sangre, incluso si queda la mitad, nanorobots que permiten que nuestros ya extremadamente resistentes organismos soporten daños aún mayores, e incluso se recuperen de ellos, piernas y brazos, por supuesto, lo hicieron. No volvió a crecer, pero por lo demás, fue muy difícil matarnos difícil. En general, resultamos ser una especie de cruce entre los espartanos de Halo y los clones de Star Wars. Además de las clases puramente prácticas, también teníamos charlas, donde nos decían aquellos con los que íbamos a pelear. Todo comenzó con el hecho de que 6 años antes de nuestra aparición, en 2051, se abrieron un portal mayor y una docena de pequeños en cada continente, de los cuales aparecieron a la luz del día criaturas previamente desconocidas, que de inmediato comenzaron a eliminar metódicamente a todas las personas que consiguieron. en la forma. Eran una forma de vida de organosilicio profundamente cyborgizada y parecían moluscos blindados de varias formas y tamaños. Más tarde fueron nombrados de esa manera, debido a esta similitud. Los humanos perdieron la primera ronda escandalosamente. Lo repentino del ataque y la superioridad tecnológica del enemigo afectado. Y luego se encendió una guerra larga y difícil. La humanidad sufrió pérdidas terribles y se retiró constantemente, perdiendo batalla tras batalla. Pero, sin embargo, estaba aprendiendo. El estudio de los restos de los enemigos asesinados nos permitió hacer avanzar la ciencia durante décadas. Nuevos materiales, fuentes de energía, armas y, como el pináculo de los logros, la creación de nosotros: humanos mejorados.