Kuroinu: extranjero. Vol1

#6 Descanso en el bosque: Parte 3

#6 Descanso en el bosque: Parte 3

"Gracias, Chloe. Estaba muy rico". — Empujé a un lado un plato vacío, que hasta hace poco tenía papilla de trigo con trozos de carne.

"Es solo una comida simple, ¿por qué estás tan feliz?" — El elfo no entendió mi expresión complacida.

"Créame, esta comida simple no es nada comparada con los concentrados de comida sin sabor que he consumido en los últimos años". - Expliqué. — "Además, la picardía del cocinero puede estropear cualquier comida, pero tú lo haces todo genial".

"¿Concentrados de comida? ¿Es esto algún tipo de comida para acampar?" — Olga inmediatamente se interesó en un nuevo término para sí misma, bebiendo una decocción de hierbas de una taza.

"No solo eso. Este es un set que incluye todos los nutrientes necesarios. Parece un sólido ladrillo gris. Sabe igual, aunque, hay que admitirlo, cumple su función. Lo usamos en todas partes, no solo en el campo". — Comparto los detalles, tomando mi porción de bebida de las manos de Chloe. — "Tengo unos cuantos conmigo, luego te los muestro, para que sientas la diferencia entre esto y la comida caliente normal.

"Bueno." — asintió la hechicera. — "Será interesante ver otro invento de tu mundo".

"Créame, después de mi arma y tableta, no se sorprenderá demasiado". — He advertido a una mujer curiosa.

"Esto no niega mi interés en todo lo nuevo". — Olga me devolvió la sonrisa, pero inmediatamente cambió su expresión a una seria. — "Pero yo quería hablar de otra cosa".

Chloe y yo volteamos a escuchar, cambié mi pose relajada, acercando una silla a la mesa y cruzando mis manos sobre el mostrador, y la chica tomó la siguiente.

"¿Qué haremos a continuación?" — continuó Olga, esperando a que nos sentáramos. Su rostro al mismo tiempo expresaba un conjunto de emociones bastante amargas, lo que no indica las perspectivas más optimistas.

"¿Qué tan malo es?" - Yo le pregunte a ella.

"Nos quedamos solos. A nuestro alrededor están las Tierras de los Humanos, donde los elfos oscuros no son favorecidos. A menos que sea solo como concubinas". — Los labios de la mujer se curvaron en una sonrisa irónica, pero solo por un momento, para luego estirarse nuevamente en un hilo delgado y tenso. — "Mis seguidores están en los enclaves de los elfos oscuros en el borde del páramo, pero este borde está enfrente de nosotros, y si tratamos de ir allí, nos encontraremos con todo un ejército que cavará la tierra con la nariz en nuestra búsqueda".

¿No tienen cosas más importantes que hacer que atrapar a los tres fugitivos? - Yo pregunté.

La conquista de ciudades humanas, por ejemplo, seguida de robos, saqueos y otras muy cultas" —hice una comilla con mis manos— "¿entretenimiento?"

"Tienes razón, pero no del todo". — empezó a explicar Olga. — "Al robarnos a Vult, no solo lo privaste de dos cautivos, lo privaste del símbolo que reemplaza el comienzo de sus conquistas. Lo insultaste más difícil de encontrar, así que nos buscará para vengarse. De lo contrario, su propio pueblo no lo entenderá, su autoridad será sacudida.