Capitulo 31

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Shang Yingrong arrojó a Guan Ling al sofá, luego jadeó profundamente y lo miró fijo.

En este momento, la madre, la hija y el ama de llaves bajaron las escaleras y los miraron. La madre de Shang Yingrong abrió la boca y acababa de decir la palabra "Tú" antes de que Shang Yingrong la interrumpiera, "Mamá, ustedes regresen primero."

"Hermano…"

"Regresen" Shang Yingrong no volvió a mirarlos, y el significado de sus palabras era obvio, nadie podía resistirse a su orden.

"No peleen" La madre dijo esto con indiferencia antes de marcharse, luego miró con indiferencia a su hija que quería hablar, y arrastró a la reticente Shang Feihong.

La última mirada con desprecio la lanzó a Guan Ling en la puerta, la cual no fue recibida por Guan Ling que no se preocupaba por ellas en absoluto.

Solo Shang Yingrong y Guan Ling quedaron en la casa.

Guan Ling se enderezó, tomó los cigarrillos colocados frente a la mesa, sacó uno, lo encendió y fumó durante varias bocanadas sin decir una palabra.

La respiración de Shang Yingrong se había calmado y no parecía tener la intención de enojarse más, se sentó junto a Guan Ling, encendió un cigarrillo y no habló hasta terminar el cigarrillo.

Guan Ling fumó medio cigarrillo, pero en este momento, parecía que toda la fuerza de su cuerpo se había ido. Se apoyó en el otro lado del sofá y cerró los ojos con cansancio.

La obra que acababa de hacer era como un juego de niños, pero parecía haber llegado al punto de no retorno.

Lo que sucederá mañana, él no lo sabe.

La vida es así, un paso en falso, parece que cada paso está en mal, si no quieres cometer otro error, no queda otra que asumir las consecuencias.

Guan Ling estaba tan cansado que no tenía la intención de volver loco a Shang Yingrong. Subió las escaleras, se lavó, se acostó y se durmió en diez segundos.

Durmió profundamente, por lo que no sabía que Shang Yingrong había estado fumando en el balcón toda la noche.

A la mañana siguiente, las personas que vinieron a cocinar no eran la ama de llaves de la señora Shang, sino dos mujeres de mediana edad de buen corazón que hablaron en voz baja y educadamente, le preguntaron a Guan Ling antes de hacer algo.

Las comidas hechas no son diferentes de las que hace el ama de llaves.

Guan Ling estaba listo para ir a trabajar después de la cena, pero fue detenido por Shang Yingrong.

El hombre que solo vestía una camisa y pantalones de traje, una corbata malhecha y sin chaqueta, e incluso abrochados tres o cuatro botones en la parte delantera de su camisa, lo miró con el ceño fruncido.

Guan Ling se sacudió la mano y se dirigió escaleras arriba, y él le siguió.

Después de abrochar la camisa y arreglar la corbata para el Sr. Shang, además de meterle la chaqueta en las manos, Guan Ling le dijo las primeras palabras desde anoche: "No es necesario llevarme, conduciré yo mismo".

Después de terminar de hablar, no se molestó en mirar a Shang Yingrong, bajó rápidamente las escaleras y se alejó.

Shang Yingrong todavía quiere seguir jugando, así que sigamos adelante.

Hizo lo que pudo, lo que no pudo, incluso si Shang Yingrong lo quisiera, aunque lo matara, no podría conseguirlo.

Tuvo una breve reunión con Li Qing en la oficina y hablaron de algunos asuntos de negocios, después Li Qing lo llamó y le dijo: "Ayer por la noche Shang Yingrong tenía la intención de llamarte, y dijo que quería que fueras a cenar a nuestra casa y de paso lo llamaras."

El Amor es demasiado Frustrante Donde viven las historias. Descúbrelo ahora