2

127 17 5
                                    

Nada más oír eso caigo inconsciente siendo rodeada por la oscuridad absoluta por no sé cuánto tiempo estoy inconsciente, sólo sé que de vez en cuando recupero el conocimiento pero vuelvo a caer dormida casi de inmediato. Vuelvo a despertar y me encuentro recostada en una cama con una anémona y tapada por una manta de algas o algo similar, miro a mi alrededor y veo que estoy en la misma cueva donde busqué refugio por un rato con la esperanza de dar esquinazo a los guardias y a mi mente llegan los recuerdos de lo que pasó antes de perder el conocimiento, escucho el ruido del agua moverse por alguna parte pero no veo a nadie, al igual del ruido de unos frascos o algo así, pero tampoco veo nada. Me siento con con cuidado para no marearme y cuando me dispongo a levantarme algo envuelve mi brazo que hace que me quede otra vez sentada, miro y veo ¿un tentáculo negro?, sigo viendo de dónde viene y descubro que es una de las ocho extremidades de una mujer, una mujer de cuerpo morocho, por así decirlo, no es ni muy delgado, pero tampoco muy gordo, el color oscuro como sus tentáculos llega a cubrir sus brazos excepto sus manos y parte de su pecho quedando así un escote bastante marcado, en su cuello hay un collar de una caracola dorada, su rostro es redondo, labios rojo carmín, ojos azules, párpados pintados de tonalidades entre verdosas y azuladas, cabello blanquecino con mechones grisáceos y cortos, su piel expuesta es de un tono violáceo, no muy fuerte y la parte de abajo de sus tentáculos, es decir, las ventosas son de un azúl bastante brillante, la verdad es que es bastante hermosa. Me observa curiosa al igual que yo a ella y por fin suelta su agarre de mi brazo y se acerca con cautela.

-Es mejor que aún no te levantes, pareces un poco débil- por fin habla y ahora concuerdo que la voz que habló conmigo cuando llegué es la suya- al menos pareces estar más despierta que las otras veces- -¿Otras veces?, disculpe, pero ¿cuánto tiempo...

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

-Es mejor que aún no te levantes, pareces un poco débil- por fin habla y ahora concuerdo que la voz que habló conmigo cuando llegué es la suya- al menos pareces estar más despierta que las otras veces- 
-¿Otras veces?, disculpe, pero ¿cuánto tiempo llevo inconsciente?- 

-Pues alrededor de una semana más o menos, usaste mucho de tu poder y acabaste inconsciente después de evitar que me hiciera algún daño al haber bloqueado su ataque, te traje conmigo para que te recuperaras mejor, ya de antes estabas débil y por eso has tardado tanto en recuperarte- me explica y yo voy entendiendo y concordando todo lo que dice

-Gracias, ¿os encontráis bien, mi señora?- parece sorprendida por la manera en la que la he llamado

-Sí, gracias por tu intento de evitar que me atacara a pesar de estar muy débil, aunque eso debería preguntarlo yo- me encojo de hombros

-Me encuentro mejor y gracias por cuidarme mientras tanto, estoy en deuda con usted- agacho mi cabeza

-No, tú me ayudaste cuando otros me hubiesen dejado a mi suerte con tal de darme por muerta, pero tú aún sin conocerme me intentaste proteger a pesar de todo, ¿por qué?, ¿acaso no sabéis quién soy?- arquea una ceja cruzada de brazos

-Usted no le hizo nada salvo evitar que acabara conmigo como para que él intentase hacerle daño, no podía permitir que la dañara sin ningún motivo salvo el que compete con mi persona y respondiendo a su segunda pregunta, no os conozco, como os dije la primera vez que llegué a su hogar, vengo de muy lejos y no conozco mucho los mitos o las historias de esta parte del océano, por lo que desconozco vuestra identidad, pero os estoy eternamente agradecida- pongo mi mano en la zona del corazón en señal de decir la verdad, ella me ve con más sorpresa

-Eres una mocosa muy intrigante, pero a la vez insensata y un tanto estúpida, ¿tu nombre?- 

-Me llamo Luzbel, mi señora-

-¿Qué piensas hacer ahora, Luzbel?- trato de pensar en lo que puedo hacer

-Pues la verdad es que no lo sé, ya he recorrido todo o casi todo el océano en busca de alguien que me ayude a controlar esta maldición que tengo como poder, pero por lo que pude escuchar antes de caer inconsciente no puedo entrar al reino y ahora estarán rondando por todas partes tratando de encontrarme, buscaré una manera de esconderme y aprender yo sola a manejar esto- miro mis manos con frustración

-No te van a dejar tranquila, de cierta manera tú y yo somos iguales, yo puedo ayudarte a usar tu magia, pero tendrás que acatar mis normas y obedecer todo lo que yo te diga, así que puedes quedarte aquí el tiempo que sea necesario- le miro con asombro

-Muchas gracias mi señora, de verdad- sonrío un poco

-Y deja de llamarme así, más bien por mi nombre ya que vamos a pasar más tiempo juntas- dice molesta

-Lo siento, pero desconozco tu nombre- me encojo de hombros y siento mis mejillas arder bastante

-Cierto, no lo he dicho, me llamo Úrsula- sonríe levemente

-Es un placer conocerte y nuevamente, gracias por todo lo que has hecho por mí a pesar de no conocerme- veo a las morenas acercarse a ella y les acaricia con cariño, ahora me fijo que el ojo derecho de una es de un dorado más llamativo y de la otra el que más destaca es el izquierdo- ellas son las que me llevaron hasta aquí-

-Lo sé, hacen de mis ojos en el mundo exterior, ven lo que yo no puedo por tener que estar aquí, pasan más desapercibidas y se esconden con facilidad, son Flotsam y Jetsam- señala a cada uno

-Es bueno saber cuál es cual- alzo levemente mis hombros y con cuidado me levanto y me encuentro mejor- creo que me encuentro capaz de moverme-

-En ese caso sígueme, debes estar hambrienta, estás muy delgada y debes recuperar fuerzas para poder usar bien tu magia- asiento y le sigo y me indica que me siente en una especie de mesa y deja ahí un cuenco con comida- no es gran cosa, pero es lo que puedo conseguir sin ser vista por el resto-

-Gracias, con esto tengo suficiente y también podré ayudar a conseguir más alimento, mucho tiempo vagando por todos lados hace que sepa cómo esconderme y conseguir comida, supongo- alzo mis hombros

-Eso ya se verá, ¿cuántos años tienes y cuánto tiempo llevas vagando en busca de ayuda?- pregunta mientras comienzo a comer y yo hago mis cálculos

-Pues creo que llevo vagando alrededor de unos dos años más o menos, me echaron de casa cuando tenía 18 años, ahora tengo 20, los cumplí hace poco si mis cálculos no me fallan- trato de calcular bien mis cuentas

-Pensé que eras más joven, pero eso de cierta manera es bueno- lo pienso y la verdad es que tiene razón- por cierto, tus cosas están guardadas en el cofre que está al lado de tu cama- 

-Está bien, gracias-

-Ahora quiero aclarar un par de cosas que debes tener muy en cuenta- me mira seriamente y yo asiento prestando atención- se me conoce como la Bruja del Mar, muchos vienen hasta mí en busca de ayuda y yo lo hago a cambio de algo que me interese y bajo mis normas, si no pagan lo exigido tras haber hecho el pacto de sangre sus cuerpos acaban disolviéndose, pero no es por algo que yo hago, son negocios a fin de cuentas, tendrás que aprender a hacerte más dura ya que cuando aprendas a usar tu magia lo más probable es que tú seas partícipe de los conjuros, si se me presta la oportunidad de poder vengarme de Tritón lo haré y no dudaré en hacer lo necesario con tal de lograrlo, así que no intentes convencerme de no hacerlo porque no lo lograrás-

-Ni loca lo haría, ya me he dado cuenta que lo que dicen sobre él no son más que falacias y que no tiene piedad alguna salvo para lo que le interesa- parece satisfecha con mi opinión

-Si no haces lo que yo te diga, tendrás problemas serios, te adaptarás a mi forma de enseñar y si no te gusta ya sabes la salida, al igual que tendrás que colaborar en cosas más rutinarias para poder convivir y si necesito de tu ayuda ….-

-Lo haré, es lo mínimo que puedo hacer por prácticamente salvarme- me encojo de hombros y le miro

-De acuerdo, aún estás algo débil, pero tal vez pueda enseñarte un par de cosas básicas o mirar lo que puedes hacer bajo tu control, ¿qué has conseguido hacer queriendo?-

-Lo que más controlo es poder sanar heridas superficiales y crear de cierta manera unas ilusiones- muestro cómo de mis manos salen unas luces de colores muy leves debido a mi estado y un par de imitaciones a algo de la realidad- y creo que de cierta manera algo similar a un escudo como has visto, pero creo que eso pasó más bien por el efecto de la situación en la que estaba-

-Al menos eso es algo, podremos trabajar con eso de momento-

Amor bajo el marWhere stories live. Discover now