Capitulo 12- Do I Wanna Know?

14 2 0
                                    


M; te espero en el puente.

No se exactamente como sentirme, mis ideas se mantienen en orden, aunque mis emociones yacen en un bucle, cogí un polerón anaranjado para cubrirme un poco del frio, mis llaves y bajé corriendo—¿¡a donde iras!?

—¡¡A recuperar al amor de mi vida!!—exclame como loco antes de salir de casa.

Me apresure, quizás se preguntarán ¿Por qué no vas a su casa?, ¿Qué es de su familia?, ¿Por qué todo es por Instagram?, ¿la tiene de oro? —rio por lo último, siendo franco no tengo otro medio para dar con él, aun a estas alturas 27 de julio del 2023 aun desconozco donde vive, aunque tengo noción o cercanía del lugar, mariano ha sido claro al decir que no da su numero a todo el mundo y he decidido respetar su decisión, cada ser humano tiene límites, secretos, pasado o traumas como en mi caso.

Él es una composición de todas esas cosas, como su pareja o al menos como lo que creo que solíamos ser, tengo el deber de protegerlo de todo e incluso de mí mismo si es necesario, por muy grande que sean mis inseguridades algo que he aprendido es a limitar mi falta de límites, a no forzar, entender a mi contraparte y darle el tiempo de desenvolverse a mi lado, que no se sienta en una cárcel, obligado o forzado, que sea libre a mi lado.

No les niego que en ocasiones me siento como mi madre, ¿A dónde nado? Si no sé exactamente dónde encontrarte, a la deriva como un barco abandonado en el triangulo de las bermudas, mis inseguridades se apoderan aprovechándose de pequeñas incertidumbres, como es que yo, que siempre creo o quiero tener todo bajo control me siento sin herramientas, sin medios, estancado sin dejar de avanzar.

Como si viviera constantemente en un closet, donde nadie me conoce.

Han sido innumerables las razones para tirar la toalla, para no quererte y marcharme, ¿les digo algo gracioso?, a pesar de todo eso, de esperar por sus mensajes o lidiar con sus aislantes defensas, no existe alguien en el mundo que confíe tanto en el como yo.

Por alguna razón que no logro explicar, Mariano me hace sentir completo, lo comprendí cuando lo perdí, jamás me importo esa maldita etiqueta, ni su número, ni ese secreto que tanto se esmera en ocultar o lo oscuro que dice ser, menos donde vive, puedo lidiar con eso, pero no puedo estar sin él, porque cuando estoy a su lado se siente como si miles de mariposa aterrizaran alrededor de mi corazón en un punto sensible, como si cada pequeña pata tanteara entre cosquillas y un millar de emociones que no logro descifrar, vibro; casi como si pudiera sentir todo, amor, felicidad, paz, seguridad, protección, estabilidad, confianza, triunfo, hogar, y a su vez ira, impotencia, enojo, dolor o tristeza.

Un grupo de emociones que transportan por mi garganta como si solo quisiera gritarle al mundo; JODANSE TODOS MENOS TU.

Su amor me hace sentir fuerte y a su vez vulnerable.

Como dije un par de líneas, son innumerables las razones que tengo para dejarte ir, pero son esas mismas las que me mantienen a tu lado.

¿ahora como le explico todo eso? —pensé una vez en el puente, a diferencia de otras veces, fui yo quien llego primero, aunque pude visualizar su sombra a los lejos.

—Hola de nuevo. —sonreí, aunque el permanece serio e imponente.

—¿Qué quieres hablar?

Me recosté de la pared. —no quiero terminar con esto.

—ya hablamos de eso.

—Escucha—intervine— Entiendo que dices o finges ya no quererme, pero yo...

—Danny entiende—tomó aire un poco exhausto de todo—No es eso, simplemente me di cuenta de que no vamos a funcionar, mi intuición no falla y tu quieres algo que no se si te pueda dar.

Ansiolítico; una cura para cupido.Where stories live. Discover now