Apología | Miguel O'Hara

Capitulo 2: Es de humanos errar

En algún lado del multiverso

Echo un vistazo nuevamente, le era inviable desmarcar su mirada del cuerpo de Spiderman 2099, era pecado malbaratar un solo segundo y desatender la imagen de aquel hombre maduro. Específicamente no por lo fornido que solía ser, si no, solo por el absoluto atolladero que Miguel engendraba en su propia existencia.

"Que maravilla"

Incontables eventos, cuestiones, e incógnitas atravesaron su entendimiento. No obstante de manera imperiosa analizaba lo enervante que Miguel se le mostraba,

Corroboro que este ultimo atravesara la brecha multiversal, enfoco su mirada y atención a la metrópoli. Precisaba localizar prontamente al agrupamiento responsable del reconocimiento, era preciso que no la superaran.

No en esto.

De ningún modo permitirá que ellos tuvieran conocimiento de ella. Se abalanzo expeditamente descendiendo en picada, raudamente emprendió un balanceo hábil y silencioso, presurosa su balancín se percibió menos hábil y tal vez, más desesperado. Había desperdiciado tiempo valioso acechando a Miguel.

Su empeño en dicha búsqueda era inútil, hallarlos era complicado, mas si quería ser discreta podrían ya no rondar por ese universo.

"¡Maldición, maldición, maldición!"

Todo gracias a su despiste. Jamás y nunca había sido tan omisa en sus misiones, sabia lo que era la visión de túnel e invariablemente la evitaba, cada vez. De hecho, era indudablemente buena en realizar varias tareas.

Sin alardear.

Y en este día, se encontraba correspondiendo a su humanidad, fueron solo unos minutos de desatención , y es que es de humanos errar. Y nadie era idóneo para inculparla, no poseía vida propia. Esta constaba en atender y velar el multiverso de anomalías, incursiones y de los desaciertos de Miguel O'Hara.

En toda ocasión en la que el acostumbraba a decir; "Con suerte podremos salvar este universo y siempre hemos tenido suerte", ciertamente no era suerte, o potencialmente seria suerte si es que ella se intitulara así. Pero su antropónimo no era suerte, era; Moon.

Un nombre que particularmente el había predestinado, aunque el no hiciera memoria. Pero conocía a Miguel, mas tiempo de el que ella pudiera recordar, incluso mas tiempo de EL que el pudiera recordar. Y hoy, al verlo, solo atesorar ese breve pero muy preciado tiempo que el universo le regalaba, un tiempo para poder tener a Miguel tan contiguo, y no se había presentado tal oportunidad desde que se habían descubierto

Quería estirar esos instantes, aun no estaba al tanto si era para detestarlo un poco mas o para embelesarse otro poco mas.

Pero eso le costo.

Desato un solido gruñido y solo se limito a evaluar la urbe nocturnal en tanto que cavilaba en un plan. Únicamente restaba una alternativa, no hacer nada. Aguardaría a la anomalía para interceptarla antes, solía ser función de Miguel, pero dejarlo en sus manos podría elevar suposiciones.

Elevo su miembro torácico en el cual yacía su gizmo, palpo la pantalla y ante ella surgió un holograma, y de manera rápida la información de la anomalía, coordenadas y características; en este caso la Dra. Olivia Octavious se desplazaba a esta tierra y se enfrentaba a su variante, el Dr. Octopus, no debía haber interacción entre ambos villanos, el Dr. Octopus no tenia que conocer los viajes por los multiversos.

Apresurada se encauzo al sitio donde se desplegaría el portal de la Dra. Olivia, evitaría el contacto cercano con el Spiderman de ese universo, y dejaría en sus manos al Dr. Octopus.