STAMP ON IT | ANAKIN SKYWALKER

𝘿𝙀́𝙅𝘼𝙈𝙀 𝙀𝙉 𝙋𝘼𝙕.

una vez más, padmé nos había arrastrado a otro lugar, esta vez lleno de animales, lo cual parecía hacerla feliz. yo mantuve mi distancia, y me senté a un lado de donde estaba la nave en la que llegamos hasta aquí.

yo y anakin no habíamos hablado desde la pelea, y el seguía mirándome fijamente en momentos, como si quisiera decirme algo con necesidad, pero no era capaz de hacerlo. dudaba si lo golpeaba en la espalda se le saldrían las disculpas que tenía atoradas en la garganta.

cubrí mi rostro, entre mis dos manos solo lo fregue con insistencia en mi ojos. me dolía la cabeza de tanto pensar en él y eso me molestaba.

un animal se acerco a mi, mientras yo estaba mirando con molestia a una de las flores que crecían en el césped, estaba segura que ella no tenía la culpa de nada, pero como me molestaba. el animal se encargó de comérsela, y luego me miró mientras masticaba, como si hubiera hecho su trabajo.

yo sonreí, acariciando su cabeza, lo cual me hizo entender que era bastante manso. y al siguiente segundo escuche a padmé gritar el nombre de anakin con preocupación, me levanté de mi asiento... con pánico.

pero mí miedo se disipo al verlo carcajearse de padmé, mientras ella se quejaba de haberla asustado. fruncí el ceño, bufando, a punto de quitar mis ojos de él.

nuestras miradas se cruzaron por un momento, dejándome algo extraña, el seguía riéndose, y entonces me dí la vuelta, con las mejillas sonrojadas... jamás lo había visto reírse de esa manera mirándome a mí. mi rostro me ardía y quise darme algunos golpecitos para regresar a la realidad.

ahora todo mi cuerpo comenzaba a sentirse extraño, de la misma manera que mi cebrero se había olvidado de como actuar. si, sin duda mi maestro estaría molesto de verme sin control alguno, ni siquiera sobre mis propios sentimientos. pero lo máximo que había recibido de su parte era una sonrisa burlona, una risa malvada... me refiero el tambien se veía increíble así, quiero decir.

golpeé los lados de mi cabeza, mientras cruzada de brazos me subía a la nave, con los pensamientos subiendo como enredaderas por mi cabeza, apretándose hasta dejarme sin cerebro en absoluto. me quejé en voz alta, después de todo no solo estaba a solas, sino que también demasiado perdida, ¿en serio? ¿una sonrisa? ¿eso era suficiente para hacerme sentir nerviosa? realmente necesitaba hablar con alguien.

─¿alana? ¿que sucede?─mi maestro me miró del otro lado del transmisor─ ¿porque me miras así? ¿que hiciste?

─no hice nada... solo... creo que debería volver.─admití y el resopló─ esto de resolver problemas no esta saliendo como el maestro kenobi lo planeaba.

─¿hablas en serio? ─hablo seriamente, él frunciendo el ceño─ ¿que sucede? solo, escucha, este no es el momento para dejar sola a la senadora amidala, pensé que habías pensado lo suficiente cuando te ofreciste como escolta, ¿no es así?

yo asentí, mientras miraba por las ventanillas de la nave, para verificar que nadie estaba viniendo, por ahora no había nada.

─lo sé, suelo ser demasiado positiva...─admití y el negó con la cabeza─ solo necesitaba que me regañe, gracias maestro.

el se rió levemente, mientras cortaba la transmisión, y yo resoplé, asintiendo con la cabeza. tiré mi cuerpo sobre uno de los asientos de la nave, dando vueltas en él, mientras miraba a los botones del techo de esta, mientras recordaba al idiota de han solo... me preguntaba si las cosas salian como debían ser, el aún así conocería a leia... ¿ellos existirían si yo cambiaba las cosas?

hice una mueca, dando otra vuelta en la silla, aburrida. el amaba a esa nave más que a si mismo, y eso era demasiado de decir, era increíble. me reí burlona, mientras giraba una última vez. entonces lo vi en la entrada, asustandome por completo.

─¿cuánto tiempo llevas ahí?─pregunté asustada, mientras padmé pasaba por su lado con una risa.

─acabamos de llegar, no te preocupes.─admitió ella, pero anakin se veía molesto conmigo una vez más, haciéndome levantarme de mi asiento, intentando ignorar su mirada. me estaba dirigiendo a la parte de atras de la nave, para que puedan decir todo lo que quisieran en paz.

me quedé mirando como comenzabamos a despegar lentamente y luego a la misma velocidad avanzar sobre la isla. yo estaba algo perdida en mi misma, y ni siquiera escuchaba mis propios pensamientos. pegue la cabeza a la ventanilla, no sabía como ser el héroe en esta historia dónde era cómo un extra.

─¿quien era él?─preguntó anakin, detrás mio, asustandome una vez más. el levantó las cejas confundido, supuse que era por que hoy estaba realmente muy asustada de todo.

─¿quien? ¿de que hablas?─pregunté, mirándolo mal, mientras acomodaba mi cabello nerviosamente.

─estabas pensando en alguien.─dijo y yo fruncí el ceño─ no me digas que realmente alguien se enamoró de ti...─no sonó como una burla para nada, de hecho sonó muy molesto.

─¿de mí?─me burlé tirando la cabeza hasta la ventanilla de nuevo─ no, de mi no, de alguien que conozco... algo así.

─¿quién es él?─insistió en su pregunta inicial, resoplando.

─alguien, ¿que importa? ─me reí molesta─ ¿puedes no entrar en mi cerebro? es privado, muchas gracias.

─bueno, no lo es, cuando estabas suspirando enamorada de alguien.─yo rodé los ojos, mientras veía como volvíamos a descender. el día se había nublado levemente.

pasé por su lado, no sin antes tocar su hombro levemente.

─déjame en paz, y yo te dejaré en paz.─repetí sus palabras de ayer, mientras seguía en mi camino, para ayudar a bajar a padmé haciéndola reir.