Las cartas de mi madre

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 Adoraba ver a mamá escribiendo. Ella pasaba tardes enteras sobre su escritorio. Múltiples veces le pedí que me permitiera leer alguno de sus textos, pero siempre se excusaba para no hacerlo. Sin embargo, uno de esos días donde fui bastante insistente, logré mi cometido. Dejo el papel sobre mis manos, permitiéndome leerlo. Allí encontré los versos de amor más tiernos que hubiera visto jamás.

Fue entonces, cuando surgió esa gran pregunta: ¿A quién iría dedicado? Pese a mi inocencia, sabía que no era para mi padre. Hice muchos vanos intentos de encontrar afecto entre sus miradas al encontrarse.

La cautela de mi madre me hizo imposible saber la identidad de su verdadero amor. Recién varias décadas después, tras su fallecimiento, pude averiguarlo. Mientras ordenaba la casa, aparecieron una multitud de sobres guardados en el cajón de su mesita de luz. Yacían en él todas las cartas que había intercambiado. Quizás, fue violar su privacidad, pero no pude resistir el impulso de leerlas. Encontré una extensa variedad de poemas exquisitos, dignos de los mejores escritores líricos de todos los tiempos. Si los hubiera publicado, con total seguridad tendría hoy en día una gran cantidad de admiradores. Aunque en su tiempo, y aún hoy en día, era bastante difícil que una mujer triunfara en la escritura.

Entre todos los mensajes, halle varias pistas sobre la identidad de su destinatario. Seguí el rastro de las mismas, y terminé aquí, frente a esta casa.

Toque el timbre. Me recibió una anciana, de tez parda y ondas canosas.

—Buenas tardes, Lily. Vine a verla. Soy la hija de Alicia.

Su gesto se transformó, pasando del asombro, al llanto. Me abrazo con fuerza, como si nos conociéramos de toda la vida. De cierta forma, era cierto: yo sabía de la existencia de una amante anónima, y mamá siempre le describía en sus textos a su "maravillosa hija".

Estrechándola entre mis brazos, compartimos juntas el pesar de haber perdido a la misma persona: mi madre, y su amada.

Historias cortasWhere stories live. Discover now