Capitulo 11

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Capítulo 11
Narra Karim:
Había buscado a Zelene todo este tiempo, lo último que supe de ella fue cuando un amigo me contó que la había visto en un restaurante en Atenas con otro hombre.
Por lo que decidí contratar a un investigador privado.

Anoche me informaron de su ubicación, así que rápidamente mandé a preparar el avión para venir a buscarla y, si ella no quería irse, la llevaría aunque fuera dentro de una de mis maletas.

Llegué al edificio donde me informaron que vivía y me llevé una grata sorpresa.
Cuando subía las escaleras, me encontré con un viejo amigo.
-¡Asan, amigo! ¿Cómo estás?.
Le pregunté y el me miró sorprendido.

-Un poco apurado, pero ¿qué haces por aquí?.
-Vine a buscar a mi esposa o mejor dicho, obligarla a volver a casa.
Asan me miró confuso.
-¿Y se puede saber cómo se llama la pobrecita?.
Preguntó con burla.
-Zelene, se llama Zelene.
Rapidamente Asan palideció.
-¿Qué pasa?, ¿La conoces?.
Pregunté con impaciencia. A estas alturas habíamos dejado de caminar.
-Sí, ella es amiga de mi esposa y parece que no está muy bien.

Sus palabras me dejaron preocupado, así que salí corriendo hacia el apartamento que me habían indicado y Asan vino corriendo detrás de mí.
Cuando llegamos al apartamento, los dos nos miramos preocupados al encontrar la puerta abierta.
Se escuchaba a alguien llorando y parecía ser una chica.

Asan entró corriendo al apartamento muy asustado y yo lo seguí.
-Zelene, por favor abre los ojos...
Decía una chica con la voz entrecortada, así que siguiendo sus súplicas llegamos a una habitación. La chica estaba sentada en el suelo llorando, tratando de despertar a Zelene.

-Pero, ¿qué fue lo que pasó, Paris?.
Preguntó muy preocupado Asan. Yo solo me quede ahí mirando en shock, hasta que Paris nos pidió que llamáramos a una ambulancia y como era más fácil llevarla en mi vehículo, le pedí a mi amigo que me ayudara a llevarla.
Paris dijo que llevaría a sus hijos a casa de una amiga y que nos vería en el hospital.

¿Quién lo diría? Vine hasta Ámsterdam muy enojado pensando en llevármela aunque fuera por la fuerza y descubro lo mal que está.

***
Estábamos en el hospital hace un par de horas y los médicos continúan revisando a Zelene. No podía borrar esa imagen de mi cabeza: Zelene en el piso inconsciente llena de moretones y toda ensangrentada.

La esposa de Asan llegó hace un rato y no ha dejado de llorar y aunque a él no le gusta demostrar sus sentimientos en público, no ha tenido otra opción más que abrazarla para tranquilizarla.
Mientras esperábamos, llamé a mi padre para decirle que había encontrado a Zelene y que le avisara a mi madre para que no se preocupe.

Una hora más tarde salió un doctor de unos 50 años acompañado por dos enfermeras.
-¿Cómo está ella?.
Pregunté preocupado. Asan y su esposa se pusieron a mi lado, enfrente del doctor, para apoyarme.
-Bueno, no hay muy buenas noticias. Su esposa recibió una fuerte golpiza y tiene algunos cortes profundos.
-Entonces, ¿ya puedo verla?.
El doctor negó con la cabeza.
-Señor Demetrius, debemos hablar seriamente de lo ocurrido con la señorita.
-Sí, claro, dígame.
El doctor me indicó que lo siguiera y empezó a caminar, así que miré a los chicos para que vinieran conmigo.

En la habitación, Zelene se encontraba dormida y la enfermera nos explicó que fue porque cuando ella se despertó estaba muy nerviosa, así que le colocaron un tranquilizante.
Paris se sentó en la cama al lado de su amiga y yo me quedé de pie viendo al doctor. Y Asan hizo lo mismo.
-Señor Demetrius, lamento decirle esto, pero la señorita fue brutalmente dañada.
-¿Y eso qué significa?.
Pregunté para asegurarme de que no fuera lo que estaba pensando.
-Significa qué fue violada.
Sentí como algo dentro de mi se quebraba solo de imaginar el sufrimiento de Zelene en esos momentos.
Aún recordaba el miedo en sus ojos cuando traté de tener intimidad con ella.
-¡Esto no puede ser verdad!.

Por primera vez me atreví a llorar enfrente de alguien.

El doctor me explicó varias cosas que debía hacer, dependiendo del estado de Zelene. Me dijo que ella necesitaría seguridad, comprensión y mucho cariño.
¿Qué voy a decirle a su familia o peor, a la mía?.
Siento que esto es mi culpa.

***

Narra Zelene:
-No, no... por favor Asher...
Desperté llorando muy asustada, había pasado un mes desde aquel fatídico día. Ya me encontraba de regreso en Santorini, estos días han sido un martirio.
No podía dormir sin tener una pesadilla.

Mi madre y mi hermana vinieron a hacerme compañía porque Karim "tenía un viaje de negocios" aunque estaba segura de que era una excusa para no verme y no lo culpaba.
Yo también me odiaba.

Masami me convenció de salir al jardín porque no soportaba verme así. Acepte para alejarme de las miradas de lástima.
Envié a mi compañera a investigar porque había tanto ruido.
-¡Tu esposo está de regreso Zelene!.
Exclamó Masami con una amplia sonrisa.
-Mi hermana lo recibirá con mucho gusto.

Mi hermana Melina se había tomado la tarea de llamar la atención de Karim y él no parecía disgustado.
Decidimos venir a la playa a tomar el sol. Necesitaba alejarme de la casa.
Masami permaneció en silencio y lo agradecí.
Decidí entrar al mar para relajarme y si tenía suerte el mar me tragaría.

***
Llegue a la casa al mediodía porque Masami tenía hambre, pensé que estaría tranquila pero después de encontrarme con mi hermana supe que estaba equivocada.
Su mirada despectiva y llena de odio hacia mí me dolió.

Era obvio que ella no estaba aquí porque se preocupaba por mí, ella tenía otros intereses, no entendía porque su odio hacia mi.
Después de todo yo no era importante para nadie.
Me sentía como una muñeca de porcelana rota que nadie podía reparar, pero tampoco se atrevían a dejar en la basura.

Obligada A Amarte Donde viven las historias. Descúbrelo ahora