Todos aquellos que portan poder, saben la pesada carga que llevan y la lucha constante entre la oscuridad y la luz, pero aquellos que acaban de despertar, son los más vulnerables ya que son los más fáciles de corromper, o no es así... Issei.
Se podía ver a dos jóvenes, caminando en una casa en ruinas, este lugar, quemado y olvidado, era la antigua casa de los Hyodou, un padre, una madre y tres hijos, dos de estos estaban fuera pues tenían asuntos que atender en su academia, pero el menor, había llegado antes, pero justo cuando los dos hermanos ya habían terminado sus asuntos en sus clubes, vieron una enorme explosión a lo lejos y sintieron un poder oscuro que emanaba de hay, rápidamente fueron al lugar y hay presenciaron lo que ahora estaban viendo, su hogar destruido, sus padre muertos y su hermano, desaparecido.
Dos años después.
Academia Kuo, club del ocultismo.
Podemos ver a los miembros de este, haciendo cualquier actividad para pasar el rato, pero uno de ellos, estaba junto a su amo Rias Gremory, este era Ryu Hyodou, el hermano mayor de los Hyodou, este estaba hablando con Rias de algo importante.
— Entonces, aún no hay rastro — dijo Ryu.
— No, lo que pasó ese día, es un total misterio, pero lo peor es que cuando examinaron los restos, no encontraron rastros de magia de ningún tipo — dijo Rias sería.
— Tiene que haber una pista, algo que me diga dónde está mi hermano, no pudo desaparecer así como así — dijo Ryu molesto.
— Lo se, desde que desapareció, Akeno no es la misma.
— Si lo se, Akeno lo amaba tanto y estaba dispuesta a decirle lo que ella es para ver si su amor era real.
— Estoy segura que la hubiera aceptado, pero ahora, tanto tu, como tú hermana y ella están dandolo todo para encontrarlo — dijo Rias.
— Si y no descansaré hasta recuperar a nuestra familia — dijo Ryu con determinación.
Pero mientras ellos hablaban de eso, en otro lugar.
Se podía ver en una casa abandonada, a un chico despertar, este parecía tener dieciocho años y se veía mal, muy mal gracias a sus ropas gastadas y suciedad, pero cuando abrió los ojos, su ojo derecho, brillo intensamente en rojo.
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— Qué pasó, dónde estoy — dijo Issei.
— Ho... ya recuerdo — dijo recordando que anoche, había llovido y necesitaba encontrar un refugio.
Issei se levantó para después ir a una ventana y ver el exterior, era un día soleado y muy tranquilo, un día de oportunidades.
— Ya pude dominar el detener el tiempo y crear portales, pero los otros poderes aún no los dominó, pero por ahora, será suficiente, tengo que irme de aquí — pensó Issei.
Este saldría del lugar, para comenzar a caminar, hasta llegar a una tienda de ropa, está tenía mucha gente, pero no sería un problema grande.
— Bien, es hora de probar.
Issei chasquearia los dedos y todo comenzaría a detenerse, las personas, las aves, los carros, todo. Issei entraría a la tienda y comenzaría a buscar ropa de su agrado.
