Camaleón [Vhope] (Finalizada)

Final

Los dedos de Hoseok aún estaban lo suficientemente calientes para abrir la puerta principal. Dió la bienvenida a Taehyung dentro, luego colgó su abrigo en el poste al final de las escaleras.

—Esto no es mucho... —murmuró Hoseok.

—Acabo de pasar año tras año en un trastero. Tu casa es de lujo. —Taehyung respiró hondo y luego suspiró.

—¿Qué? —Hoseok preguntó.

—Huele a ti.

—Eso no es espeluznante en absoluto.

Taehyung arrojó su chaqueta sobre la de Hoseok y luego lo siguió a la sala de estar. Marte se puso alerta y observó a Taehyung acercarse. La punta de su cola se movió de un lado a otro, y sus pupilas se estrecharon.

—Entonces, este es Marte.

—Sí, cuidado él...

—Rasguños, sí, he visto.

—Él puede ser cariñoso, también. Solo tienes que ganártelo primero. Yo... yo haré ese café...

Taehyung se dejó caer en el sofá y dejó su bolsa de plástico con sus pertenencias en el suelo.

Miró a Marte, y Marte le devolvió la mirada. Hoseok los dejó en su extraño concurso de miradas y corrió a la cocina. Se apoyó en el mostrador y contó hasta diez.

Incluso después de que Hyerin lo llamó y pasó horas viendo las
noticias, todavía no podía creer que Taehyung estuviera fuera de la cárcel, en su casa, sentado en el sofá.

Hubo un fuerte silbido desde la sala de estar, y Hoseok giró en el lugar y corrió de vuelta. Marte estaba de pie sobre el brazo de la silla, con el pelo erizado y los colmillos en exhibición.

Taehyung agarró su mano y rió.

—Wow, vicioso-

—Mierda, lo siento.

—No lo hagas. No debería haber intentado acariciarlo.

Hoseok se acercó e hizo un gesto hacia las manos de Taehyung.

—¿Qué tan malo es?

—Solo un rasguño.

—Déjame ver.

Taehyung levantó la mano para revelar la herida y Hoseok se cubrió la boca con la palma de la mano.

—Sangra.

—Lo siento, no lo había notado.

—Estás sangrando, —dijo Hoseok de nuevo.

—Se ve peor de lo que es.

Hoseok negó con la cabeza.

—No debería haberlos dejado solos.

—No somos niños, —se rió Taehyung.

—Ven, —dijo Hoseok, llamando a Taehyung. —Lo arreglaré.

—Realmente no hay necesidad.

—Hay toda la necesidad.

Taehyung siguió a Hoseok por las escaleras y entró al baño. Revolvió el gabinete y, cuando encontró la crema antiséptica, sonrió.

—Tengo algunos.

Cerró la puerta del armario y miró a Taehyung a través del espejo. Sus pensamientos inmediatamente regresaron al baño del servicio, y una oleada de excitación calentó sus venas.

Taehyung sonrió, luego levantó la mano.

—Mantente enfocado, Hoseok.

Sacudió la cabeza y se dió la vuelta.