④.-𝓐𝓭𝓲𝓸́𝓼

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"Fue el tiempo que pasaste con tu rosa lo que la hizo más importante"
El principito

11:00 AM

He decidido levantarme temprano para alistarme e ir al cumpleaños de Jean, hoy cumple diecisiete años y lo conocí cuando aún estudiaba en Quinto de secundaria, es un gran amigo, obviamente no podía faltar un día tan especial como lo es su cumpleaños.

Mensaje enviado:
Ya estoy despierta, no te olvides 1:30 te veo en la estación

Quede en encontrarme con Matt a la 1:30 pm, ahora creo que llegaré un poco temprano hace tiempo que no paso por esa estación y por el asiento donde solía acompañarlo a su parada del autobús mientras que nosotros conversábamos, pero aunque él dejaba que se pasara cada autobús el tiempo que se quedaba conmigo era el que valía la pena.

No me demore demasiado en escoger algo me puse mi pañoleta negra favorita, creo que me levante muy temprano, no veía a Matt hace un buen tiempo, eso influyo mucho, quería que el tiempo se pasara rápido cuando se trata de pasar tiempo con tu persona favorita esperas que el tiempo haga magia.

En dos días sería nuestro día especial, estaba emocionada al menos por el cumple de Jean, me servía de excusa para poder verlo a él ya que siempre para ocupado con sus estudios y trato de distraerlo lo menos posible, pero conversar con él me alegra el día.

Notificación: Esta bien, anda con cuidado.

1:45 pm

¿Dónde estaba?

Había llegado a la estación 1:20 pm, ya casi llevaba treinta minutos esperando con ello, ¿Le había pasado algo?, me quede parada esperando en la sombra de un muro cercano, mirar a la gente pasar a veces puede ser un poco aburrido, pero no tenía nada mejor que hacer.

Ya estaba aburrida de esperar, en eso lo veo a lo lejos, aquel chico que cada que lo veía sonreía como tonta no tarda mucho en cruzar la calle hasta quedar parado frente a mí con sus típicos audífonos, no lo veía desde hace mucho quería correr a abrazarlo.

Lo abrace, se quitó los audífonos, con ello robándole una sonrisa me encantaba su risa teníamos tanto de que hablar cuando pasaba mi tiempo con él se pasaba super rápido.

Y si ahora sí le di un beso de esos que significan que lo extrañaba demasiado, pero estábamos en la estación no quería que mucha gente nos mire, aunque eso a mí la verdad no me importaba mucho.

Durante todo el viaje a pesar de que estábamos en silencio el hecho de simplemente de estar a su lado me daba la sensación de paz, seguridad y tranquilidad.

Te habías convertido en mi lugar seguro

Llegamos a nuestra parada, no sabía dónde quedaba la casa de Jean, así que como fuente confiable usamos Google maps y resultaba que nuestro querido amigo nos estaba mirando desde la puerta de su casa con sus padres, mientras que Matt y yo creíamos que estábamos perdidos o en el lugar equivocado.

-Un poco más de tiempo Jean y realmente nos perdíamos- Matt solo reía en lo que saludábamos y entrabamos a la reunión llegando a tomar los asientos más cerca de la puerta.

¿Teníamos que saludar a todos?, ya nos habíamos sentado, no es porque sea maleducada, pero no sabía qué hacer.

*Entre en una minicrisis*

Aly enamorada de Jean, llego aproximadamente a las tres de la tarde y su mejor amiga llego un poco más tarde, casi cuatro, comimos un rico almuerzo, aunque la verdad yo estaba pidiendo auxilio porque suelo llenarme muy rápido, Matt quería que hiciera mi mayor esfuerzo y como sea tuve que tratar de terminarlo todo, pero a las finales él se apiadó de mí ayudándome.

Mientras conversábamos la mamá de Jean nos da la autorización para subir al segundo piso y jugar un rato, Matt y Jean se pusieron a jugar FIFA, mientras que Aly, su mejor amiga y yo nos pusimos a cantar como todas unas dolidas, específicamente Dueles de Jesse & Joy.

Yo estaba al lado de Matt tenía un poco de sueño y frío, así que me tape con su casaca mientras buscaba obtener un poco de abrigo abrazándolo. 

Él jugaba FIFA y perdió contra Jean, trate de robarle unos cuantos besos mientras jugaba ya que no me prestaba atención por el juego así que mi mejor opción era distraerlo. Luego llegó la hora de bajar a ver la sorpresa de Jean, le habían traído a dos integrantes de su banda favorita para que canten en vivo, era un bonito gesto de parte de su familia.

Justo cuando estábamos a punto de bajar, Matt se da cuenta de que los demás no estaban y solo quedábamos los dos sin que yo me dé cuenta, hace que me de vuelta llegando a robarme un beso, yo me quede en pausa por un momento y lo disfrute, pero todo paso tan rápido que se me olvido el hecho que teníamos que bajar.

Yo en ese momento estaba: ¿Cómo acaba de suceder eso?

Ya era hora de irse, escuchamos dos canciones en vivo, pero llego el momento de despedirnos Matt y yo nos dirigíamos a la parada de la estación para irnos a nuestras casas, aun el beso no se me quitaba de mi mente, pero sabría que tendría más de esos es algún momento.

Estuvimos juntos todo el trayecto hasta la estación en donde tomaríamos caminos distintos, quería abrazarlo, quería pasar más tiempo con él, no quería que se fuera como me gustaría que le dieran más tiempo, pero tenía que despedirme, aunque no quisiera.

Tenía la esperanza de volverlo a ver más seguido...

Me hubiera gustado que me acompañe a mi casa, aunque sea así lo tendría un ratito más a mi lado, pero para que ambos llegáramos a la hora indicada era necesario que él tomara el autobús en la parada más cercana.

No pude acompañarlo...

Me despedí pensando que mantendríamos todo como estaba, no sabía que luego de eso las cosas empezarían a ir en picada.

Me despedí, lo abrace y lo bese.

Después de ese día todo fue un cambio total, a veces me pongo a pensar en todo lo bonito y maravilloso que fue, te recuerdo aún lo hago.

Sin querer también sentí que dejé algo en esa despedida, en aquella estación cerca en donde empezaron muchas cosas, donde nos conocimos, estudiamos, enamoramos y sobre todo donde no sabría cuán importante llegarías a ser en mi vida.

Hay veces es que las personas quieren regresar al punto de partida para cambiar muchas cosas para tratar de arreglarlo todo. A mí me gustaría regresar allí solo unos minutos para sentirlo todo de nuevo cuando esa calidez y protección que sentía de él aún la tenía, aún la sentía cuando aún estábamos pensando en que todo iría bien.

Manteniendo así la esperanza de estar juntos y volvernos a ver un día...

¿Cómo pudiste convertirte en mi lugar seguro?

Ese para mí es el adiós que nunca me hubiera gustado dar.

𝕰𝖑 𝕽𝖎𝖊𝖘𝖌𝖔 𝕼𝖚𝖊 𝕮𝖔𝖗𝖗𝖊 𝖀𝖓 𝕮𝖔𝖗𝖆𝖟𝖔́𝖓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora