𝐀 𝐕𝐄𝐑𝐘 𝐒𝐓𝐑𝐀𝐍𝐆𝐄 𝐃𝐀𝐘

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       UN NUEVO DÍA HABÍA COMENZADO Y LA MUSICA SONABA AL REDEDOR DE TODO BARBIELAND. Al igual que todos los días se sentaba al final de su cama a su saludar a su mejor amiga Barbie, sin embargo, esta vez Barbie seguía un poco somnolienta, se extrañó un poco, pero continuó como si nada su rutina mañanera.

        Voló directamente frente a su casa donde su novio Ken la estaría esperando por una malteada, mientras ambos se saludaban con un dulce y corto beso, Barbie su amiga de la casa vecina, se había caído mientras volaba afuera de su casa, sin pensarlo corrió hacia ella.

— ¡Por dios Barbie! ¿Estás bien? — Le preguntó mientras la ayudaba a levantarse, detrás de ella venía su novio Ken.

— ¡Sí! Eh... si no te preocupes. — Le dijo Barbie para tranquilizarla, sin embargo, empezó a empujarlos lentamente para que se fueran, Barbie no quería preocupar a su amiga. — Deberían ir por una malteada.

— Eh... ¡Sí, claro! — Hablo un poco confundida, sin embargo, puso su mejor sonrisa mientras agarraba la mano de su novio para alejarse. — Vamos Ken ¡Adiós Barbie!
 

       A diferencia de muchas Barbie's Barbie disfrutaba de volar, le aburría utilizar su auto y Ken siendo Ken simplemente le daba en gusto con tal de hacer feliz a su novia en lo que sea y cuando sea, como siempre. Y tal como Barbie les había dicho, ambos fueron por una malteada.

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        A pesar de haber tenido una excelente mañana junto a su novio, Barbie no podía dejar de lado la preocupación que sentía por su mejor amiga, algo andaba mal, ella lo sabía. Al llegar a la playa ella se acercó a las otras Barbies para correr hacia el agua, Ken por su parte se fue con los otros Ken a hacerles barra a las Barbies que jugaban voleibol.

       A lo lejos pudo observar como su amiga se acercaba a la playa, se veía bastante bien. "¡Ven Barbie, corramos hacia el agua!" La llamó sin esperar respuesta, para luego salir corriendo con las demás chicas, sin embargo, se devolvió cuando vio que su amiga se encontraba sentada en unas banca, las otras chicas la siguieron y todas se sentaron a su alrededor para saludarla.


        "Hey Barbies. " Les respondió ella. "Solo me caí, qué vergüenza"  Continuó ponía una sonrisa avergonzada. Una de las Barbies la consoló, por su parte Barbie empezó a contarles como ahora su talón tocaba el suelo.

— ¡Pie plano! — Gritó la Barbie doctora, mientras que Barbie Física y ella tocaban el pie de su mejor amiga y gritaban.

        Finalmente todas las Barbies habían llegado a la construcción de que Barbie estereotipica estaba descompuesta. A su lado, Barbie física le dijo que tendría que visitar a la "Barbie rarita".

— En su vida Barbie había tenido que visitar a la Barbie "rarita" — les respondió ella por su amiga, a lo que Barbie asentía a su lado.

— Es porque nunca te habías descompuesto.— Le respondió otra Barbie.

— He oído que antes ella era la Barbie más bonita de todas, pero luego alguien en el mundo real jugó muy rudo con ella. — Les contó la Barbie diplomática.

— ¡Es muy rarita! — Reclamó Barbie. — Deberías venir contigo. — Le dijo Barbie a su mejor amiga, mientras la tomaba de las manos.

— Si, claro. — Le respondió con una sonrisa, feliz de ayudar a su amiga en su viaje a la reparación.


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       Tal y como habían dicho, ambas estaban paradas frente al portón de la casa de Barbie rarita, Barbie miró a su mejor amiga, se veía un poco aterrada al igual que ella, a pesar de tener miedo de entrar le tendió la mano a su mejor amiga y la hizo entrar. Ambas subieron esas largas escaleras hasta que llegaron a la casa, donde se encontraba un perro haciendo popo en todos lados.

— ¿Te incomodan? — Le preguntó con una sonrisa triste mientras miraba los tacones de su amiga.

— Yo nunca me pondría tacones si mis pies tuvieran esta forma.  — Le dijo mientras ambas entraban en la extraña casa.

— ¿Hola? — Preguntaron ambas al entrar.

— Hola. — Ambas pegaron un pequeño salto al ver a la Barbie en el segundo piso. — ¿Qué les aqueja muñecas? Bienvenidas a mi casa bizarra.

        Dio unas volteretas hacia delante para quedar frente a ellas, Barbie por su parte se quedó escondida detrás de su amiga, la "rarita" le daba miedo asi que decidió dejar que su amiga explicara lo que le pasaba mientras ella solo observaba.

— ¡Planos! — Exclamó asombrada. — Eso nunca lo había visto.

— ¿Se los puedes arreglar o no? — Habló Barbie de forma brusca.

— ¿Son Barbies estereotipicas no? — Ambas Barbies asintieron. — Esos ken's suyos sí que son una buena fuente de proteína muy guapa.

— Eso creo/sí  — Respondieron ambas al mismo tiempo mientras se miraban incómodas.

— Me encantaría ver que montecito sin pelo hay debajo de esos jeans.

  
       De no haber sido por su amiga, probablemente habría saltado encima de esa Barbie, se sentía extraña, un sentimiento de malestar se hacía hueco en su pecho al pensar en esa Barbie viendo a su Ken, no le gustaba sentirse así. Por otro lado, Barbie se encargaba de contarle a la Barbie "rarita" de todo lo que había pasado.

  
       Resulta que su amiga Barbie había abierto un portal en el mundo humano y para que su amiga volviera a ser una Barbie perfecta estereotipica tendría que viajar al mundo real, al cual ella la acompañaría para que no le pasara nada y dejara de tener celulitis o simplemente seguir con su vida normal y hacer como si nada hubiera pasado.

— Elige el tacón.  — Le susurró al oído.

— Si... La primera, el tacón.  — Respondió sin pensarlo.

— No lindas, deben elegir el conocimiento. — Les corrigió, pero una vez más ambas Barbies se  negaron. — Bonita, escucha, deben querer esto, deben querer conocimiento.  — Les dijo a ambas mientras alzaba una sandalia.

— No es una Barbie aventura. — Respondió ella en lugar de su amiga.

— ¡Si! Tiene razón — Refutó. — Soy la Barbie estereotipica, la Barbie en la que todos piensan cuando alguien dice "piensa en Barbie" — Dijo de forma obvia mientras apuntaba a ambas. — Piensan en nosotras.

  
       Sin embargo la Barbie "rarita" finalmente perdió la paciencia y les dijo que no Barbie no tenía opción, que simplemente la hizo creer eso para que ellas pensaran que Barbie tenia opción.

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       Ambas Barbies se encontraban despidiéndose de sus amigas, quienes habían hecho un cartel para Barbie. Ella ya se había despedido de su novio Ken así que estaba todo resuelto, Ken cuidaría de su casa hasta que ella volviera. Así que sin más preámbulos, ambas se subieron al auto de barbie y empezaron su aventura, no sin antes de que ella le lanzara un beso a Ken.

𝘍𝘭𝘰𝘸𝘦𝘳𝘴 - 𝘒𝘦𝘯 (𝘚𝘪𝘮𝘶 𝘓𝘪𝘶)Onde histórias criam vida. Descubra agora