Capítulo 9

902 53 6
                                    

Muchos dirán que soy un ser sin corazón y no están equivocados, siempre las cosas son como yo quiero y mientras yo lo decida las cosas seguirán el curso que yo trace, mi alma esta corrompida desde que pise Nunca Jamás hace miles de años atrás.

Me importa poco lo que pase fuera de aquí y lo que las demás personas piensan o sientan al respecto, pero desde esa noche, una pequeña luz era todo que amaba ver al final de esa oscuridad a la que yo mismo acepte entrar.

Pero esa pequeña de ojos azules y sonrisa traviesa lograron que mi atormentado ser encontrara la paz que no sabía que buscaba con desesperación, la isla era hermosa desde que ella piso estas costas, los niños dejaron de tenerme miedo y llegue a disfrutar de ese sentimiento.

Era ella, todos lo sabían su risa en las mañanas era lo que hacía brillar el sol y borrar las oscuras nubes que cubrían la isla, su mirada llena de dulzura que yo celaba al querer que fuera únicamente para mí, sus abrazos cuando corría hasta mi huyendo de Félix o de alguno de los niños.

Todo perdió su brillo cuando me fue arrebatada, la rabia y dolor en mi interior fluía en mis venas como lava ardiente que amenazaba con calcinar a cada uno de los responsables de mi dolor, porque dolía saber que mientras ella lloraba gritando por mi yo no podía hacer nada para que se quedara conmigo.

Y ahora después de años, con el canto de las sirenas y con la música de mi flauta era que podía hacerles sentir todo lo que yo sentí durante años por su causa.

-— Pan, no puedes matarlos así de fácil –— Félix miro a su amigo mirar fijamente el bote donde los gritos cansados y desgarradores eran cada vez más opacos.

—- No lo are, pero ahora saben que Peter Pan no volverá a perder a su Niña Traviesa –— dije mirando el barco por última vez antes de caminar hasta loa árboles, ellas sabrían cuando acabar su tortura, yo apenas comenzaba.

Caminamos por el bosque dejándoles pistas que los llevarían hasta la cueva de las sombras, Wendy sabría que ellos vendrían, pero Sombra se encargaría de ellos, yo solo deseaba llegar al campamento ver a _________ y abrasarla contra mi pecho, que ella sintiera que no necesitaba a nadie más que a mí para hacerla feliz y protegerla.

- —Pan… tienes que ver esto —– mire a Félix confundido antes de caminar delante de él.

—- Pero… ¿princesa?... ¿Qué ocurrió? —– pregunte mirando confundido la escena.

Los niños rodeaban con espadas un árbol donde ________ se encontraba atada mirándome con una sonrisa inocente, los más grandes también eran prisioneros de los más pequeños siendo custodiados contra otro árbol.

- —Peter, ¿puedes decirles que el juego de la princesa secuestrada ya se acabó? –— pregunto mirándome con una sonrisa.









Narra _______

Tal vez no era una de mis mejores ideas, pero vamos Peter no estaba en la cabaña cuando desperté y a pesar de que no tenía mucho tiempo con ellos, parecía una niña caprichosa queriendo su total atencion en mí y bueno, a él no parecía importarle darme su total atencion.

La cosa es que queriendo hacer tiempo a que regresara, y buscando conocer o recordar a los niños se me ocurrió un juego donde yo era una princesa secuestrada por sombras malvadas, y además la sombra de Peter dijo que él lo aria.

En resumen, al momento que los más grandes se pusieron de lado de la sombra los niños tenían que rescatarme, y uno pensaría que siendo niños contra adolescentes era claro quien tenía la ventaja sobre el otro grupo.

¡Pero estos niños literalmente destrozaron a los más grandes!, negándose a soltarme ya que según ellos el Rey de la isla tenía que venir a reclamar la bella princesa, justo ahora un grupo está custodiando a los adolescentes mientras otro me custodia a mí, la bella princesa que espera pacientemente y un poco perturbada a su amado Rey.

-— Pero… ¿princesa?... ¿Qué ocurrió? –— la voz de Peter nos hizo girar a míralo cuando regresaba con Félix que buscaba esconder su risa entre la capa.

Mis ojos brillaron cuando se unieron a los verdes de Peter, ¡llego mi Rey a rescatarme!, el sin duda lograría que los niños dejaran de fingir ser custodios de princesas.

-— Peter, ¿puedes decirles que el juego de la princesa secuestrada ya se acabó? –— pregunte con una sonrisa cuando ambos entraron al campamento mirando alrededor.

—- ¿Alguien puede decirme que ocurrió? –— cuestiono mirando a los niños y a los adolescentes cuando ellos trataron de explicar.

-— _________ Es una princesa que espera a su Rey –— Luis un niño castaño dijo alzando su manita.

—- Nosotros la rescatamos de esos seres horribles – —otro niño dijo apuntando a los adolescentes que lo miraron ofendido.

-— Y ¿En qué momento la salvaron?, sigue atada —– Félix opino y los niños se miraron entre ellos, hasta que Luis levanto su mano de nuevo.

- —El Rey tiene que reclamar a la princesa para que sea liberada —– dijo explicando su punto.

- —Peter, para ellos nadie es digno de ser mi Rey ¿me ayudas? –— dije mirándolo con suplica, estos niños se lo toman literal todo.

- —Ok, bravos caballeros, les agradezco el cuidar de mi bella princesa –— Peter camino entre los niños hasta ponerse a mi lado, - — Yo el Gran Rey Peter Pan, reclamo a mi princesa________ como mi Reyna para toda la vida —–

Sonríe cuando las cuerdas en mis manos se fueron y abrase a Peter por el cuello dejando un beso en su mejilla cuando el paso su brazo por mi cintura pegándome a él.

—- Mi valiente Rey Peter, al fin estamos juntos —– dije siguiendo el juego cuando los niños hicieron una reverencia llendoce a jugar a otro lado, -— Te extrañé Peter —–

- —Perdón por dejarte sola, —- me sonrió sentándose contra el árbol y haciéndome sentar entre sus piernas,— - También extrañe a mi princesa –—

Sonreí, algo en mi vibraba cuando estaba cerca de él, y no quería dejar de sentirlo, algo muy fuerte en mi interior tiraba con fuerza de mi hasta el, y cuando tendría que asustarme solo corría a sus brazos buscando sentirlo cerca de mí.

Me sentía en casa, segura, protegida, amada, todo eso era lo que Peter y los niños me hacían sentir, y aunque suene egoísta, esperaba que mi familia no apareciera pronto, no quería que alguno saliera herido, pero no soportaría algo malo le pasara a Peter

La Niña Traviesa de Peter PanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora