capítulo 11.

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La mirada de Changbin era de puro estupor. La noticio lo tomó por sorpresa y su lento cerebro quería procesar la información.

Te fui infiel.

Esas palabras le retumbaron en los oídos, una y otra vez cual si de una tortura se tratase. Y empezó a volverse loco por ello. La incomprensión era motor de su molestia e indignación.

- ¿Qué acabas de decir? -gruñó feroz como un animal.

Seungmin tembló temeroso. Changbin no era un hombre irracional, pero obviamente estaría disgustado al saber que su novio estuvo..., con otro hombre. Lo que Seungmin esperaba era que no le preguntase por el nombre de su amante o estarían en serios problemas. Chen se sentiría gravemente ofendido de saber que fue con Minho el malvado motociclista con quien se suscitó la infidelidad.

- ... Te engañé -murmuró bajo.

- ¿Por qué demonios hiciste eso? -farfulló Changbin-. He sido un buen novio y...

- Sólo pasó. No es una excusa. De hecho, no tengo una y sólo diré que lo lamento.

Changbin se puso en pie y con desesperación caminó por la sala de un lado a otro, dando pisotones que hacían retumbar el suelo. Interiormente, su corazón dolía por la traición, pero no era desgarrador, no se partía, ni sentía estarse muriendo por ello. Se dijo a sí mismo insensible, pero su mente hizo el supremo esfuerzo por entender su carencia de dolor y sentimientos. Ya no amaba a Seungmin.

Esa idea venía rondando su mente desde hace tiempo y seguramente el jovencito lo notó, no que quisiese justificar un acto tan vil como una infidelidad. Su amor empezó curiosamente forzado porque él sólo quería follar con Seungmin cuando lo conoció en el club; sin embargo, el muchacho fue altanero y parecía estar completamente fuera de su liga, y después se propuso conquistarlo, totalmente cautivado por el misterio que se ocultaba en esos ojos avellana tan bonitos.

Lamentablemente, desde hace un par de semanas, casi un mes y medio o tal vez más, sentía que su relación no era la misma, algo faltaba o algo se perdió con el tiempo. Ahora sabía cuál era la pieza extraviada: el amor. Lo quería, innegablemente, pero sólo como un amigo y no podía mezclar sus sentimientos y pretender sostener una farsa. Eso resolvía el asunto de su insensibilidad, pero aún no podía digerir la idea de ser traicionado.

- Ambos sabemos lo que sucedió, ¿no es así? -increpó Changbin una vez logró quedarse quieto en un solo lugar.

- Se acabó el amor, pero aún eres un gran amigo y no merecías que yo te mintiera.

-... ¿Cuándo sucedió?

- Hace un par de semanas. Esa noche que regresé del club y tu no pudiste ir por mí.

Changbin abrió los ojos ampliamente al reparar que su novio lo engañó antes, después o..., durante su sexcall. ¡Demonios! ¿Acaso Seungmin perdió todo rastro de decencia? Imaginar la situación le causó repelús, la bilis subiendo por su garganta podía ya saborearla.

- Esa noche..., tú y yo...

- No me preguntes cómo pasó porque no podría decírtelo. ¡Dios, lo siento! No quise engañarte -creo-, y eres demasiado importarte para mí como para ocultártelo.

- Si fuese importante para ti no lo habrías hecho en primer lugar, habrías hablando conmigo. Pudimos terminar antes de que me engañaras como una perfecta zorra -masculló Changbin, herido.

Seungmin bajó el rostro y dejó que un par de gruesas lágrimas saliesen de sus ojos. Una zorra. Él mismo admitía que no era más que eso y la visión de sí mismo le avergonzó en demasía. Pasó de ser un joven rico y elitista a una simple zorra que le abrió las piernas al primer sujeto que se cruzó frente a él. Ahora no tenía ni orgullo, ni dignidad y tampoco el cariño de Changbin.

fight for love ✧ knowminWhere stories live. Discover now