Atrapados. (HunHan)

Prólogo.

Los gritos se intensificaron, tanto que el pequeño Sehun, se asustó. Había despertado por un vidrio romperse. Afuera aun estaba oscuro. Esta pelea era diferente a las otras. Esta era mas fuerte y habían cosas rompiéndose. A paso tembloroso bajó las escaleras.

-¡Lo siento! No quise arruinarlo todo.- la voz de su padre hizo presencia. Lo que sirvió para guiarlo hasta donde estaban. Se detuvo detrás de un muro entre la sala y el comedor.- ¡NO HAGAS TONTERIAS! ¡DEJA ESO AHÍ!

Asomó su cabeza y los vio. Su padre estaba detrás del sofá y su madre estaba al otro extremo, a su alrededor habían vidrios rotos. La vitrina ya no existía, habían papeles rotos al igual que las fotografías familiares.-¡NOOO!.- el grito desgarrador de su padre lo hace estremecerse. Entonces voltea en dirección a su madre. Y vio como su madre tenia en su mano un vidrio y lo dirijia a su pecho. Su padre corrió. Él corrió. Y el sonido del cuerpo de su madre al caer lo detuvo. Su madre se ha clavado el vidrio en el pecho. Su padre se arrodilla a su lado.

-¿Que le diré a Sehun?.- las lágrimas hacen acto de presencia.

-La ...ver~dad.- el susurro de su madre lo hace encogerse y volverse a ocultar.

-No puedo.. Tienes que haber pensado en él. Te necesita.- saca su celular. Y habla con urgencias.

-Mami... ¿Que verdad?.- su inocente voz hace que su madre llore más fuerte. Al acercarse y dejarse caer a su lado lo estremecen. Hay mucha sangre, se dice en su cabezita.

-Per~dón.- posa su mano ensangrentada en la pequeña mejilla de Sehun.

-¿Vas a irte?.- su voz suena rota.

-Si.- el color a disminuido. Y sus ojos se van cerrando.

-¿Por culpa de quién?.- insiste el niño.

-De....él.- su otra mano apenas se levanta y señala a su padre. Sus ojos se cierran del todo. Y sus manos caen.

-¿Mami? Mami no te duermas... ¿Mami?.- la calma va a abandonando a Sehun. La sacude un poco pero nada.- ¡MAMÁ!

-Sehun.- su padre trata de tocarlo pero lo aparta de un empujón.

-¡MAMÁ!.- su llanto se hace mas fuerte y se acurruca en el regazo de su madre. Llora desgarradoramente. Las luces a su alrededor se distorsionan, hasta que se vuelven un pozo negro.

-Sehun.- llama DongHae. Aquel hombre que ayudó a darle la vida pero que terminó con la de su madre. Él ya no era su padre, él era el único culpable.- Sehun.- se a acercado. Se agacha a la altura de Sehun. Y trata de abrazarlo pero el niño retrocede. La ultima persona que lo tocó fué su madre y quería que se quedara su tacto. Tambien se negaba a hablar.- Ya es hora.- dice saliendo. Él lo sigue hasta el campo donde el cajón de su madre lo espera. Muchas personas hablan. Pero son simples zumbidos a los oídos de Sehun. El cajón empieza a descender. Su abuela llora. Todos lloran, excepto DongHae y él.

Cuando ponen la lápida, Sehun siente sus ojos arder y su corazón da un vuelco. Oh HyeMin. La mujer que le dió la vida. Y que ahora ya no está.

Cuando la adolescencia llega a Sehun, llegan los problemas. Es tan cerrado que no habla en clase. Persona que le haga una broma o lo insulta, generalmente termina con pintura en el cuerpo o pegamento en sus mochilas. Es su mejor manera de vengarse. Sin embargo saben que ha sido él y llaman a DongHae a la dirección. Luego cuando llega a casa DongHae le grita que deje de ser infantil. Y Sehun le responde. Y DongHae agradece eso. Al menos escucha a su hijo. No le importa que peleen.

Para su decimoséptimo cumpleaños su padre ya no esta detrás de él tratando de conseguir un abrazo. Va a la escuela y por los pasillos vuelve a escuchar los insultos. Los ignora olimpicamente. El profesor entra a clase y le sigue un chico. Es tan hermoso que Sehun se queda viéndolo por un momento. Cuando sus miradas se encuentran siente una tranquilidad inexplicable. El joven se acerca y se sienta a su lado. Evita voltiar. Y agradece que vibre su celular.

Feliz cumpleaños. Pase a casa y te deje torta. Hoy llegaré tarde, así que puedes llevar a tus amigos a casa. Te quiero.

DongHae. 8:43 a.m

-Soy Luhan.- susurra el nuevo chico. Voltea y se deleita con la belleza del joven.- Feliz cumpleaños.- sonríe. Y la paz llega al corazón de Sehun. El desconocido a leído el mensaje y no le avergüenza. Le causa risa. Trata de sonreír pero sabe que no lo ha logrado. Ha hecho una mueca. Y la risa de Luhan se lo confirma. Su pulso se a acelerado por el mejor sonido que ha escuchado en años.

-Gracias.- no se explica porque respondió. Pero se siente bien.- ¿Quieres comer torta después?.- a sido la oración mas larga que le a dicho a un extraño.

-Claro.- vuelve a sonreír.

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Espero que me apoyen. No se preocupen que no todo el fic será sufrimiento.