𝑩𝒆𝒂𝒖𝒕𝒊𝒇𝒖𝒍 🐰 [2Yeon]

10: 𝓥𝓪𝓶𝓸𝓼

Era un día tranquilo, la coneja se encontraba en su nueva habitación jugando con Bomb, ya que ella le había rogado a Jeongyeon que le de una pues su espalda le dolía al dormir todos los días en el sofá.

Escucho una vibración proveniente de un celular y supuso que era de Jeongyeon, salió a ver para comprobarlo y querer contestar pero la pelicorta se adelantó y contesto primero.

ㅡ¿Hola? ㅡLe escucho decir.

No puedo escuchar mas de la conversación pero si pudo escuchar una de las frases finales que dijo Jeongyeon.

ㅡSi, claro que voy a ir, no me lo pierdo por nada del mundo.

¿Ir? ¿Ir a donde? pensó Nayeon.

Vió que Jeongyeon colgó la llamada y se acerco a ella caminando lentamente.

ㅡ¿A donde vamos Jeonguie? ㅡ preguntó tratando de oírse con voz tierna.

Jeongyeon se asustó por la repentina presencia de la coneja cerca de ella, le iba a decir algo hasta que analizó lo que le acaba de preguntar.

ㅡ¿Vamos? ㅡdijo alzando una ceja

ㅡSi ㅡhabló Nayeon emocionada ㅡNo planeas dejarme aquí sola, ¿no? ㅡse cruzó de brazos.

Jeongyeon lo pensó bien, sería muy peligroso llevar una híbrida de conejo blanco a ese lugar, pero tampoco quería decirle que no, no sabía que hacer, todo sería mas fácil si Nayeon no hubiera escuchado nada.

Últimamente la coneja estaba literalmente pegada a Jeongyeon, y si algo le pasaba sea bueno o malo, Nayeon siempre trataba de ayudarla, era como su pequeña ángel guardián. Poco a poco se convirtieron en muy buenas amigas, ambas se llevaban muy bien y se trataban con cariño.

Cuando Jeongyeon se iba a la universidad extrañaba a la hibrida y en los recesos la llamaba para saber como se encontraba o simplemente para saber si su casa seguía en pie y no estaba hecha un desastre o incendiada. Jeongyeon era la que siempre cocinaba con Nayeon mirándola a ella y al proceso, porque si fuera por la hibrida comerían cereales con yogurt todos los días.

Se percató que Nayeon aun seguía mirándola y esperando su respuesta, no podía negarse. ¿Cómo decirle no a aquel hermoso angelito?

ㅡEsta bien, iras conmigo...

La híbrida al solo escuchar esas cuatro palabras empezó a dar pequeños saltos de alegría y abrazo a Jeongyeon por el cuello haciendo que se juntaran y empezó a darle pequeños besos por el rostro, haciendo que esta se sonrojara.

La pelicorta pensó que ya se había acostumbrado a esas muestras de afecto por parte de Nayeon, pero era muy sorpresivo para ella cuando lo hacía aún, aunque no podía negar que le gustaba.

ㅡBien... ¿A donde iremos? ㅡpreguntó la híbrida emocionada.

ㅡEs un fiesta en una discoteca para celebrar el fin de ciclo de mi universidad. ㅡComentó Jeongyeon ㅡPero antes de ir, tendrás que ocultar algunas de tus cosas...

Jeongyeon señaló las grandes orejas y los pequeños bigotes de la híbrida, quien inmediatamente tapo sus rostro con sus manos.

ㅡOhh... ㅡsoltó Nayeon, su emoción por ir había disminuido.

ㅡNo te preocupes lo solucionaremos. ㅡhabló Jeongyeon dándole una sonrisa que la contagió.

Ambas sabían que se ponía en peligro la seguridad de la hibrida, pero Nayeon insistía así que no le quedaba mas que aceptar.

Aunque podría pasar algo malo.

Hola buen día, ¿como dormiste anoche?