𝑡𝑟𝑒𝑠

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10 años:






















Después de esa vez, hubo más, comenzaron “leves” comparadas a lo que me esperaba.

Puñetazos en el estómago, en el rostro, estrellar mi cabeza contra la pared, unos clásicos.

No entendía que me detenía, podía decirle a todo el mundo lo que hacía, pero era tan confuso, tan interesante.

Cuando él me golpeaba todos hacían la vista gorda, nadie veía nada, nadie se enteraba, creía que éramos invisibles a los ojos de los demás, que incluso solo yo podía verlo y sentir su maltrato.

Tengo la estúpida y extraña manía de quedarme mudo cuando algo me perturba demasiado, y James, James me perturba.

Él quería “enseñarme a sentir” era gracioso, Fynn le contó de mí, de lo que sentía, mejor dicho, de lo que no podía sentir, y él tomó la decisión de enseñarme la más importante.

El dolor.

Un día me salí de la rutina.

Sentía que todo daba vueltas, me encontraba tirado en el piso del baño y el espejo tenía algunas manchas de sangre por las veces que James estrelló mi cabeza contra el.

Nada parecía estar fuera de lo usual, era simple, cuando él me golpeaba no podía hacer nada, absolutamente nada, él tenía el control, mi cuerpo no reaccionaba y mi lengua desaparecía.

Pero en ese momento, cuando él iba a volver a tomar mi cabello, reaccioné, por fin lo hice, cubrí mi cabeza con ambas manos y sentí mi cuerpo temblar.

—¿Qué? ¿Por qué te cubres? ¿Te duele? —por fin escuchaba ese tono de voz en él después de tiempo, parecía que empezaba a aburrirse de mis nulos avances, pero este lo reavivó.

—Sí, duele, duele mucho —respondí aun sin bajar la guardia, pero no podía apartar la mirada de sus ojos, brillaban de una forma extraña, no era por felicidad como lo había visto en otras personas.

Era más… Oscuro.

—¿En serio? ¿Y qué duele? ¿Cómo? —él empujó mis brazos y estos volvieron a descomponerse, me tomó de la camisa y me alzó—. Dime todo, que sientes, donde lo sientes.

Su voz parecía desesperada, incluso esperanzada, me pregunté que lo llamaba, que lo motivaba.

—Duele, duele donde tú golpeas, por eso me cubro —pensé que tal vez eso lo alegraría o encendería más su fascinación, pero fue todo lo contrario, su rostro se contrajo de puro odio y desprecio.

Estrello mi cuerpo contra la pared y mi cabeza volvió a dolerme.

—Eres completamente inútil, maldito idiota —mientras me maldecía, caí al suelo y no pude evitar comenzar a reírme, era gracioso, muy gracioso.

Él se agachó y volvió a tomarme de la camisa con fuerza, empezó a preguntarme por qué reía, pero ni yo mismo entendía bien el porqué, solo podía seguir y seguir riendo mientras él me golpeaba por la rabia del momento.

Era bueno no sentir nada, ahora solo soy un cobarde.
































Bueno hay algo que deben saber, esta historia es mi catarsis, sí, lo es por qué es mi historia.

Esto me pasó a mi, no se si alguno recordara el mensaje que subí contando que enfrenté a mi bully, bueno, de eso se trata.

Yo tengo esquizofrenia y Tid, ambos me dieron apatía y como comenté en el capítulo anterior, se hizo gradual por mi bully, al principio si me causaba gracia lo que sucedía, porque no entendía lo que pasaba a mi al rededor, no sentía dolor ni nada por el estilo.

Todo cambio cuando empecé a sentirlo, pero ya era algo tarde.

Hay cosas que si son pura ficcion, como la participación de Hyunjin y otras cosas, pero eso es spoiler así que no, en fin.

Espero les haya gustado.

~JJ se despide ;3

‿✿𝐹𝑎𝑖𝑟𝑦𝑡𝑎𝑙𝑒࿐जहाँ कहानियाँ रहती हैं। अभी खोजें