El Clan De Los Mártires

¿Es Correcto?

En el dojo de la casa justamente en el centro se encontraban los hermanos sentados en círculo, era usual que hicieran eso cuando planeaban algo pero está vez no era así. En el centro del pequeño grupo se encontraba el escrito anónimo que raramente iba dirigido a ellos.
Después de un largo rato en silencio Suichi volteó hacia su hermano quien estaba pensativo al igual que todos, mirando la carta.

-Vamos, abre la carta-
Le dió un golpe en el brazo a lo que él no parecía ni inmutarse.

-¿Seguro que será algo bueno?-
Preguntó Shinobu.

-¿Seguros que será correcto abrirla?-
Está vez fue Soshin quien hizo la pregunta.

-No sabremos hasta que alguien lo haga-
Respondió con ironía Suichi.

-Por primera vez estoy de acuerdo contigo-
Shiro vio a su hermano de reojo para después tomar la carta.

Todos estaban a la expectativa de lo que se trataba, cuando la carta fue desenvuelta y leída los tres seguían expectantes.

-Es extraño...-
Expresó al terminar de leer la carta.
-Por alguna razón alguien sabe los próximos movimientos de los ladrones Ryū-

-¿Te refieres a la persona que escribió la carta?-
Le cuestionó Shinobu.

-Si, o quien sabe-
Se puso pensativo y volvió a revisar la letra de la carta.
-Lo que si es evidente son las fallas ortográficas pero la letra es muy elegante-

-A de ser algún comerciante-
Supuso Suichi.

-Tal vez... Alguien como...-

-Una mujer-
Dijeron ambas muchachas al unísono.

-Si, probablemente una mujer que esté aprendiendo a escribir-
Así fue como la teoría se terminó de formar por parte de todos.
-Eso explicaría el hecho de que usa hiragana-
Les explicó Shiro mostrándoles la carta.

-Claro, no habría dudas de ello-
Soshin estuvo de acuerdo con ello y pensándolo mejor le surgió una interrogante.
-Pero... ¿Porqué sabría esta supuesta mujer lo que sucederá con Ryū y su gente?-

-Ni idea-
Suichi se apresuró a responder.
-Tenemos que averiguarlo-
Eso último lo dijo golpeando su puño contra su mano.

-Nos envió la carta por algo, ¿Qué querrá de nosotros?-

-¿Pues que más? Que los detengamos-
Estando muy seguro volvió a responder la pregunta de su hermana mayor.

-Pareces muy confiado por esto-
Shiro lo vio de reojo y como respuesta el adolescente se encogió de hombros.
-No olvides que puede tratarse de una trampa-

-¿Y si no lo es?-
Le cuestionó un tanto desafiante.

-De cualquier forma, no podemos arriesgarnos-

-Pero...-
Protestó Shinobu al instante.

-No-
Les respondió a ambos con firmeza por lo que estos solo lo miraron con asombro.
-Recuerden nuestra posición, empeorar nuestra reputación solo hará más difíciles las cosas y sobretodo ponerlos en peligro a ustedes-

-¿Porqué nosotros?-
Le preguntó la melliza nuevamente.

-Pueda que hayan mejorado y entrenado duro hasta llegar donde están pero no tenemos experiencia en el combate, sobretodo ustedes, son muy jóvenes aún-
Se los dijo con un toque de advertencia Pero también preocupación lo cual esto último no se podía notar de forma tan simple Pero era suficiente para poder comprenderlo.

Luego de enfrentamientos entre miradas Soshin se acercó a la pequeña discusión.

-Tiene razón, lo que menos necesitamos ahora es que peligren de alguna manera-
Les dijo ella de una forma más apacible.