[Capítulo 20]🔫

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—¿Y cual es el plan? —pregunte con una pequeña sonrisa y limpiando pequeñas gotitas saladas traicioneras de mis ojos.

Me prepare para las burlas de Dazai con un comentario agudo, pero no dijo nada. En cambio, giro su cabeza con cara inocente.

Lo que siempre era sinónimo de malo.

—¿Cuál plan? ¿Había que tener un plan?

Diosito mío. Ven a buscarme.

—Es broma ¿no?

Luego de todo el momento conmovedor, donde abrimos nuestros corazones, esta situación era perfecta para caer en la locura y el homicidio.

—Te voy a matar.

Me sonrió.

—Que las costumbres no se pierdan, Mari-san, pero por lo general soy yo el que quiere matarse.

Hice una mueca de desagrado. Maldito enfermo. Ya le estaba teniendo esperanza, pero árbol chueco nunca se endereza.

Oda se aclaro la garganta, su expresión era de incomodidad.

—Deberíamos irnos. El tiempo se nos acaba.

La mano de Rui tomo la mía.

—Claro que tiene un plan, no le hubiese pedido ayuda, si no fuera porque es un sociópata inteligente, manipulador y sabe como llevarle el paso a papá.

—Que lindos halagos.

—Vamos moviéndonos—dijo Oda calmado.

—Te odio tuerto manipulador —le gruño mi adorable hermana al pobre Dazai.

—Mejor cállate—termine soltando, ya cansada de todo, menos de Oda, jamás de Oda.

Caminamos mirando en todas direcciones con cautela, Oda adelante, con su experiencia y habilidad custodiándonos, yo utilizando con cuidado los sentidos de las sombras, podía sentir las personas en un radio de un par de metros, las sombras de las personas tenían un atributo único. Mi tío lunático no tenía sombra que sentir.

Fue entonces que lo note, a él.

Mire a mi hermana Rui de este mundo, su abrazo cálido de antes, su cálido cariño que siempre trataba de entregarme, al cual yo me negaba.

Sentía muchos parecidos con Toshiko y su caída a la locura. Ambos éramos de otro mundo y sabíamos que este era ficticio, crecí con esa convicción y no dejaba entrar a nadie a mi corazón.

Esta buena hermana o...

Disimuladamente me envolví en sombras para que los demás no me escucharan desaparecer en otra dirección.

Tenia un asunto pendiente con alguien.

Esta situación me hizo comprender que Rui es mi hermana y verdaderamente la quería.

Respire profundamente preparando mi acelerado corazón, para la siguiente conversación incomoda. Tome el pomo de una de las puertas del almacén.

Sentía a la otra persona tras la puerta.

—Hola, padre.

Mori Ogai miraba la pared con los brazos tras la espalda, no podía leerlo con claridad. Parecía calmado y en control, se giró, sus ojos eran serios. Nunca era buena señal.

Eran estos instantes en que este hombre me parecía escalofriante.

Trague saliva.

—Creo que debemos hablar  — mi voz tembló, no sabía exactamente de que debíamos decirnos, pero en mi interior, Ogai y yo debíamos hablar al menos una vez antes del final.

🔫Shadows [Dazai] 0.1Where stories live. Discover now