𝐄𝐱𝐭𝐫𝐚 𝐙𝐢𝐚𝐦 𝐝𝐨𝐬

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—¡Levántate Payne! ¡arriba!— su cara había sido impactada contra el suelo arenoso por segunda vez en lo que llevaba del día, comenzaba a aceptar que no estaba en forma para un combate cuerpo a cuerpo, pero era un alfa, el debía mostrarse como tal.

Sacudió su uniforme al ponerse de pie, sintió el sabor metálico en su boca debido a la sangre y aunque quería solo correr e irse a la cama no se rindió, recibió un golpe, seguido de otro hasta que finalmente conecto uno con su oponente justo en la barbilla mandando a este al suelo, de donde tuvo que ser levantado por otros dos oficiales y llevado a la enfermería.

Liam tenía una fuerza increíble, podía dejar inconsciente a cualquiera con un solo golpe, además de una velocidad sin igual en su forma animal, un olfato excelente y una inteligencia vivaz, y como no, si prácticamente le habían entrenado toda su vida, el era quinta generación en la milicia, su padre llegó a ser coronel, su abuelo un mayor, su bisabuelo estuvo al frente durante años, trayendo victorias a su pueblo, nació entre militares, creció y vivió entre ellos, en su casa no había opciones, si nacías alfa, te esperaba el ejército.

Adoraba a su familia, de verdad lo hacía, pero si pudiera elegir, desearía tener alguna otra, una normal, donde no se hablara de armas en la cena o con quien matar no fuera un tema que se celebrara con orgullo siempre que fuera en nombre de una nación.

A sus 18 y sin que dijera una sola palabra, fue enlistado, no le dieron elección, mucho menos le desearon suerte, contrario a eso, su padre, el teniente Payne le exigió una conducta intachable, o sería el mismo quien se lo llevaría a sus filas, sobra decir que Liam se estremeció ante la idea, si el ejército ya era de por sí difícil, seguir órdenes de un tipo tan cruel como lo era Farid le costaría la vida.

Se entrenó, cayó, y muchas veces pensó en escaparse, en huir al bosque y vivir como un ermitaño, pero siempre desistía debido al miedo, sería encontrado, y su padre lo mataría sin dudarlo en ningún momento por ser tan cobarde.

Estuvo dos años en una base militar donde al mostrar sus cualidades fue transferido a Islandia donde entrenaban quienes estaban apunto de ir al campo de batalla, su cumpleaños 21 lo paso allí, pero nadie lo sabía, soplo un fósforo como una vela y pidió solo una pizca de felicidad en su realidad tan oscura.

Ahora estaba allí, junto a la enfermería preguntando por el chico al que había herido, aún si era un entrenamiento y aún si este le había golpeado e insultado primero, se sentía mal de cierta manera por lo que cuando la doctora le informó que estaba fuera de peligro, para él fue un alivio saberlo.

De pronto un gruñido le llamo la atención, levantó la vista y a lo lejos encontró a dos lobos peleando, o más bien, a uno casi matando a otro y ni siquiera lo pensó, cambió  de un segundo a otro alzándose contra el lobo mas grande logrando que este dejara en paz al pequeño, sabía que no ganaría pero al menos el más pequeño estaba a salvo, terminaron derribando unas rejas que contenían los alimentos para todos los soldados y entre ese desastre, una voz los detuvo en seco.

‐¡Payne! ¡Roberts! ¡los quiero vestidos y en mi oficina en dos minutos!–

Zayn, el subteniente beta, la pezadilla de todo el batallón, Liam agacho las orejas cuando escucho su voz para después correr de inmediato acatando la orden, en exactamente minuto y 50 segundos ambos alfas estaban delante de su superior, con la cabeza gacha.

—Los dos ¿tienen una explicación? Este no es el campo de batalla, acabaron con las provisiones de una semana para todo el batallón por su rabieta de niños, los dos van a pasar la tarde recogiendo cada resto de comida y a lavar los baños con un cepillo de dientes por una semana! -

—Yo solo me defendí señor...

—¿Te defendiste Payne? Siempre es la misma historia, o te defiendes o defiendes a alguien.  ¡Ninguno sabe nada sobre control!- Zayn golpeo su escritorio tomando una carpeta de este después- sepan que esto quedará en su registro, en especial tu Payne, es la cuarta vez esta semana ¿que tienes que decir en defensa?

𝐒𝐮𝐛𝐫𝐨𝐠𝐚𝐝𝐨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora