15. Un chico especial.

3.4K 254 16
                                    

Me debatí mucho entre si acudir o no. Aún seguía en shock por el encuentro, nunca ni en mis más retorcidos sueños, hubiera imaginado encontrármelo en aquel lugar. Durante el camino de regreso a casa estuve muda, tanto las chicas como Octavio me preguntaban quién era él, de donde lo conocía... y sobre todo, como fregados permití que me abrazara, como si quiera soporte que estuviera cerca de mí de esa manera. No tenía idea tampoco de como sucedió, solo sé que estar en sus brazos fue un soplo de aire después de meses de miedo, incertidumbre.  Estaba muy confundida, las cosas sucedieron tan rápido que apenas comienzo a procesarlas. 

Lo único que pude decirles fue que estaba bien, que solo era la sorpresa... no sé quedaron nada convencidos, pero no me presionaron, con las mismas se fueron y entre a casa. Por suerte mis padres ya estaban dormidos, así que no me vieron entrar, se hubieran asustado por el estado en que me encontraba... temblaba, apenas podía contener los sollozos y mi corazón latía con fuerza, todos los recuerdos que había mantenido a raya, emergieron y el pánico me hizo presa suya nuevamente. En medio de la crisis en la que caí, solo podía estar segura de algo y es que  no le temía a él, estaba segura que no me haría daño... simplemente verlo de nuevo me hizo recordar esos sucesos tan desagradables, pero no era por él que me encontraba así.

Apenas pude dormir un par de horas y gracias a las pastillas que ya había dejado de tomar pero a las que fue necesario recurrir. Mis tranquilizantes. Cuando desperté por la mañana, aparente toda la calma que me fue posible frente a mis padres, no quería preocuparlos nuevamente. Me enfrasque en tarea pendiente, ordene mi habitación y jugue con Génesis, trate de ocuparme la mayor parte del día para no pensar en lo mismo. Ignore las llamadas y mensajes de las chicas, de Octavio... no estaba lista para enfrentar de nuevo sus preguntas.

Seguía muy confundida respecto a qué hacer, sabía que no debía ir a encontrarme con él, que sería peligroso y corría el riesgo de ser  encerrada de nuevo, sin embargo algo me decía que el chico era sincero y no me haría daño de nuevo. Suena absurdo pero creía en las palabras de Gonzalo... Gonzalo, después de un año por fin tenía nombre mi pesadilla, después de imaginar miles de veces, por fin lo conocía por quién es. 

Es estúpido pero quería verlo de nuevo, comprobar que no fue solo una ilusión, que no fue parte de mi loca cabecita que no supera lo sucedido... además quería comprobar el hecho de no sentirme incómoda ante su cercanía, aún no lograba digerir eso, como rayos pudo abrazarme, acercarse tanto sin provocarme ninguna de las horribles sensaciones que hasta con Octavio que sabía no me haría daño, sentía. Creo que es lo que más me sorprende de todo esto, lo que me confunde.

—¿Vas a salir? —Preguntó mamá cando me vio bajar, aún no había decidido si ir o no...

—Eso creo—Murmure distraída.

—Bien, no regreses tan tarde, anoche ni siquiera te escuchamos llegar—No lo decía a modo de regaño, solamente se preocupaba demasiado por mí al saberme en la calle a deshoras.

—Sí, no te preocupes—

Camine en el estacionamiento de aquel parque, decidiendo entre presentarme o no. Varias veces comencé a caminar hacia el lugar donde dijo, pero el miedo y los recuerdos me invadían haciéndome retroceder nuevamente. Respire varias veces, tomando valor... necesitaba hacerlo, tal vez era la manera de reconciliarme con lo sucedido y superarlo de una vez por todas, era la oportunidad de enfrentar mis miedos y vencerlos.

Cuanto más me adentraba al sitio, más gente había... niños, madres y mascotas correteando por todos lados, eso me dio algo de seguridad aunque ciertamente no significa nada, si él me quería hacer daño, lo haría con o sin personas alrededor. Mi corazón latía cada vez más rápido, y no por el miedo usual, si no por el nerviosismo de verlo nuevamente.

Chica Incorrecta ©Where stories live. Discover now