Capítulo 9

2.4K 295 169
                                    

Narra Samantha

Me ignoro y salió de la habitación, me quejé nuevamente y me puse de pie, me puse mis zapatos y camine a dónde estaba él, salimos de la cabaña y caminamos más adentro del bosque, ibamos en silencio, era extraño verlo en ropa de civil, traía una camisa negra ajustada a su cuerpo, su pasamontañas, un pantalón táctico color negro y sus botas. Él se detuvo y volví mi vista al frente.

— ¿Te gusta? - preguntó -

— Es increíble - sonreí - es tan lindo.

Frente a nosotros había un lago con una cascada, todo se veía increíble, camine hasta la orilla, me quité los zapatos, quité mi blusa por encima de mis brazos y baje mis jeans, camine hasta la orilla y toque el agua con mis pies, se sentía tan bien esa sensación, fui entrando más y más. El agua estaba fría pero con el calor que tenía no molestaba mucho, camine hasta que el agua cubrió mi cintura, mi cuerpo se erizo por completo. 
Gire a ver para atrás de mí y él estaba ahí viéndome, sonreí y estiré mi mano en su dirección haciendo una seña de que viniera conmigo.

— Ven - hablé - 

— No - negó - aquí estoy bien.

— Por favor, ven - volví a insistir - o iré por ti.

— No me gusta.

— Estamos solos - lo miré - nadie va a verte, confía en mí.

Se quedó por unos segundos viéndome hasta que vi como comenzaba a quitarse su camisa, sonreí y me di la vuelta para seguir caminando al interior del lago. Segundos después escuché como caminaba en mi dirección, me espere un poco y giré a verlo, él estaba detrás de mí, el agua me cubría un poco el pecho, a él solamente la mitad de su torso.

— ¿Cómo sabías que iba a gustarme este lugar? - alcé mi mirada - 

— Solamente lo intuí - respondió - 

— Pues estás en lo correcto - respondí - me gusta demasiado este lugar.

— ¿Sabes nadar bien?

— Sí - asentí -

— Y no te da miedo la posibilidad de que la corriente te jale y no puedas nadar, te hundas e irte quedando sin aire lentamente, sentir tus pulmones se queman por el agua que esta entrando por tu nariz, nadie te ve, nadie te escucha, estás tú solamente peleando contra la nada - susurró acercándose más a mí - 

— Nunca lo había pensado - respondí viéndolo a los ojos - 

— Samantha - su voz se hizo un poco más grave - ¿No le tienes miedo a la soledad?

— Demasiado.

— ¿No te da miedo estar conmigo, sola? - dijo acercándose más - aquí nadie podrá escuchar tus gritos, nadie te verá, nadie sabe que estamos aquí pero sería divertido escuchar tus gritos.

— ¿Por qué debería tener miedo? - pregunté provocando que él soltará una risa entre dientes - mejor dime algo.

— ¿Qué?

— ¿Soy tu obsesión? - susurré - 

Él se quedó en silencio, frunció el ceño y su respiración se volvió pesada, me fui haciendo para atrás entrando más al agua a tal grado que mis pies ya no tocaban el piso.  

— Responde - lo miré - 

— ¿Por qué quieres saberlo?

— Solamente es curiosidad - respondí - 

— La curiosidad nunca es buena, conejita.

No sé porque al escuchar eso sentí una corriente eléctrica recorrer todo mi cuerpo, de un momento a otro sus manos estaban en mi cintura, comencé a temblar por los nervios. Se pegó más a mi cuerpo, mis ojos seguían todos sus movimientos.

Obsession    [Nikto & O.C]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora