Dark Love| "Reyes de la oscuridad"

Parte 67: "Revelaciones 🫀"

—Me asuste mucho cuando te trajo Bill todo lleno de sangre, pensé lo peor. *dije casi llorando viendo su rostro*

—Yo pensé que ibas a estar feliz, por librarte de mi.

—Claro que no... no quiero que te pase nada.

—Bueno mi amor... pero debes de estar preparada para eso, siendo el tipo que soy en cualquier momento me pueden matar, y debes de estar consciente.

—¿Y lo dices así tan tranquilo?

—¿Quieres que te lo diga llorando? Pues no mi amor, así son las cosas, un día de estos quizá ya no regrese.

—No quiero que te pase nada, tampoco quiero que me estés diciendo eso. *dije queriendo llorar abrazando a Tom*

|Tom sonrió abrazando mi cuerpo cuando lo escuché decir...|

—Solo te estoy diciendo la verdad, en el mundo en el que yo vivo la mayoría quiere mi muerte y no van a desaprovechar la oportunidad de matarme o de hacerle daño a los míos incluida tú mi amor. Por eso necesito que dejes todos los miedos a un lado, y antes de pensar en todo lo demás, piensa primero en ti, y en sobrevivir de un modo o de otro... si llegas a recibir algún ataque tienes que defenderte. Nunca demuestres debilidad ante un enemigo, aunque estes apuntó de morir, nunca muestres debilidad, aunque por dentro te esté llevando la fregada, tú eres mi esposa... la señora de Kaulitz y tú eres fuerte. Nunca confíes completamente en nadie si no te han demostrado con hechos su fidelidad, debes estar atenta a todo lo que escuches y a todo lo que veas, siempre es bueno tener información porque en un futuro la puedes utilizar y nunca dudes en jalar un gatillo para sobrevivir, porque no siempre voy a estar yo cerca de ti para defenderte.

|Yo escuché con mucha atención todo lo que decía, lo mire fijamente y pase mi mano por su mejilla, me acerqué a él y le di un beso, que él correspondió con gusto, enredándonos los dos en un intenso beso.|

|Luego nos separamos y lo volví a ver fijamente.|

—¿Qué pasa mi amor? *preguntó al ver la forma en la que lo miraba*

—Me preocupe mucho por ti.

—Yo pensé que me odiabas, ya muerto podrías volver a tu casa, y a tu vida de antes.

—Ya no quiero volver a mi vida de antes, yo quiero estar contigo. *dije sonrojada*

—Yo también quiero que estes conmigo. *dijo con una sonrisa*

—Ayer vino un hombre, dijo Miguel que no era ningún socio tuyo, pidió hablar conmigo, lo dejaron ingresar... bueno yo di la orden, de que lo dejaran ingresar.

—¿Quien era?

—César Montiel.

—¿Qué fue lo que te dijo?

—Solo dijo que venía a ponerse a mis órdenes porque se había enterado que habías sufrido un atentado, pero yo negué todo... le mencioné que tú no estabas a bordo de las camionetas cuando sufrieron el atentado.

—Hiciste muy bien mi amor. *dijo sonriendo*

—¿Estas enojado porque lo deje entrar?

—Claro que no mi amor, después de todo... tú todavía no sabes nada del negocio, pero que huevos de ese cabrón de venir a pararse aquí.

—Miguel me dijo que estaba casi seguro, que ese hombre fue él culpable del atentado.

—Probablemente si... pero eso ya lo investigaremos, tú no te preocupes por nada. ¿Y dime cuantos días estuve apendejado? *dijo sacándome una sonrisa*