Dark Love| "Reyes de la oscuridad"

Parte 4: Negociación

—Bill, háblale al abogado para que prepare todo, vamos a firmar un contrato donde yo me comprometo a regresar todos sus vienes cuando su hija y yo nos casemos *pronuncio*

Después de unos minutos, el abogado ya se encontraba ahí preparando toda la papelería, una vez lista Tom firmó todos los papeles, y el papá de T/n también, los dos se pusieron de pie, y se dieron la mano por el negocio que habían cerrado.

Tom le hizo una seña a Bill, para que trajera una botella y unas copas, hicieron un brindis entre ellos dos, para festejar que serían familia muy pronto.

Tom regresó de nuevo a su escritorio, tomó una pequeña llave que se encontraba ahí y abrió un cajón, sacó su chequera tomó un bolígrafo color dorado, y empezó a escribir, lo arrancó y se lo dio al padre de T/n, su futuro suegro.

El hombre vio el cheque sorprendido, por la cantidad de dinero que Tom le había dado, cuando lo escuchó hablar.

—Con ese dinero quiero que pagues todas tus deudas, y lo que resta es para tu familia, no quiero que T/n ande pasando dificultades, mucho menos que ande en el trasporte público. Busca la manera para que ella se sienta cómoda , no quiero que le falte nada, cualquier cosa que ella necesite quiero que me lo hagas saber.

—Si señor no se preocupe *respondió el padre de T/n sin dejar de ver el cheque que traía entre sus manos*

—Otra cosa y la más importante, ella no se debe de enterar de nada, al menos no por ahora.

—¿Pero como voy a justificar todo este dinero y todavía lo demás?

—Podemos decir que estás trabajando para mi, así podrás Justificar todo, y también yo podría visitarte de vez en cuando para que ella me vaya conociendo. *dijo Tom dándole una jalada a su cigarro*

—Se hará todo como usted lo disponga.

—Solo quiero que todo quede muy claro, no quiero que T/n ande sufriendo carencias, yo voy a estar muy pendiente de ella, por qué para ser sincero, no le dan la atención que ella necesita.

—Yo me encargaré, de que todo sea como usted diga, tiene mi palabra que así será.

—Eso espero porque ella va a ser mi esposa. *mencionó Tom, dando un trago a su copa*

|Después de vario minutos, el padre de T/n abandono la propiedad, con una sonrisa en su rostro y un cheque gordo en su bolsillo dejando a Tom con Bill disfrutando de su copa.|  

—Creo que no leyó las letras chiquitas. *Dijo Bill*

—No, solo vio los ceros que iba a ganar, lamentablemente así es el ser humano, de inmediato se llena el ojo con cualquier cosa.

—¿Crees que todo salga como tú quieres?

—Ya está saliendo como yo quiero, solo tengo que tener paciencia.

—¿Y si ella no acepta? Digo si no te quiere ¿No sé si me explicó? 

—Tendrá que hacerlo no tendrá otra opción.

—Este capricho te va a salir muy caro

—Tal vez tengas razón, pero puedo darme ciertos lujos, y ella es uno de ellos.

—Habiendo tantas mujeres, y te viniste a fijar en una muchacha de buena cuna, quien se lo iba a imaginar.

—Sabes que ya estaba harto de nuestra familia, que quieran casarme y que me digan que forme una familia, siempre veía a las mujeres como una diversión y ahora les voy a dar ese gusto.

—Pero todavía falta un año para que termine sus estudios. *pronuncio Bill*

—Un año se pasa volando, mientras eso pasa seguiré creciendo el negocio, y preparar todo para cuando ella llegue aquí *comentó tomándose su trago de golpe*

—¿Confías en su padre?

—No, yo no confío en nadie y menos en ese cabrón, que ama el dinero más que a su propia hija.

—¿Seguiremos igual como hasta ahora? *preguntó Bill, ya que tenía meses atrás cuidando, y vigilando todos los pasos de T/n*

|Tom se había encargado hasta de pagar, sus colegiaturas atrasadas sin que ella se diera cuenta, siempre habían hombres cuidándola ya que la muchacha le gusta la fiesta y de vez en cuando llegaba hasta ebria a su casa.|

—Si, todo va a seguir igual, o mejor dicho me la van a cuidar más, porque ella va a ser mi futura esposa. También quiero que vigiles a ese cabrón de su padre, porque eso del juego le gusta demasiado y no dudes que se va a gastar la mayor parte del dinero que le di, en una casa de apuestas.

—Está bien pondremos más seguridad entonces, le colocaré algunos guardias vestidos de civil para que estén pendientes en todo momento de ella. *pronuncio el muñeco yéndose de ahí dejándolo solo*

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Después de unos minutos, que se había quedado solo, salió de su despacho, y avanzó rumbo a la cocina ahí donde se encontraba esa mujer a la que le tenía mucho aprecio.

—Márgara!! *grito Tom, haciendo brincar a la pobre mujer del susto, aventando un recipiente que traía en sus manos.

—Muchacho loco ¿quieres que me muera de un infarto? *dijo la mujer, mientras escuchaba a Tom que se carcajeaba.

—Perdón viejita chula, no pensé que te fueras a asustar tanto. *mencionó yendo hacia a ella abrazándola, era la única persona después de su hermano que la trataba con cariño y con respeto, pero nadie lo sabía solamente entre ellos.

|La mujer mayor al rededor de 60 años, le daba de golpes con una servilleta de tela que había agarrado de la mesa.|

—¿Me imagino que vienes a comer?

—Pues fíjate que no venía a eso, pero ya estando aquí, pues huele muy sabroso ¿que es lo que estás haciendo? *pregunto Tom asomándose a las ollas que tenia sobre la lumbre.*

—Le estoy preparando sopa a Robertita.

—No esa comida, no me gusta ya se me quitó el hambre.

—Y entonces si no venías a eso ¿A que vienes a mi cocina? Porque tú nunca vienes nada más a verme.

—Quiero que me desocupen la habitación que está al fondo del pasillo.

—¿Y eso porque? No me digas que maya, se va a quedar a vivir aquí.

—No, mi amiga se va el fin de semana con Roberta, a otro país el lugar de ellas es por allá

—¿Porque no la quieres aquí?

—Porque no me gusta, que se esté metiendo en mis cosas, ya bastante tengo con aguantarte a ti , que todo el tiempo me estás regañando, para todavía tener a maya aquí de planta.

—Me molesta cuando te pones en ese plan, que ni tú solo te aguantas.

—Pues así soy, y no pienso cambiar, y ya no me estes diciendo nada, *dijo Tom dando la vuelta yéndose de ahí*

—¿No me dijiste para cuando quieres la habitación desocupada? *pregunto la mujer deteniendo los pasos de Tom*

—Para ya mismo. *dijo Saliendo de ahí*

—Muchacho loco, amargado. *grito la mujer, con una sonrisa en su rostro, porque ella lo veía como un hijo a él y a Bill

Parte 5??