Esta es una historia donde pueden suceder toda clase de cosas : desde ir de caza con Dean y Sam Winchester pasando por tratar de recuperar la humanidad de Stefan Salvatore mientras te enamoras de Damon.
También podrás aconsejar a Hermione en su rel...
El sol despuntaba esa mañana en el cielo de Chicago. La noche pasada, Carmen le había pedido a Claire si podía despertarle temprano ya que tenía que ir a comprar cosas nuevas para el restaurante. El no era muy bueno con el tema de la decoración, así que le había pedido que si podía ir con él. Ella aceptó encantada.
El problema es que no paraba de revolverse en la cama con la mano puesta frente a los ojos sin ademán de levantarse. Ella le zarandeó suavemente de nuevo antes de que el soltara un gruñido propio de el animal al que se le asociaba.
-Está bien, ya voy -dijo enderezándose poco a poco-
Ella le observó mientras lo hacía hasta que estuvo totalmente frente a ella y alzó la mirada para observarla.
-Buenos días -sonrió tímidamente- perdona, es que no me gusta que me miren cuando estoy recién levantado -explicó frotándose los ojos con la mano- estoy hecho un desastre
-No es verdad ¿Quién te ha dicho eso? -preguntó enfadada- no les hagas caso, estás guapo, como siempre
Su sonrisa se hizo más amplia haciendo que ella sonriera también
-¿Carmy? -llamó y este la miró de nuevo-
-¿Qué?
-Deberías sonreír más, tienes una sonrisa preciosa -dijo y el asintió cabizbajo-
-Gracias, supongo -agradeció cabizbajo, su rostro se había teñido de un ligero rubor de lo más adorable-
-Anda vamos -invitó tendiéndole la mano- debemos elegir el color de tu nueva pared
-Si, deberíamos irnos ya -dijo levantándose- gracias por acompañarme Claire, significa mucho
-No voy a irme a ninguna parte oso -sonrió- te lo prometo
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